21 Abril 2014
REUTERS
JINDO, Corea del Sur.- La presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye, dijo hoy que las acciones del capitán y la tripulación de un transbordador que se hundió la semana pasada con cientos de personas a bordo eran equivalente al asesinato, luego de que las autoridades detuvieron a cuatro oficiales más del barco.
Se confirmó el fallecimiento de 64 personas y 238 están desaparecidas, presumiblemente muertas, en el hundimiento del transbordador Sewol el miércoles pasado. La mayoría de las víctimas son niños de secundaria, Reuters.
El capitán Lee Joon-seok, de 69 años, y otros dos miembros de la tripulación fueron arrestados la semana pasada bajo cargos de negligencia, y los fiscales anunciaron otros cuatro arrestos: dos primeros oficiales, un segundo oficial y un ingeniero jefe. Varios miembros de la tripulación, incluido el capitán, abandonaron el barco antes que los pasajeros, dijeron testigos.
Park dijo que el abandono de sus funciones por parte de la tripulación era equivalente al asesinato.
"Por encima de todo, la conducta del capitán y algunos miembros de la tripulación es incomprensible desde el punto de vista del sentido común, y fue equivalente a un acto de asesinato que no puede y no debe ser tolerado", dijo la mandataria durante una reunión con ayudantes, según citas difundidas por la agencia de noticias Yonhap.
Lee, el capitán, dijo en un video promocional grabado hace cuatro años que el viaje desde la ciudad portuaria de Incheon a la isla turística de Jeju era seguro, siempre y cuando los pasajeros sigan las instrucciones de la tripulación. También le dijo a un periódico que había estado involucrado en un accidente marítimo frente a las costas de Japón años atrás.
La ironía del video es que la tripulación ordenó a los pasajeros quedarse en sus cabinas mientras el ferry se hundía. Como es habitual en la sociedad coreana jerárquica, las órdenes no fueron cuestionadas.
Sin embargo, muchos de los que escaparon con vida no escucharon o desobedecieron las instrucciones y fueron rescatados mientras saltaban desde la cubierta.