17 Abril 2014
DOS SEMANAS CONVULSIONADAS. Los ediles deliberaron luego del escándalo por los contratos de familiares de la mediática Marianela Mirra.
LA GACETA/ FOTO DE INÉS QUINTEROS ORIO
Era una típica noche de otoño. La temperatura rondaba los 17 grados, y las calles de Yerba Buena estaban siendo recorridas por ciudadanos con camperas livianas. Adentro del recinto de sesiones del Concejo Deliberante, en cambio, el termómetro marcaba varios grados más. Luego de dos semanas agitadas para los políticos de ese municipio, a las 20.30 de ayer comenzó una sesión especial, en la que se le otorgó una licencia a la concejala opositora Dora Bianco para que asuma como jefa de Gabinete del intendente Daniel Toledo.
Semanas tumultuosas, porque dos miembros de ese cuerpo fueron protagonistas de episodios polémicos. El oficialista Luciano Villegas, por un lado, declaró a LA GACETA que había nombrado a la madre y al hermano de Marianela Mirra en esa intendencia, luego de que el periodista Jorge Rial publicara en Twitter que había dos ñoquis en Yerba Buena. Y la concejala Bianco, del partido opositor Por Yerba Buena, por el otro, fue criticada por sus pares, tras la decisión de sumarse al oficialismo.
La sesión fue convocada el martes por el presidente del cuerpo, el oficialista Antonio Caferro, con las firmas de los concejales Villegas, Enrique Casanova y Rolando Canseco -del toledismo-, Marcelo Albaca y Antonio Pisano -del Partido de los Trabajadores- y Bianco.
Al tratarse de una reunión especial, los ediles sólo pudieron debatir sobre los 20 expedientes que se incluyeron en el orden del día. Estos fueron, entre otros, un proyecto enviado por la Municipalidad para regular el procedimiento de la colocación de los trabarruedas a los vehículos y la copia del decreto por el cual Toledo aprobó una suba de la tarifa de los taxis, que fue puesta a referendo. Ambos dictámenes fueron aprobados con los votos de la mayoría.
También se trató un proyecto de resolución para gestionar la municipalización del servicio de aguas y cloacas. La iniciativa generó una prolongada controversia.
El edil macrista Pedro Albornoz Piossek, por ejemplo, se mostró cauto al respecto, y manifestó la necesidad de un debate más profundo. Otro opositor, Javier Jantus -el ahora ex compañero de banca de Bianco en Por Yerba Buena- también requirió que la iniciativa sea analizada. El radical Mariano Campero, quien ingresó al recinto pasadas las 21, se expresó en contra. No obstante, la moción fue aprobada.
El segundo tema que elevó la temperatura en el edificio de la avenida Solano Vera fue el pedido de licencia de Bianco. “Desde el primer día en que asumió, demostró que tiene más cintura que el mismo Lionel Messi, para hablar en contra de Toledo, y luego terminar votando a favor de sus proyectos”, dijo Albornoz Piossek. En seguida, comparó a Bianco con Leonardo Fariña, y citó la nota publicada en LA GACETA el domingo pasado, en la cual la concejala se refiere a su decisión. “Querían ficción, nos dio ficción”, ironizó el macrista.
Jantus tomó luego la palabra. Durante su exposición, dijo que el Ejecutivo se dedica a ponerle “torniquetes” a los ediles. Enumeró que primero les redujeron los nombramientos, de siete a dos contratos para cada uno, y que luego les pagaron de modo irregular los gastos de bloque (“recibí $ 100 en dos oportunidades, y nada más” -dijo). “Eso podría hacer que yo comprenda su decisión de irse, porque aquí no se puede hacer nada. Pero no. No la comparto. Este Concejo para mí es una vergüenza, por la absoluta injerencia del Ejecutivo. Ella fue elegida para legislar y para controlar”, afirmó.
A su turno, Campero también cuestionó a Bianco. “Tuvo actitudes que dañan a la democracia. Le hago el pedido, aquí mismo, de que cuando asuma, su primer acto de Gobierno sea entregar la lista de empleados municipales, contratados y permanentes”, pidió Campero.
Pissano y Albaca fueron otros que criticaron la movida, fundamentalmente, porque no renunció antes a su fuerza política, aseveraron. Con todo, pasadas las 23, los concejales aprobaron la licencia con los votos positivos de Caferro, Villegas, Canseco, Casanova y Albornoz Piossek. Jantus y Campero votaron en contra, y Albaca y Pisano se abstuvieron. Anoche, además, un grupo de vecinos marchó por las calles de la ciudad pedemontana, en reclamo de más seguridad.