16 Abril 2014
En poco más de un mes, el actual rector Juan Alberto Cerisola dejará su cargo luego de ocho años al frente de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT). Cuando Cerisola asumió su segundo mandato, en mayo de 2010, una serie de hechos políticos relevantes marcaron el último período de gestión y definieron el camino hacia la sucesión.
Apenas el rector comenzó a transitar por su segundo mandato al frente de la casa de altos estudios, dos denuncias relacionadas con el manejo de fondos provenientes de Yacimientos Mineros Aguas de Dionisio (YMAD) sacudieron los cimientos de la institución. Las presentaciones judiciales en sede federal buscaban indagar si es que se habían producido irregularidades en la contratación de obras financiadas con $ 400 millones que llegaron a la UNT mediante regalías.
Al promediar el mandato de Cerisola se produjo un hecho sin precedentes que marcó un nuevo paradigma político en la casa de Juan B. Terán: el desembarco de la agrupación peronista La Cámpora. Así, el histórico bastión radical cedió autonomía ante la llegada de jóvenes funcionarios que pasaron a ocupar puestos clave en la institución académica.
Previamente, las tomas de estudiantes en las facultades calentaron el clima preelectoral. Ellos decidieron luchar por la creación de comedores y por un boleto educativo gratuito.
El reclamo de los abuelos por la ocupación de una sede céntrica para el EPAM quedó políticamente opacado por el regreso del histórico operador universitario José Hugo Saab. El propio Cerisola lo había echado en 2009 por una interna política, pero retornó -de la mano del gobernador, José Alperovich- para apuntalar la candidatura de Alicia Bardón. El arribo de Saab se produjo cuando el actual rector decidió no pelear por un tercer mandato (prohibido por el estatuto de la UNT en su artículo 19).
La decisión de no reformar el estatuto fue adoptada por el Consejo Superior el año pasado. Sus miembros decidieron convertir en resolución una declaración firmada por los decanos de las 13 unidades académicas, y también por el propio Cerisola y por Bardón. Ahora, en un año histórico para la UNT, cuatro postulantes pretenden conducir los destinos de la institución.
Cuatro meses de ocupación de facultades
Tras conocerse presuntos casos de abuso sexual a alumnas de la UNT en el parque 9 de Julio, los estudiantes de Filosofía y Letras tomaron la facultad el 27 de agosto de 2013. Marcó el inicio de un período de lucha que se extendió hasta noviembre y que incluyó a otras tres facultades: Psicología, Ciencias Naturales y Artes. Reclamaban la declaración de la emergencia en violencia de género, un boleto educativo gratuito y comedores.
La Cámpora en la gestión universitaria
Fue histórico: el Centro Cultural Eugenio F. Virla, un reducto radical por antonomasia, fue sede de un mitin peronista. El 3 de junio de 2013 dos miembros de La Cámpora asumieron como funcionarios del gabinete de Cerisola: Ricardo Zupán como subsecretario de Extensión Universitaria y Rodrigo Alderete como subsecretario de Bienestar Universitario. Zupán se pronunció en favor de la re-reelección de Cerisola, generando el repudio de radicales.
Saab se peleó y se amigó con el rector
El regreso de José Hugo Saab al Rectorado sacudió el tablero político. Se había marchado del gobierno universitario peleado con el rector Cerisola, pero regresó para apuntalar a su candidata; Alicia Bardón. Amigo del gobernador, José Alperovich, Saab asumió en diciembre como coordinador del gabinete rectoral. Su regreso se sintió este año: uno de sus amigos, Gustavo “Tano” Vitulli, asumió como secretario de Bienestar Universitario.
Denuncias por el destino de utilidades
En 2010 se presentaron dos denuncias para que se investigue el destino de las utilidades de Yacimientos Mineros Aguas de Dionisio (YMAD). Ramón Eudal y Oscar López pidieron que se esclarezca si es que se habían producido irregularidades en la contratación de obras financiadas con esos fondos, unos $ 400 millones. En julio de 2011, por orden de la Justicia Federal, Gendarmería realizó allanamientos en la UNT.
Conflicto con los adultos mayores
A fines de 2012, los alumnos del programa Educación Permanente para Adultos Mayores (EPAM) se quedaron sin sede: la casona de Virgen de la Merced (ex Rivadavia) 417, donde se dictaban los cursos y talleres, cerró por una deuda de alrededor de $ 800.000 con los dueños del inmueble. El rectorado destinó la ex usina de Agua y Energía ubicada en Sarmiento al 1.100. Pero inmediatamente explotaron las quejas. Los reclamos llegaron hasta Tribunales
Disputa entre Cerisola y un diputado
La ruptura entre el rector Cerisola y su socio político, el diputado nacional Luis Sacca, generó un cimbronazo. Si bien se venía hablando de que la relación no era buena, la primera evidencia palpable fue la separación del gabinete rectoral de funcionarios que respondían a Sacca. El divorcio político entre Sacca y Cerisola implicó una pérdida de espacios de poder para el legislador. Tras la pelea con Cerisola, Sacca avala a Eduardo Coletti para rector.
Apenas el rector comenzó a transitar por su segundo mandato al frente de la casa de altos estudios, dos denuncias relacionadas con el manejo de fondos provenientes de Yacimientos Mineros Aguas de Dionisio (YMAD) sacudieron los cimientos de la institución. Las presentaciones judiciales en sede federal buscaban indagar si es que se habían producido irregularidades en la contratación de obras financiadas con $ 400 millones que llegaron a la UNT mediante regalías.
Al promediar el mandato de Cerisola se produjo un hecho sin precedentes que marcó un nuevo paradigma político en la casa de Juan B. Terán: el desembarco de la agrupación peronista La Cámpora. Así, el histórico bastión radical cedió autonomía ante la llegada de jóvenes funcionarios que pasaron a ocupar puestos clave en la institución académica.
Previamente, las tomas de estudiantes en las facultades calentaron el clima preelectoral. Ellos decidieron luchar por la creación de comedores y por un boleto educativo gratuito.
El reclamo de los abuelos por la ocupación de una sede céntrica para el EPAM quedó políticamente opacado por el regreso del histórico operador universitario José Hugo Saab. El propio Cerisola lo había echado en 2009 por una interna política, pero retornó -de la mano del gobernador, José Alperovich- para apuntalar la candidatura de Alicia Bardón. El arribo de Saab se produjo cuando el actual rector decidió no pelear por un tercer mandato (prohibido por el estatuto de la UNT en su artículo 19).
La decisión de no reformar el estatuto fue adoptada por el Consejo Superior el año pasado. Sus miembros decidieron convertir en resolución una declaración firmada por los decanos de las 13 unidades académicas, y también por el propio Cerisola y por Bardón. Ahora, en un año histórico para la UNT, cuatro postulantes pretenden conducir los destinos de la institución.
Cuatro meses de ocupación de facultades
Tras conocerse presuntos casos de abuso sexual a alumnas de la UNT en el parque 9 de Julio, los estudiantes de Filosofía y Letras tomaron la facultad el 27 de agosto de 2013. Marcó el inicio de un período de lucha que se extendió hasta noviembre y que incluyó a otras tres facultades: Psicología, Ciencias Naturales y Artes. Reclamaban la declaración de la emergencia en violencia de género, un boleto educativo gratuito y comedores.
La Cámpora en la gestión universitaria
Fue histórico: el Centro Cultural Eugenio F. Virla, un reducto radical por antonomasia, fue sede de un mitin peronista. El 3 de junio de 2013 dos miembros de La Cámpora asumieron como funcionarios del gabinete de Cerisola: Ricardo Zupán como subsecretario de Extensión Universitaria y Rodrigo Alderete como subsecretario de Bienestar Universitario. Zupán se pronunció en favor de la re-reelección de Cerisola, generando el repudio de radicales.
Saab se peleó y se amigó con el rector
El regreso de José Hugo Saab al Rectorado sacudió el tablero político. Se había marchado del gobierno universitario peleado con el rector Cerisola, pero regresó para apuntalar a su candidata; Alicia Bardón. Amigo del gobernador, José Alperovich, Saab asumió en diciembre como coordinador del gabinete rectoral. Su regreso se sintió este año: uno de sus amigos, Gustavo “Tano” Vitulli, asumió como secretario de Bienestar Universitario.
Denuncias por el destino de utilidades
En 2010 se presentaron dos denuncias para que se investigue el destino de las utilidades de Yacimientos Mineros Aguas de Dionisio (YMAD). Ramón Eudal y Oscar López pidieron que se esclarezca si es que se habían producido irregularidades en la contratación de obras financiadas con esos fondos, unos $ 400 millones. En julio de 2011, por orden de la Justicia Federal, Gendarmería realizó allanamientos en la UNT.
Conflicto con los adultos mayores
A fines de 2012, los alumnos del programa Educación Permanente para Adultos Mayores (EPAM) se quedaron sin sede: la casona de Virgen de la Merced (ex Rivadavia) 417, donde se dictaban los cursos y talleres, cerró por una deuda de alrededor de $ 800.000 con los dueños del inmueble. El rectorado destinó la ex usina de Agua y Energía ubicada en Sarmiento al 1.100. Pero inmediatamente explotaron las quejas. Los reclamos llegaron hasta Tribunales
Disputa entre Cerisola y un diputado
La ruptura entre el rector Cerisola y su socio político, el diputado nacional Luis Sacca, generó un cimbronazo. Si bien se venía hablando de que la relación no era buena, la primera evidencia palpable fue la separación del gabinete rectoral de funcionarios que respondían a Sacca. El divorcio político entre Sacca y Cerisola implicó una pérdida de espacios de poder para el legislador. Tras la pelea con Cerisola, Sacca avala a Eduardo Coletti para rector.
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