Oficialistas y opositores centran su agenda en la inseguridad

BUENOS AIRES.- Mientras la Presidenta, Cristina Fernández, quiere sacar de la agenda pública lo que considera una psicosis injustificada, el diputado nacional por el Frente Renovador, Sergio Massa, aseguró que los últimos episodios violentos de vecinos contra delincuentes representan “un mensaje de la sociedad” a la dirigencia política: “Hagan algo por favor frente a la inseguridad”.

Durante su participación en el programa de Mirtha Legrand, que se emite por canal 13, el ex intendente de Tigre volvió a apoyar las medidas anunciadas por el gobernador bonaerense Daniel Scioli, para combatir la inseguridad. “Fue una buena decisión de Scioli. Es un reconocimiento de las dificultades que tiene”, dijo.

Al ser consultado sobre los últimos linchamientos de vecinos a delincuentes en distintos puntos del país, el legislador advirtió: “No vale la pena ni siquiera analizarlo. Es un delito, no se puede justificar. En paralelo todos tenemos la obligación y responsabilidad de generar un estado presente en la lucha de la prevención y la mirada más profunda, educación, inclusión y la construcción de una sociedad más justa”.

En ese marco, Massa consideró que la Justicia “tiene serios problemas de funcionamiento”. “La impunidad también genera mal clima social”, señaló, al tiempo que remarcó la necesidad de “descentralizar” el Poder Judicial.

No a la emergencia

Mientras tanto, el diario La Nación, señala que la presidenta Cristina Fernández, tomó distancia de la emergencia en seguridad que declaró el gobernador bonaerense, Daniel Scioli.

Agrega que la jefa de Estado, considera una psicosis injustificada por la ola de robos, homicidios y linchamientos. Pero al mismo tiempo analiza medidas contra los motochorros y contra los extranjeros que ingresan al país para delinquir.

Además, dice, presiona a la Corte Suprema para que los jueces interpreten la ley de manera rigurosa y sin liberar delincuentes. Según altas fuentes de la Casa Rosada, todavía hay discrepancias internas dentro del kirchnerismo sobre la necesidad de debatir un nuevo Código de Procedimientos Penales. El secretario legal y técnico, Carlos Zannini; el jefe del Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro de Justicia, Julio Alak, no consideran oportuno instalar el debate parlamentario sobre esa modificación ni sobre la del Código Penal. La intención es sacar la inseguridad de la agenda y por ello también quedó paralizado el tratamiento del nuevo Código Civil, criticado por liberar de responsabilidad a funcionarios y comprometer el derecho de propiedad. Tiene media sanción en el Senado y está frenado en Diputados. La intención del Gobierno es esperar un contexto de menos crispación social sobre el tema de la inseguridad. Tal vez, sea durante la Copa Mundial de fútbol de Brasil, cuando la atención periodística esté depositada en el deporte, dice, (lanación.com)