Sobre la poesía de José Kozer

Ensayo

El mundo es un hilo de nombres

DENISE LEÓN

(UNT - Tucumán) 

Todo ensayo es un estudio crítico por excelencia. Según el reportaje que la autora -entusiasta seguidora de la obra del prolífico poeta cubano exilado en Estados Unidos desde 1960- realizó a Kozer y fue publicado por este suplemento enero de este año, el entrevistado llevaba escritos 9.350 poemas. Sumado a que se trata de un poeta complejo, en el sentido atrayente del término, y a que muchos de sus poemas y versos son extensos y tienen la presencia innovadora de paréntesis, esto contribuyó a que la tarea se presentase sugestiva.

Conformado por siete ensayos precedidos de un prólogo de Pablo de Cuba Soria, la autora destaca que en el universo Kozer importa menos la experiencia que el recuerdo de la experiencia, reconstruido a su manera. Y la fidelidad al recuerdo es tan importante como el olvido voluntario, para recrear desde el desarraigo.

En el ensayo que da título al libro, León exalta la carencia, el desarraigo que llevan al poeta a buscar la casa, los familiares, casi compulsivamente.

Las vidas de José Kozer conforma uno de los más interesantes ensayos del libro. Hay una valiosa disquisición sobre al judaísmo, el Talmud y la palabra escrita.

En El texto que nunca se termina, la autora reproduce un poema de Kozer en que se propone al fracaso “como una especie de destino voluntario”. ¿Quién podría escribir en una sociedad donde todo es éxito y producción?

Finalmente, Sermo intimus y Algunas conclusiones provisorias son el broche de oro de un ensayo que cumple con los objetivos propuestos y aporta reflexiones convincentes desde el trabajo académico de una autora meritoria.

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Horacio Semeraro