Postergan el juicio por el crimen de una niña de seis años

El juicio por el homicidio de Mercedes de los Ángeles Figueroa, la nena de seis años que fue asesinada el primero de mayo de 2012, se suspendió hasta el miércoles que viene.

Ayer fue la segunda vez en la que los vocales de la sala I de Cámara Penal debieron reprogramar el debate oral en el que serán juzgados Marcos Rubén Longo (49) y un joven de 19 años (su nombre no se publica porque al momento del hecho era menor de edad), acusados de ser los autores del homicidio. Al comienzo de la instrucción de la causa, que dirigió el fiscal Arnoldo Suasnábar, había un tercer imputado (un adolescente que en ese momento tenía 13 años) que fue sobreseido porque según la ley es inimputable por su edad.

El juicio debía comenzar el martes. Pero el vocal Eduardo Romero Lascano, según informaron fuentes tribunalicias, tuvo que viajar a Buenos Aires por lo que la audiencia fue suspendida.

En tanto que ayer, el contratiempo que evitó que el tribunal escuchara a los nueve testigos que declararán en este debate oral, fue el inicio de otro juicio que estaba programado previamente a la audiencia por el caso Figueroa.

El presidente del tribunal, Pedro Roldán Vázquez hizo pasar al recinto a los testigos y, luego de tomarles juramento, les explicó las causas por las que se veía obligado a reprogramar la audiencia testimonial. “Tenemos que trabajar en estas condiciones porque las salas tienen vacantes de jueces que no son cubiertas”, señaló. En este marco, Roldán Vázquez también les explicó a las partes que para dar inicio al juicio tuvieron que solicitarle colaboración al juez Romero Lascano (que integra la sala II) para completar el tribunal.

A su vez, el tercer juez que debatirá la sentencia sobre este crimen es Alfonso Zóttoli.

Lectura del requerimiento

Los familiares de la víctima llegaron mucho antes de las 9 a tribunales. Sobre su ropa se habían puesto unas remeras blancas en las que estaba impreso el rostro de una niña. Era una fotografía de Mercedes.

Rosa del Valle Figueroa, madre de la víctima, estaba al centro de este grupo de personas. En silencio aguardaron a que los autoricen a ingresar al recinto dentro del cual, alrededor de las 10.30, se leyó el requerimiento de elevación a juicio firmado por Suasnábar.

En esa investigación se detalla que los imputados metieron a la niña en una casilla de madera en la zona del barrio Echeverría. En ese lugar, la apuñalaron al menos seis veces hasta matarla. Esto, según interpretó el fiscal, motivó que los imputados sean acusados por homicidio agravado por alevosía, debido a que le causaron un sufrimiento desmedido a la nena antes de asesinarla. Además se describe que después de ultimarla la dejaron tirada en un sitio baldío contiguo a la casilla en la que la hirieron -se piensa- con intenciones de abusar sexualmente de ella.