El salario mínimo del docente subirá a $ 6.000

Las farolas apenas brillaban y el movimiento era casi nulo en los pasillos de la sede del Poder Ejecutivo alrededor de las 19. En el ministerio de Gobierno, sin embargo, las puertas se abrían y cerraban constantemente. Funcionarios y colaboradores iban y venían. Ya había trascendido que el acuerdo se sellaría. El nerviosismo no se debía a ello. “¡Nos quedamos sin toner para imprimir el acta!”, se escuchó refunfuñar a alguien y reveló el porqué de la inquietud. Cerca de las 20.00, finalmente, un empleado salió del ministerio de Economía, cruzó todo el pasillo del primer piso de la Casa de Gobierno y acercó el acuerdo impreso, listo para que sobre él se estamparan las firmas que beneficiaría a unos 25.000 educadores.

Entre cafés y agua mineral, los ministros de Educación y de Gobierno, Silvia Rojkés y Edmundo Jiménez, respectivamente, y los representantes de los sindicatos del Frente Gremial Docente (FGD) cerraron la demorada negociación.

Al mediodía, los referentes de los gremios frentistas habían estado negociando durante tres horas y se habían retirado del Palacio evitando las fotos y las declaraciones. Pero durante la siesta, miembros de la Agremiación Tucumana de Educadores Provinciales (ATEP), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y la Asociación del Personal de Enseñanza Media de Tucumán (APEM) habían dejado entrever off de record que el consenso era un hecho.

El entendimiento

El acuerdo, según el acta, incluye dos partes.

Por un lado, un incremento al salario básico de todos los docentes. Será del 30%, en dos cuotas (18% se cobrará en abril y el 12% restante con el salario de septiembre). El básico actual, que es de $ 2.250, pasará a $ 2.655 desde marzo y a $ 2.925 desde agosto (se toma en cuenta el cargo testigo, que corresponde a un maestro de grado de jornada simple).

Por el otro, habrá un aumento del 35% en el salario mínimo, que actualmente es de $ 4.440. También se acreditará en dos partes. En marzo subirá a $ 5.400 y en agosto, a $ 6.000 de bolsillo para el “mejor cargo”, de acuerdo con lo rubricado. La suba será mediante una cifra adicional en negro (no remunerativa ni bonificable).

La Provincia también “garantizó” en el acta el pago desde marzo de los fondos nacionales para el adicionar denominado “estrategia territorial” de $ 616.

Isabel Ruiz (APEM) afirmó también que obtuvieron el compromiso de que no se descontarán los días no trabajados durante el paro de 48 horas que cumplieron los docentes en el inicio del ciclo lectivo, el 5 y 6. En esa ocasión, la secretaría de Trabajo había dictado la conciliación obligatoria, pero los manifestantes la habían desconocido y rechazado.

“Suspendemos la medida de fuerza anunciada para el lunes y el martes. Los docentes estaremos trabajando la semana que viene. Las bases pidieron el 30% y es lo que conseguimos. En estos días de desencuentros y expectativas logramos alcanzar los objetivos”, aseguró la dirigente.

David Toledo (ATEP) agregó que se acordó la gestión de un decreto para extender la licencia por maternidad. “Tras muchos años de lucha, reivindicamos las paritarias de las que participan los gremios con personería gremial”, deslizó en clara referencia a los sindicatos de docentes disidentes.

“Políticas educativas”

La ministra Rojkés subrayó que durante los años que lleva en la gestión se ha tratado de “llevar siempre lo mejor para el sector docente”. “También trabajamos permanentemente y lo seguiremos haciendo en mejorar la calidad laboral del docente, lo que está vinculado, por ejemplo a todas las líneas de capacitación”, afirmó.

Calificó al acuerdo como “muy bueno” en relación a las posibilidades económicas del estado provincial. “Esto forma parte de las políticas educativas del gobierno de José Alperovich”, concluyó.

Jiménez, en tanto, reconoció que vivieron jornadas “difíciles y de mucha confrontación”. “Llegamos a un acuerdo por que hubo respeto en la mesa de negociación. Hubo un camino de coincidencias. Fue una solución equilibrada y el Gobierno resguardó sus posibilidades financieras”.

El lunes 3 de febrero, el Poder Ejecutivo había recibido por primera vez al FGD. La fecha de convocatoria se había demorado porque se esperaban definiciones de las paritarias nacionales del sector, para contar con ese parámetro. Como no hubo avances en la Nación, las reuniones se sucedieron. Las partes habían mantenido las ofertas en absoluta reserva. Había trascendido, sin embargo, que las propuestas habían estado en las últimas instancias de diálogo entre el 25% y el 27%.

En febrero de 2013, el PE había brindado un aumento del 25,7%, también en dos tramos. El básico de los empleados había trepado de $ 1.790 a los $ 2.250 vigentes hasta el mes pasado.