26 Febrero 2014
A pesar de que no se encuentra formalmente imputado en la causa por el crimen de Paulina Lebbos, Gabriel Alperovich le pidió al fiscal de Instrucción Diego López Ávila que dicte su sobreseimiento, ya que no hay pruebas para sostener la versión que dio la querella, según comentaron fuentes tribunalicias. El 24 de junio del año pasado, Alberto Lebbos había dicho que recibió información de que un hijo del gobernador José Alperovich y un hijo de su secretario privado, Alberto Kaleñuk, serían los responsables de la muerte de Paulina. Esa misma tarde, Gabriel Alperovich y Sergio Kaleñuk se pusieron a disposición de la Justicia.
El abogado Mario Fabián Nahas realizó la presentación la semana pasada, donde se menciona que el hijo del gobernador fue nombrado en la causa por la querella y que se habían difundido videos de testigos que lo mencionaban, sin que se haya obtenido ninguna prueba que sustente esa versión.
El año pasado, el entonces abogado de Gabriel Alperovich, José Agustín Ferrari (quien falleció) había dicho que la acusación se trataba de “un montaje de pésima calidad para fines políticos”. Lebbos le respondió que si no tenían nada que ver con la muerte de Paulina, no deberían tener miedo de ser investigados. Fuentes tribunalicias comentaron que en la presentación de Nahas se menciona que la supuesta fiesta en la que había “hijos del poder” es una conjetura creada por el inconsciente colectivo, al igual que el supuesto exilio de Gabriel Alperovich en Israel tras el crimen. Por este último punto, el año pasado habían presentado copias del pasaporte del hijo del gobernador.
Así, Nahas pidió que se dicte el sobreseimiento para terminar con la incertidumbre generada a través de versiones, al no existir pruebas en su contra, se consigna en la presentación. De acuerdo a la misma, todo se trató de un intento de desprestigiar al gobernador, causando un perjuicio irreparable a su hijo. Así, Gabriel Alperovich busca cerrar la incertidumbre en torno a su supuesta participación en el crimen de Paulina, del cual asegura no tener conocimiento.
El abogado Mario Fabián Nahas realizó la presentación la semana pasada, donde se menciona que el hijo del gobernador fue nombrado en la causa por la querella y que se habían difundido videos de testigos que lo mencionaban, sin que se haya obtenido ninguna prueba que sustente esa versión.
El año pasado, el entonces abogado de Gabriel Alperovich, José Agustín Ferrari (quien falleció) había dicho que la acusación se trataba de “un montaje de pésima calidad para fines políticos”. Lebbos le respondió que si no tenían nada que ver con la muerte de Paulina, no deberían tener miedo de ser investigados. Fuentes tribunalicias comentaron que en la presentación de Nahas se menciona que la supuesta fiesta en la que había “hijos del poder” es una conjetura creada por el inconsciente colectivo, al igual que el supuesto exilio de Gabriel Alperovich en Israel tras el crimen. Por este último punto, el año pasado habían presentado copias del pasaporte del hijo del gobernador.
Así, Nahas pidió que se dicte el sobreseimiento para terminar con la incertidumbre generada a través de versiones, al no existir pruebas en su contra, se consigna en la presentación. De acuerdo a la misma, todo se trató de un intento de desprestigiar al gobernador, causando un perjuicio irreparable a su hijo. Así, Gabriel Alperovich busca cerrar la incertidumbre en torno a su supuesta participación en el crimen de Paulina, del cual asegura no tener conocimiento.
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