Capitanich negó haber renunciado al gabinete

BUENOS AIRES. - “La verdad, no puedo creer las cosas que inventan”, habría dicho anoche el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, para salir al cruce de noticias que señalan que había presentado su renuncia al cargo y que la presidenta, Cristina Fernández, se la rechazó. La información del alejamiento fue proporcionada por el portal de noticias Infobae.com, que apuntó que la dimisión del funcionario habría sobrevenido por el fracaso del proyecto para despolitizar Fútbol para Todos con el empresario Marcelo Tinelli.

La salida de Tinelli de escena dejó a Capitanich en el ojo de la tormenta, según el portal. Los ministros del Gabinete nacional expresaron su enojo y malestar contra el ex gobernador de Chaco. Desgastado por la caída de la iniciativa y apuntado por el resto de los funcionarios de primera línea, Capitanich habría decidido dar un paso al costado. Sin embargo, la mandataria le pidió que siga adelante como jefe de Gabinete, al menos un tiempo más. Es lo que informa el portal de noticias Infobae.com en su edición de ayer de último momento. El periodista Mariano Obarrio escribió anoche en su cuenta de Twitter (@marianoobarrio) que Capitanich, ante su consulta le desmintió la renuncia. Y le habría acotado: “no puedo creer las cosas que inventan”.

El jueves por la noche incluyó para Capitanich un momento ingrato: darle a Tinelli la mala noticia de que el proyecto del FPT, por pedido de Cristina, cambiaba definitivamente de rumbo sin marcha atrás posible. El por ahora jefe de Gabinete había sido el interlocutor del empresario en el armado del proyecto que Máximo Kirchner, le bajó el pulgar, según explica Infobae.com

Este nuevo traspié significó para Capitanich una desautorización más, en su accidentado período de dos meses y medio como formal jefe de los ministros del Gobierno nacional. La salida de Tinelli del proyecto de despolitización de Fútbol para Todos ingresa así a una lista de, al menos, 17 desautorizaciones, desmentidas, anuncios nunca concretados o marcha atrás a medidas anunciadas, que tuvo el ex gobernador de Chaco desde que dejó su cargo provincial.

Los infortunios quedaron expuestos en las conferencias matutinas en la Casa Rosada, en las que Capitanich muchas veces no pudo ocultar las dificultades para convivir con las estructuras permanentes del kirchnerismo y, sobre todo, con los funcionarios históricos del oficialismo patagónico.

El fallido, por ahora, intento de profesionalizar con Tinelli y su troupe de Ideas del Sur las transmisiones del torneo de fútbol, se integró así a la lista que incluye -entre otros- la desinteligencia por la eliminación de los subsidios a las tarifas de servicios públicos, la baja en el impuesto a los bienes personales, los cortes programados de luz, el incidente del tomate, entre otros hechos. Esta maniobra que -dicen- generó La Cámpora a través del hijo de la Presidenta, con el apoyo de Zannini, fue la gota que rebasó el vaso.

Sin embargo, el mismo jueves a la mañana en su contacto diario con la prensa, “Coqui” había respaldado a esta agrupación: “los integrantes de La Cámpora son compañeros que siempre nos ayudan a trabajar por un país mejor”, declaró. Y de ese modo salió a acallar las versiones que indicaban que la injerencia de la agrupación había complicado las negociaciones para el nuevo sistema de televisación del fútbol, al tiempo que confirmó que tienen participación en la mesa de decisiones.

Torpe

Los gobernadores peronistas van más allá y comentan que Coqui es “más torpe de lo que parece” y que fue sobrevaluado al momento de ser designado como jefe de Gabinete. Capitanich asegura en su intimidad que está arrepentido de haber aceptado el cargo. Pero si algún día renuncia en serio, su situación se comprometería aún más: volver a la gobernación de Chaco sería un calvario. Es que su principal arma para mantener a raya al revoltoso PJ chaqueño siempre fue su imagen a nivel nacional. Ahora, su imagen negativa creció desde que es jefe de Gabinete, a tal punto que está cabeza a cabeza con Boudou, el dirigente con peor imagen del kirchnerismo.

Por otro lado, si se aleja del Gobierno, Capitanich ya no tendría el respaldo económico de la Casa Rosada, indispensable para la mayoría de los gobernadores, y por ende su gestión se volvería difícil. (Infobae/ lapoliticaonline.com)