01 Febrero 2014
OVACIONADO. Las tribunas se vinieron abajo cuando llegó Nalbandian.
MAR DEL PLATA. David Nalbandian, símbolo argentino de la Copa Davis durante la última década y retirado del tenis el año pasado, generó la primera ovación de la jornada cuando ingresó al Polideportivo Municipal.
El “Rey David” llegó ni bien comenzado el partido entre Carlos Berlocq y Andreas Seppi, y se ubicó estratégicamente detrás del banco argentino en el cual estaba el capitán Martín Jaite, en una fila junto a Eduardo Schwank y Horacio Zeballos, los doblistas del equipo albiceleste.
El público lo ubicó enseguida y entonó el “Olé, Olé, Olé, David, David”, y un aplauso sostenido, mientras en la cancha Berlocq se ponía 0-4 abajo en el marcador en apenas 17 minutos de juego, lo que aumentó aún más el recuerdo nostálgico hacia el cordobés nacido en Unquillo.
Nalbandian jugó un total de 50 partidos de Copa Davis con la camiseta argentina, con 39 victorias y 11 derrotas, y estuvo en las finales que se perdieron en 2006, 2008 y 2011, la primera ante Rusia y las dos últimas frente a España.
El unquillense representó por última vez al país el año pasado en las series que Argentina le ganó a Alemania (5-0) y Francia (3-2), ambas en Buenos Aires, en el estadio Mary Terán de Weiss, en Villa Soldati, y no pudo estar en la semifinal que se perdió en Praga frente a la República Checa, luego campeón de la Davis.
Su hermano mayor, Javier (actual coach de Schwank), había anticipado que el “Rey” no iba a dejar solos a quienes hasta hace unos meses se debatían junto a él por la camiseta argentina. (Télam)
El “Rey David” llegó ni bien comenzado el partido entre Carlos Berlocq y Andreas Seppi, y se ubicó estratégicamente detrás del banco argentino en el cual estaba el capitán Martín Jaite, en una fila junto a Eduardo Schwank y Horacio Zeballos, los doblistas del equipo albiceleste.
El público lo ubicó enseguida y entonó el “Olé, Olé, Olé, David, David”, y un aplauso sostenido, mientras en la cancha Berlocq se ponía 0-4 abajo en el marcador en apenas 17 minutos de juego, lo que aumentó aún más el recuerdo nostálgico hacia el cordobés nacido en Unquillo.
Nalbandian jugó un total de 50 partidos de Copa Davis con la camiseta argentina, con 39 victorias y 11 derrotas, y estuvo en las finales que se perdieron en 2006, 2008 y 2011, la primera ante Rusia y las dos últimas frente a España.
El unquillense representó por última vez al país el año pasado en las series que Argentina le ganó a Alemania (5-0) y Francia (3-2), ambas en Buenos Aires, en el estadio Mary Terán de Weiss, en Villa Soldati, y no pudo estar en la semifinal que se perdió en Praga frente a la República Checa, luego campeón de la Davis.
Su hermano mayor, Javier (actual coach de Schwank), había anticipado que el “Rey” no iba a dejar solos a quienes hasta hace unos meses se debatían junto a él por la camiseta argentina. (Télam)