31 Enero 2014
ENCUENTRO. Merkel, con bastones, recibió a Ban Ki-moon en Berlín. reuters
BERLÍN.- Tanto la canciller alemana, Angela Merkel, como el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, alertaron de nuevo acerca de la “catastrófica” situación humanitaria que se vive en Siria y se mostraron esperanzados de poder conseguir avances en las conversaciones en Ginebra.
“Hay que reconocer el trabajo del mediador internacional para Siria, Lakhdar Brahimi. Ha dirigido una conferencia muy difícil”, reconoció Merkel a la prensa después de la reunión con Ban en la capital alemana. “Esperamos que se logre avanzar en las conversaciones”, agregó al referirse a la reunión por la paz en Siria que se realiza -a puerta cerrada- en la sede que la ONU tiene en Ginebra. La cumbre que busca acercar posiciones entre la oposición siria y el régimen establecido por Bashar Al Assad concluirá hoy y tendrá varios temas candentes para resolver. “Lo que necesitamos es que se permita el acceso a la ayuda humanitaria”, analizó en este sentido Merkel.
“Las conversaciones con Brahimi continúan”, recordó por su parte Ban. “Se interrumpirán brevemente para que ambas partes puedan llevar a cabo consultas y después se volverán a retomar. Han sido unas conversaciones muy difíciles, algo que era esperado”, indicó. Asimismo, Ban reconoció la enorme preocupación por la “catastrófica” situación humanitaria en Siria. “Hay que dar con la manera de solucionarlo”, dijo.
Contexto internacional
En el encuentro, Merkel y Ban trataron también otras cuestiones “candentes” del ámbito internacional como Irán o África, en especial Mali. Respecto al debate sobre el papel que debe jugar Alemania en el ámbito político internacional donde cada vez más voces abogan por abandonar el rol de secundario ejercido por el gobierno alemán desde la Segunda Guerra Mundial, Merkel aclaró que no se trata “de más o menos militares, sino de una mayor influencia política alemana. Alemania debe inmiscuirse para poder encontrar una solución en determinados conflictos”, declaró la mandataria. “Militarmente no se solucionará ni un sólo conflicto. Se necesita siempre una solución política. Las decisiones deben tomarse caso por caso”, aseguró.
Ban reconoció que es consciente del gran debate nacional sobre el papel de Alemania. “La ONU agradece a Alemania por su aportación y por su liderazgo en numerosos ámbitos. Como secretario de la ONU espero que todos pongan a disposición sus medios. El apoyo de Alemania será siempre bienvenido. Pero eso está en manos de Merkel”, indicó Ban.
Por otra parte, el gobierno alemán rebajó las expectativas de un rápido final del escándalo de espionaje de los servicios secretos estadounidenses ante la visita del secretario de Estado norteamericano, John Kerry. “No esperen que en el transcurso de esta visita se vayan a producir acuerdos entre las dos naciones”, aclaró el ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier. (DPA)
“Hay que reconocer el trabajo del mediador internacional para Siria, Lakhdar Brahimi. Ha dirigido una conferencia muy difícil”, reconoció Merkel a la prensa después de la reunión con Ban en la capital alemana. “Esperamos que se logre avanzar en las conversaciones”, agregó al referirse a la reunión por la paz en Siria que se realiza -a puerta cerrada- en la sede que la ONU tiene en Ginebra. La cumbre que busca acercar posiciones entre la oposición siria y el régimen establecido por Bashar Al Assad concluirá hoy y tendrá varios temas candentes para resolver. “Lo que necesitamos es que se permita el acceso a la ayuda humanitaria”, analizó en este sentido Merkel.
“Las conversaciones con Brahimi continúan”, recordó por su parte Ban. “Se interrumpirán brevemente para que ambas partes puedan llevar a cabo consultas y después se volverán a retomar. Han sido unas conversaciones muy difíciles, algo que era esperado”, indicó. Asimismo, Ban reconoció la enorme preocupación por la “catastrófica” situación humanitaria en Siria. “Hay que dar con la manera de solucionarlo”, dijo.
Contexto internacional
En el encuentro, Merkel y Ban trataron también otras cuestiones “candentes” del ámbito internacional como Irán o África, en especial Mali. Respecto al debate sobre el papel que debe jugar Alemania en el ámbito político internacional donde cada vez más voces abogan por abandonar el rol de secundario ejercido por el gobierno alemán desde la Segunda Guerra Mundial, Merkel aclaró que no se trata “de más o menos militares, sino de una mayor influencia política alemana. Alemania debe inmiscuirse para poder encontrar una solución en determinados conflictos”, declaró la mandataria. “Militarmente no se solucionará ni un sólo conflicto. Se necesita siempre una solución política. Las decisiones deben tomarse caso por caso”, aseguró.
Ban reconoció que es consciente del gran debate nacional sobre el papel de Alemania. “La ONU agradece a Alemania por su aportación y por su liderazgo en numerosos ámbitos. Como secretario de la ONU espero que todos pongan a disposición sus medios. El apoyo de Alemania será siempre bienvenido. Pero eso está en manos de Merkel”, indicó Ban.
Por otra parte, el gobierno alemán rebajó las expectativas de un rápido final del escándalo de espionaje de los servicios secretos estadounidenses ante la visita del secretario de Estado norteamericano, John Kerry. “No esperen que en el transcurso de esta visita se vayan a producir acuerdos entre las dos naciones”, aclaró el ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier. (DPA)
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