20 Enero 2014
“Voy a pedirle al gobernador que refinancie la deuda que el municipio tiene con la Provincia”
El intendente afirmó que el oficialismo gobernante no puede responsabilizarlo por la derrota que sufrió el PJ en la capital en octubre. Aunque dijo que sueña con ser gobernador, aclaró que no es momento de hablar de candidatos. “Es irritante para la gente”, se excusó.
ANHELO. Según Amaya, la cuenta pendiente de su gestión municipal es la revalorización de la Costanera. la gaceta / foto de JORGE OLMOS SGROSSO (archivo)
A juzgar por el color de su piel, cualquiera podría inferir que Pinamar estuvo nublado durante los 15 días de estadía. A horas de haber regresado de la Costa Atlántica, el intendente Domingo Amaya recibió -el viernes- a LA GACETA. “No tomo sol, por eso estoy igual que antes”, se atajó el jefe municipal, quien transita por el onceavo año consecutivo al frente de la Intendencia de la capital. Durante la charla, Amaya consideró que es prematuro hablar de candidaturas y de internas políticas, aunque asegura que en 2015 el país y la provincia seguirán siendo gobernadas por el peronismo.
Con buen talante -originado, quizás, por el descanso y por un encuentro que mantuvo con Daniel Scioli-, Amaya incluso se atrevió a desafiar a la Provincia a que brinde el mismo trato que la Nación le dispensó a los distritos. Puntualmente, reclamó que a la Capital se le refinancie en cómodas cuotas y a una baja tasa de interés una deuda de $ 500 millones que mantiene con el PE.
- ¿Cómo evalúa el 2013?
- Fue un año netamente político porque hubo elecciones. Si tengo que hacer una evaluación, puedo decir que fue un año muy positivo para la Argentina porque el Papa es argentino, Francisco fue nominado Papa y eso a la Argentina la posicionó en un contexto internacional único. Otro tema fuerte que tuvimos fue la operación de nuestra Presidenta (Cristina Fernández), que gracias a Dios salió todo bien. Eso nos generó zozobra.
- La oposición critica la ausencia de la Presidenta; hablan de un desgobierno…
- Yo creo que ella gobierna y sigue gobernando. Estuve conversando con varios funcionarios del área del Ministerio de Planificación y me dicen que todo el tiempo está consultando a sus ministros. Creo que la Presidenta se está tomando el tiempo necesario como corresponde. Viene trabajando mucho y tendrá sus recomendaciones para ir haciendo paulatinamente las cosas.
- La sociedad reprocha la inseguridad y la inflación, ¿cree que el PEN está escuchando a la gente?
- Yo creo que el Gobierno está trabajando y veo con sumo agrado que el Ministerio de Seguridad de la Nación se haga cargo de la lucha y el combate del narcotráfico. Es un flagelo muy grande que está afectando a nuestro país. Son decisiones políticas que tiene que tomarlas el Gobierno. Uno de los componentes fundamentales de la seguridad pasa por ahí. Nosotros como municipio hemos tenido una gran experiencia de trabajar en programas de la Unión Europea y de Naciones Unidas sobre prevención. Hoy seguimos trabajando en los barrios, conociendo la problemática. Hay un compromiso que tenemos que tomarlo todos, y más aún aquellos que tienen el poder del control y represión de estos delitos. No podemos permitir actividades que son delictivas y que atentan contra la vida de las personas y de los jóvenes. De manera recurrente, el municipio tiene que salir a solventar un entierro o un servicio fúnebre de un joven que muere por la droga. Se suicidan, se ahorcan por la droga. Este es un tema que tenemos que sentarnos todos, Municipalidad y Provincia, y ver qué acciones implementamos.
-¿Y el municipio hizo algo?
- Nosotros habíamos trabajado en un master plan de un lugar estigmatizado, que es la Costanera. No crean que todo el mundo es delincuente en la Costanera. Hay gente muy trabajadora. Son gente pobre que buscan que sus hijos estudien y se puedan insertar. Queremos avanzar con este plan y darle dignidad a la gente. Porque en esa zona se producen varios quiebres. En lo social, porque los jóvenes son discriminados. Hay un quiebre ambiental por lo que pasa alrededor del Río Salí, y hay un quiebre urbanístico porque hay que hacer obras.
- ¿Cree que va a poder ejecutarlo en el año y medio de gestión que le queda como intendente?
- No perdemos las esperanzas. Hemos presentado los proyectos en todos lados, de este plan que involucra 14 kilómetros de costanera, de ambos lados. Aquí estamos involucrados San Miguel de Tucumán, Banda del Río Salí, Alderetes y Las Talitas. Yo sigo peleando, sigo buscando créditos. Sé que es una materia pendiente. Si me pregunta qué tengo pendiente, le respondo: la Costanera.
- ¿Coincide en que el principal problema de los gobernantes es que no tienen visión de futuro?
- A este master plan no lo proyectamos ahora, lo hicimos seis años atrás. Aquí tiene que haber un compromiso real de todos los gobiernos. Vamos a llegar al bicentenario de 2016, que es una fecha realmente importante para la historia de los pueblos de Latinoamérica, y Tucumán no puede estar presentando sectores de gran vulnerabilidad como este. Tenemos que poner las cartas sobre la mesa y hablar sobre estas situaciones, porque no sólo tenemos problemas en la Costanera, hay problemas en las orillas de las vías del tren, en los canales de desagües. Tenemos problemas de déficit habitacional…
- Pero la mayoría de las obras fueron de pavimentación...
- Todo lo que se hizo era necesario. Yo creo que acá tenemos que sumarnos el Gobierno provincial y municipal en la búsqueda de recursos. Yo lo sigo buscando, pero creo que el gobierno provincial se tiene que sumar. Nosotros, oportunamente, le solicitamos al Ministerio de la Producción de la Provincia que colabore con este plan. Obvio que falta mucho. Nosotros hicimos 3 millones de metros cuadrados de hormigón y seguro que faltan otros 3 millones. Está más que claro que faltan obras de infraestructura. A través de un censo determinamos que hay 25.000 familias donde la red de gas pasa por la vereda de su casa y no tienen gas.
- ¿Y por qué no tienen gas?
- Porque no tienen el dinero para hacer la conexión, porque el gas está privatizado. No tienen la posibilidad siquiera de sacar un crédito.
- ¿Por qué en las elecciones pasadas la gente apoyó en menor medida al peronismo?
- Porque el dueño del voto es el pueblo. El político que se cree dueño de los votos está equivocado. Yo creo que hay que escuchar al pueblo que tiene la oportunidad de manifestarse cada dos años. Hay que ver cuáles son los errores para corregir y trabajar.
- ¿Usted se hace cargo de la derrota de octubre en la capital?
-Yo lo he declarado oportunamente. Yo me hago cargo de lo que a mí me corresponde, pero no soy el responsable. No me puedo hacer cargo de todo.
- ¿Va a ser candidato a gobernador? Alperovich ya confirmó que no buscará otro mandato…
- Quiero aclarar algo. Yo soy un político y voy a estar en política en el lugar que tenga que estar y donde el pueblo lo decida. Pero lo más importante de esto es que tenemos que mirar el presente. No podemos hacer futurología porque queda mucho tiempo. Creo que hoy hablar de política, hablar de internas, es faltarle el respeto a la gente. Es irritante para la gente que sigamos hablando de temas políticos.
- ¿Pero le gustaría?
- A mí me gustaría ser presidente de la Nación, ¿por que no? Todo el mundo tiene aspiraciones, sueños y utopías. Sino, no estaría en política. Si alguien me pregunta si cuando termine la gestión me voy a mi casa, le tendría que decir que no. Soy peronista, y creo que cuando un peronista asume al gobierno, comienza a gobernar para todos. Para radicales, socialistas, comunistas. Si nosotros llegamos al gobierno y nos convertimos en sectarios estamos perdidos. Creo que los proyectos tienen que ser colectivos.
- ¿Cómo es su relación con Alperovich?
- Buena. No tengo mala relación con nadie. Me caractericé por no perder el tiempo en enfrentamientos, en contestaciones. No soy como otros, que están pendientes en ver qué retrucan.
-¿Eso es una pose política o lo siente así?
- Yo lo siento así. Yo hoy tengo la tranquilidad de caminar por cualquier lugar de la provincia y del país con tranquilidad. Tengo la tranquilidad de pararme y escuchar una queja, o un apoyo. Eso es lo que a uno lo motiva y le da la fuerza. Yo no tengo problemas. Me voy a cortar el pelo solo. Y si alguien me tiene que reclamar como corresponde, con educación, lo escucho. Quiero seguir así. Porque la gente no votará a aquel que no dé respuestas.
- ¿El próximo presidente será peronista?
- No tengo dudas que así va a ser. El peronismo va a seguir gobernando Tucumán y el país.
- ¿Qué piensa del conflicto con los vendedores ambulantes?
- Creo que hay que hacer cumplir la ley. No podemos vivir en una provincia anárquica, donde todo el mundo quiere hacer lo que le plazca. Para eso están las leyes y los fallos judiciales que cumplir. Eso es todo. Aquí no se trata de que vamos a perjudicar a alguien. Las leyes están y hay que cumplirlas. Sino todo se transformaría en anárquico.
- ¿Cuándo va a firmar el Pacto Social con el PE?
- Me habló el ministro (Jorge) Gassenbauer y le dije que esta semana posiblemente lo firme. También le informé que le vamos a pedir a la Provincia que nos refinancie la deuda pública. Que nos haga la misma financiación que la Nación hizo con Tucumán, en cuotas de 200 meses y al 6%, así nos dejen de cobrar el CER (Coeficiente de Estabilización de Referencia). Para nosotros sería importante poder lograr eso.
- ¿A cuánto asciende la deuda municipal con la provincia?
- Actualmente asciende a $ 500 millones, que es una deuda que hemos heredado de anteriores gobiernos. Cuando empezamos, en 2003, el pasivo alcanzaba unos tres presupuestos municipales. Hoy asciende a sólo el 40% del presupuesto. Fuimos pagando nuestra deuda, pero también queremos un refinanciamiento. Si conseguimos ese financiamiento estaría muy bueno para las próximas gestiones que vengan.
Con buen talante -originado, quizás, por el descanso y por un encuentro que mantuvo con Daniel Scioli-, Amaya incluso se atrevió a desafiar a la Provincia a que brinde el mismo trato que la Nación le dispensó a los distritos. Puntualmente, reclamó que a la Capital se le refinancie en cómodas cuotas y a una baja tasa de interés una deuda de $ 500 millones que mantiene con el PE.
- ¿Cómo evalúa el 2013?
- Fue un año netamente político porque hubo elecciones. Si tengo que hacer una evaluación, puedo decir que fue un año muy positivo para la Argentina porque el Papa es argentino, Francisco fue nominado Papa y eso a la Argentina la posicionó en un contexto internacional único. Otro tema fuerte que tuvimos fue la operación de nuestra Presidenta (Cristina Fernández), que gracias a Dios salió todo bien. Eso nos generó zozobra.
- La oposición critica la ausencia de la Presidenta; hablan de un desgobierno…
- Yo creo que ella gobierna y sigue gobernando. Estuve conversando con varios funcionarios del área del Ministerio de Planificación y me dicen que todo el tiempo está consultando a sus ministros. Creo que la Presidenta se está tomando el tiempo necesario como corresponde. Viene trabajando mucho y tendrá sus recomendaciones para ir haciendo paulatinamente las cosas.
- La sociedad reprocha la inseguridad y la inflación, ¿cree que el PEN está escuchando a la gente?
- Yo creo que el Gobierno está trabajando y veo con sumo agrado que el Ministerio de Seguridad de la Nación se haga cargo de la lucha y el combate del narcotráfico. Es un flagelo muy grande que está afectando a nuestro país. Son decisiones políticas que tiene que tomarlas el Gobierno. Uno de los componentes fundamentales de la seguridad pasa por ahí. Nosotros como municipio hemos tenido una gran experiencia de trabajar en programas de la Unión Europea y de Naciones Unidas sobre prevención. Hoy seguimos trabajando en los barrios, conociendo la problemática. Hay un compromiso que tenemos que tomarlo todos, y más aún aquellos que tienen el poder del control y represión de estos delitos. No podemos permitir actividades que son delictivas y que atentan contra la vida de las personas y de los jóvenes. De manera recurrente, el municipio tiene que salir a solventar un entierro o un servicio fúnebre de un joven que muere por la droga. Se suicidan, se ahorcan por la droga. Este es un tema que tenemos que sentarnos todos, Municipalidad y Provincia, y ver qué acciones implementamos.
-¿Y el municipio hizo algo?
- Nosotros habíamos trabajado en un master plan de un lugar estigmatizado, que es la Costanera. No crean que todo el mundo es delincuente en la Costanera. Hay gente muy trabajadora. Son gente pobre que buscan que sus hijos estudien y se puedan insertar. Queremos avanzar con este plan y darle dignidad a la gente. Porque en esa zona se producen varios quiebres. En lo social, porque los jóvenes son discriminados. Hay un quiebre ambiental por lo que pasa alrededor del Río Salí, y hay un quiebre urbanístico porque hay que hacer obras.
- ¿Cree que va a poder ejecutarlo en el año y medio de gestión que le queda como intendente?
- No perdemos las esperanzas. Hemos presentado los proyectos en todos lados, de este plan que involucra 14 kilómetros de costanera, de ambos lados. Aquí estamos involucrados San Miguel de Tucumán, Banda del Río Salí, Alderetes y Las Talitas. Yo sigo peleando, sigo buscando créditos. Sé que es una materia pendiente. Si me pregunta qué tengo pendiente, le respondo: la Costanera.
- ¿Coincide en que el principal problema de los gobernantes es que no tienen visión de futuro?
- A este master plan no lo proyectamos ahora, lo hicimos seis años atrás. Aquí tiene que haber un compromiso real de todos los gobiernos. Vamos a llegar al bicentenario de 2016, que es una fecha realmente importante para la historia de los pueblos de Latinoamérica, y Tucumán no puede estar presentando sectores de gran vulnerabilidad como este. Tenemos que poner las cartas sobre la mesa y hablar sobre estas situaciones, porque no sólo tenemos problemas en la Costanera, hay problemas en las orillas de las vías del tren, en los canales de desagües. Tenemos problemas de déficit habitacional…
- Pero la mayoría de las obras fueron de pavimentación...
- Todo lo que se hizo era necesario. Yo creo que acá tenemos que sumarnos el Gobierno provincial y municipal en la búsqueda de recursos. Yo lo sigo buscando, pero creo que el gobierno provincial se tiene que sumar. Nosotros, oportunamente, le solicitamos al Ministerio de la Producción de la Provincia que colabore con este plan. Obvio que falta mucho. Nosotros hicimos 3 millones de metros cuadrados de hormigón y seguro que faltan otros 3 millones. Está más que claro que faltan obras de infraestructura. A través de un censo determinamos que hay 25.000 familias donde la red de gas pasa por la vereda de su casa y no tienen gas.
- ¿Y por qué no tienen gas?
- Porque no tienen el dinero para hacer la conexión, porque el gas está privatizado. No tienen la posibilidad siquiera de sacar un crédito.
- ¿Por qué en las elecciones pasadas la gente apoyó en menor medida al peronismo?
- Porque el dueño del voto es el pueblo. El político que se cree dueño de los votos está equivocado. Yo creo que hay que escuchar al pueblo que tiene la oportunidad de manifestarse cada dos años. Hay que ver cuáles son los errores para corregir y trabajar.
- ¿Usted se hace cargo de la derrota de octubre en la capital?
-Yo lo he declarado oportunamente. Yo me hago cargo de lo que a mí me corresponde, pero no soy el responsable. No me puedo hacer cargo de todo.
- ¿Va a ser candidato a gobernador? Alperovich ya confirmó que no buscará otro mandato…
- Quiero aclarar algo. Yo soy un político y voy a estar en política en el lugar que tenga que estar y donde el pueblo lo decida. Pero lo más importante de esto es que tenemos que mirar el presente. No podemos hacer futurología porque queda mucho tiempo. Creo que hoy hablar de política, hablar de internas, es faltarle el respeto a la gente. Es irritante para la gente que sigamos hablando de temas políticos.
- ¿Pero le gustaría?
- A mí me gustaría ser presidente de la Nación, ¿por que no? Todo el mundo tiene aspiraciones, sueños y utopías. Sino, no estaría en política. Si alguien me pregunta si cuando termine la gestión me voy a mi casa, le tendría que decir que no. Soy peronista, y creo que cuando un peronista asume al gobierno, comienza a gobernar para todos. Para radicales, socialistas, comunistas. Si nosotros llegamos al gobierno y nos convertimos en sectarios estamos perdidos. Creo que los proyectos tienen que ser colectivos.
- ¿Cómo es su relación con Alperovich?
- Buena. No tengo mala relación con nadie. Me caractericé por no perder el tiempo en enfrentamientos, en contestaciones. No soy como otros, que están pendientes en ver qué retrucan.
-¿Eso es una pose política o lo siente así?
- Yo lo siento así. Yo hoy tengo la tranquilidad de caminar por cualquier lugar de la provincia y del país con tranquilidad. Tengo la tranquilidad de pararme y escuchar una queja, o un apoyo. Eso es lo que a uno lo motiva y le da la fuerza. Yo no tengo problemas. Me voy a cortar el pelo solo. Y si alguien me tiene que reclamar como corresponde, con educación, lo escucho. Quiero seguir así. Porque la gente no votará a aquel que no dé respuestas.
- ¿El próximo presidente será peronista?
- No tengo dudas que así va a ser. El peronismo va a seguir gobernando Tucumán y el país.
- ¿Qué piensa del conflicto con los vendedores ambulantes?
- Creo que hay que hacer cumplir la ley. No podemos vivir en una provincia anárquica, donde todo el mundo quiere hacer lo que le plazca. Para eso están las leyes y los fallos judiciales que cumplir. Eso es todo. Aquí no se trata de que vamos a perjudicar a alguien. Las leyes están y hay que cumplirlas. Sino todo se transformaría en anárquico.
- ¿Cuándo va a firmar el Pacto Social con el PE?
- Me habló el ministro (Jorge) Gassenbauer y le dije que esta semana posiblemente lo firme. También le informé que le vamos a pedir a la Provincia que nos refinancie la deuda pública. Que nos haga la misma financiación que la Nación hizo con Tucumán, en cuotas de 200 meses y al 6%, así nos dejen de cobrar el CER (Coeficiente de Estabilización de Referencia). Para nosotros sería importante poder lograr eso.
- ¿A cuánto asciende la deuda municipal con la provincia?
- Actualmente asciende a $ 500 millones, que es una deuda que hemos heredado de anteriores gobiernos. Cuando empezamos, en 2003, el pasivo alcanzaba unos tres presupuestos municipales. Hoy asciende a sólo el 40% del presupuesto. Fuimos pagando nuestra deuda, pero también queremos un refinanciamiento. Si conseguimos ese financiamiento estaría muy bueno para las próximas gestiones que vengan.
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