14 Enero 2014
BUENOS AIRES.- El 16 de abril de 1986, el entonces presidente, Raúl Alfonsín, propuso que Viedma, en Río Negro, sea la nueva capital del país. Casi 28 años después, su hijo expresó que está en desacuerdo con esa intención, que ahora impulsa el diputado kirchnerista Julián Domínguez, quien propuso trasladar la sede de gobierno a una provincia del norte.
El diputado nacional por la UCR Ricardo Alfonsín, consideró que esa iniciativa del oficialismo no es “oportuna”. Ayer, el parlamentario opositor manifestó: “si bien estoy conceptualmente de acuerdo, no creo que sea este el momento oportuno para plantear la iniciativa del traslado de la Capital”.
Lección histórica
“El traslado de la Capital no es un fin en sí mismo, sino que tiene por objeto resolver muchos de los problemas estructurales que padecemos los argentinos. Sin embargo, dudo de que sea esta la visión de la mayoría de la sociedad”, sostuvo el radical.
Su padre, precisamente, había propuesto mover la capital a Viedma para “descentralizar el poder y fomentar el poblamiento de la Patagonia”. Los problemas económicos y la falta de consenso hicieron fracasar el proyecto impulsado por el radicalismo hace casi dos décadas.
Ahora, Alfonsín hijo consideró: “una iniciativa como esta no puede ser planteada sin un debate previo, que sea lo más informado y participativo posible, orientado a esclarecer y a generar conciencia acerca de los problemas que puede solucionar o que contribuiría a resolver el traslado de la Capital”.
El diputado no cree que, “a raíz de la compleja situación económica, social y política de la Argentina, sea este el momento para proponer este debate. La historia nos demuestra que la inoportunidad de un planteo puede hacer fracasar las iniciativas mejor inspiradas”.
Por otra parte, Alfonsín desacreditó el proyecto de ley para el agro presentado por su par del Frente Renovador (FR), Sergio Massa. Y dijo que esa iniciativa, que incluye la suspensión de retenciones en varios productos, con excepción de la soja (ver página 2), “hace rato que está en el Congreso”, y planteada por el radicalismo. (DyN)
El diputado nacional por la UCR Ricardo Alfonsín, consideró que esa iniciativa del oficialismo no es “oportuna”. Ayer, el parlamentario opositor manifestó: “si bien estoy conceptualmente de acuerdo, no creo que sea este el momento oportuno para plantear la iniciativa del traslado de la Capital”.
Lección histórica
“El traslado de la Capital no es un fin en sí mismo, sino que tiene por objeto resolver muchos de los problemas estructurales que padecemos los argentinos. Sin embargo, dudo de que sea esta la visión de la mayoría de la sociedad”, sostuvo el radical.
Su padre, precisamente, había propuesto mover la capital a Viedma para “descentralizar el poder y fomentar el poblamiento de la Patagonia”. Los problemas económicos y la falta de consenso hicieron fracasar el proyecto impulsado por el radicalismo hace casi dos décadas.
Ahora, Alfonsín hijo consideró: “una iniciativa como esta no puede ser planteada sin un debate previo, que sea lo más informado y participativo posible, orientado a esclarecer y a generar conciencia acerca de los problemas que puede solucionar o que contribuiría a resolver el traslado de la Capital”.
El diputado no cree que, “a raíz de la compleja situación económica, social y política de la Argentina, sea este el momento para proponer este debate. La historia nos demuestra que la inoportunidad de un planteo puede hacer fracasar las iniciativas mejor inspiradas”.
Por otra parte, Alfonsín desacreditó el proyecto de ley para el agro presentado por su par del Frente Renovador (FR), Sergio Massa. Y dijo que esa iniciativa, que incluye la suspensión de retenciones en varios productos, con excepción de la soja (ver página 2), “hace rato que está en el Congreso”, y planteada por el radicalismo. (DyN)