05 Enero 2014
EN CASA. El australiano se ilusiona con un buen desempeño en el Abierto de Australia. REUTERS
BRISBANE, Australia.- Las esperanzas del suizo Roger Federer de comenzar el año con un esperado título acabaron en fracaso esta mañana, al ser derrotado por el héroe local, el australiano Lleyton Hewitt, en la final del torneo Brisbane International.
El campeón de 17 torneos del Grand Slam, que conquistó el último de sus 77 títulos en junio, fue batido por 6-1, 4-6 y 6-3 por un Hewitt corajudo que acabó con una sequía de tres años sin trofeos.
Federer, número seis del mundo, tenía un registro de 18 victorias contra ocho de su rival en sus enfrentamientos, pero Hewitt se llevó el partido en poco más de dos horas.
"Vencer al que posiblemente es el mejor jugador en la final supone mucho", dijo el australiano. "No es un torneo fácil de ganar".
Federer tuvo siete puntos para romper el servicio de su rival en el tercer set, pero los falló todos y éste acabó con una racha de 15 partidos perdidos contra un tenista de su misma edad, 32 años.
A pesar de la decepción, el suizo mantiene las esperanzas para el primer Grand Slam del año, que se disputa este mes en Australia.
"Pude sacar mejor, esta semana estuve más consistente que en mucho tiempo, así que eso es muy bueno", dijo Federer, que hasta la final no había perdido su servicio.
"Tengo una idea clara de lo que tengo que mejorar, y tengo una idea clara de dónde están mi mente y mi cuerpo".
El australiano no ganaba un título de la ATP en su país desde que conquistó el de Sídney en 2005. (Reuters)
El campeón de 17 torneos del Grand Slam, que conquistó el último de sus 77 títulos en junio, fue batido por 6-1, 4-6 y 6-3 por un Hewitt corajudo que acabó con una sequía de tres años sin trofeos.
Federer, número seis del mundo, tenía un registro de 18 victorias contra ocho de su rival en sus enfrentamientos, pero Hewitt se llevó el partido en poco más de dos horas.
"Vencer al que posiblemente es el mejor jugador en la final supone mucho", dijo el australiano. "No es un torneo fácil de ganar".
Federer tuvo siete puntos para romper el servicio de su rival en el tercer set, pero los falló todos y éste acabó con una racha de 15 partidos perdidos contra un tenista de su misma edad, 32 años.
A pesar de la decepción, el suizo mantiene las esperanzas para el primer Grand Slam del año, que se disputa este mes en Australia.
"Pude sacar mejor, esta semana estuve más consistente que en mucho tiempo, así que eso es muy bueno", dijo Federer, que hasta la final no había perdido su servicio.
"Tengo una idea clara de lo que tengo que mejorar, y tengo una idea clara de dónde están mi mente y mi cuerpo".
El australiano no ganaba un título de la ATP en su país desde que conquistó el de Sídney en 2005. (Reuters)