Imprudencia y tragedias viales en la ruta N° 9

La imprudencia suele ser una de las madres de la desgracia, especialmente en materia vial. La estadística de accidentes sigue engordando. La ruta nacional N° 9, entre Las Talitas y El Cadillal, se ha convertido en un paisaje de la tragedia por la cantidad de colisiones que se registran, en muchos casos, con víctimas mortales. En la noche del jueves, dos motociclistas fallecieron aplastados al chocar contra el acoplado de un camión en el ingreso a la Capital del Limón. Las explicaciones acerca de cómo había sucedido el mortal percance eran confusas.

Este acceso, así como los de Los Nogales, El Cadillal y Las Talitas, son escenarios de accidentes en forma constante especialmente los dos primeros. Durante los fines de semana y en particular los domingos de intenso calor, se produce un flujo de 15.000 o 20.000 vehículos que van hacia el dique Celestino Gelsi. Una vecina de Los Nogales, testigo de muchos de los accidentes que allí se producen, sostiene que es una ruta “maldita”. “El domingo pasado vimos tres accidentes en un tramo de un kilómetro. En esta época aumentan los choques y cuando llueve, seguro pasa algo. Mis hermanos siempre salen a socorrer a alguien: el domingo, por ejemplo, fueron a rescatar a tres adolescentes que habían dado como seis tumbos en el pavimento, y uno de ellos perdió la oreja. De milagro no se mataron”, contó una mujer que vive en el kilómetro 1.309. Tres accidentes sucedieron el domingo en Los Nogales. Nuestra crónica periodística señala que una camioneta doble cabina fue embestida desde atrás por un camión y arrastrada 50 metros, mientras que tres adolescentes volcaron en un Chevrolet Celta. En ambos casos sólo hubo heridos de gravedad. El mismo día, un motociclista perdió la vida tras chocar con una rastra cañera.

Según el director de Transporte de la provincia, la mayoría de los motociclistas circula sin casco, e incluso en motocarros con toda la familia a bordo. Señaló que el día de Navidad se secuestraron más de 200 vehículos. “La mayoría, por circular sin los papeles, o andar en la moto sin casco. También tuvimos 25 alcoholemias positivas”, señaló. El comisario de Los Nogales dijo que algunos accidentes se producen por esquivar los controles, principalmente las motos. “Lo que provoca accidentes es la imprudencia. Circulan a velocidades altísimas, no respetan los cruces, manejan alcoholizados y hasta tres o cuatro personas por moto, todos sin casco”, añadió.

Tucumán aportó 257 defunciones a las 7.485 muertes viales que contabilizó la asociación civil “Luchemos por la vida” durante 2012 hasta el 4 de enero pasado, 44 más que en 2011. En mayo pasado, un doctor en Antropología que brindó una charla en la Universidad Tecnológica Nacional dijo que el Estado debe realizar una campaña de educación y comunicación muy buena, con un núcleo ideológico breve y fuerte. “Para eso tiene que haber consenso de los poderes y eso lleva tiempo. No hacer caer el cambio sólo en infraestructura o en educación, o en la sanción, sino todo al mismo tiempo: la educación es muy importante, porque nos implica a todos, jóvenes, viejos, fuerzas de seguridad, funcionarios... es desnaturalizar lo que hacemos y reeducarnos”, afirmó. Educación y sanción son los puntos de partida para poder modificar una mala conducta.

Si la realidad muestra un incremento de transgresiones, accidentes y muertos significa que algo no se está haciendo correctamente.