03 Diciembre 2013
DESGRACIA. Los buzos, trabajando en el Lago Puelo. FOTO TOMADA DE DIARIO DE RÍO NEGRO
RAWSON.- Una mujer que cursa el octavo mes de embarazo logró salvar su vida y la de su bebé tras nadar unos 200 metros por las heladas aguas de Lago Puelo y alcanzar la costa, tras intentar socorrer sin éxito a su esposo, que pereció ahogado cuando la canoa en la que navegaban se hundió.
El episodio ocurrió ayer en ese lago ubicado en el extremo noroeste del Chubut, cerca del límite con la vecina provincia de Río Negro, donde Carlos Quisle, un brigadista de 30 años y su mujer, en avanzado estado de gravidez, navegaban en una canoa.
"En apariencia el fuerte viento provocó un oleaje que comenzó a llenar el compartimento de agua, con lo que la embarcación comenzó de poco a hundirse" con el joven en su interior, explicó Julián Cayun, jefe de los bomberos de Lago Puelo, localidad ubicada en la cabecera ese espejo de agua.
Cayun describió que el joven que murió ahogado "estaba atado a la canoa, su mujer intentó rescatarlo pero no lo logró, por lo que se puso a nadar hacia la costa hasta llegar con un hilo de fuerza, lo que le permitió salvarse a ella y a la criatura en gestación, que aparentemente se encuentra bien".
Según informaron al identificar a la víctima, Quisle integraba la dotación de Parques Nacionales y era brigadista en el servicio de emergencia de El Bolsón, la población más cercana, sobre el límite de Río Negro. (Télam)
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