30 Noviembre 2013
LA HABANA.- Las FARC admitieron una vez más que cobran "impuestos" a los campesinos en los territorios bajo su control en los que se cultiva coca en Colombia, en el segundo día de las negociaciones con el gobierno centradas en el tema del narcotráfico. "Nos vimos obligados a establecer un régimen de tributación y de regulación a las transacciones realizadas por los campesinos", dijo el líder negociador de las Fuerzas Revolucionarias de Colombia (FARC), Luciano Marín (alías "Iván Márquez").
Ello ocurrió pensando en los derechos de los campesinos, aseguró, para protegerlos "frente a abusos de intermediarios y narcotraficantes". "No teníamos ni el derecho ni la vocación de volvernos contra la población con miras a prohibirle la única alternativa de que se derivaba su pírrica subsistencia", citó "Márquez" a un comentario del actual número uno de la guerrilla, Rodrigo Londoño, conocido como "Timochenko".
Las FARC y el gobierno del presidente Juan Manuel Santos retomaron las conversaciones de paz con el tercer gran tema de la agenda pactada, centrado en el problema de las drogas. El narcotráfico es uno de los problemas históricos de Colombia.
Los cárteles de la droga y las bandas de narcotraficantes han financiado durante décadas a grupos armados en el país sudamericano. También las FARC son acusadas de financiarse a través del narcotráfico.
La guerrilla ha reconocido en varias ocasiones que cobran "impuestos" al cultivo, pero niegan estar implicadas directamente en el negocio de la droga.
Como en la víspera, "Márquez" defendió también el cultivo de coca, al que deslindó de la cocaína. "Aspiramos a un país con coca para usos alimenticios, medicinales e industriales", dijo el líder insurgente. (DPA)
Ello ocurrió pensando en los derechos de los campesinos, aseguró, para protegerlos "frente a abusos de intermediarios y narcotraficantes". "No teníamos ni el derecho ni la vocación de volvernos contra la población con miras a prohibirle la única alternativa de que se derivaba su pírrica subsistencia", citó "Márquez" a un comentario del actual número uno de la guerrilla, Rodrigo Londoño, conocido como "Timochenko".
Las FARC y el gobierno del presidente Juan Manuel Santos retomaron las conversaciones de paz con el tercer gran tema de la agenda pactada, centrado en el problema de las drogas. El narcotráfico es uno de los problemas históricos de Colombia.
Los cárteles de la droga y las bandas de narcotraficantes han financiado durante décadas a grupos armados en el país sudamericano. También las FARC son acusadas de financiarse a través del narcotráfico.
La guerrilla ha reconocido en varias ocasiones que cobran "impuestos" al cultivo, pero niegan estar implicadas directamente en el negocio de la droga.
Como en la víspera, "Márquez" defendió también el cultivo de coca, al que deslindó de la cocaína. "Aspiramos a un país con coca para usos alimenticios, medicinales e industriales", dijo el líder insurgente. (DPA)