27 Noviembre 2013
LA DECISIÓN. El consejo de administración de Repsol tenía una "predisposición positiva" al acuerdo. FOTO TOMADA DE INFOBAE.COM
MADRID.- Tras una reunión de más de cuatro horas hoy, el consejo de administración de Repsol, reunido en Madrid, dio el visto bueno al principio de acuerdo logrado, el lunes pasado, entre Argentina, España y México, con el fin de poner un punto final al litigio abierto entre la gestión de la presidenta Cristina Fernández y Repsol por la expropiación del 51% de las acciones de la compañía española en YPF. Sin embargo, los ejecutivos pidieron más garantías, con el fin de asegurar la eficacia del acuerdo, de acuerdo con voceros de Repsol, citados por el sitio especializado "elEconomista.es".
Ahora se reabrirá un tiempo de negociaciones con el fin de llegar a un entendimiento sobre la letra chica del acuerdo que se suscribirá próximamente. Los españoles quieren la asistencia de un banco de inversión internacional, con el fin de que participe en el proceso. Según trascendió, la Argentina deberá pagar alrededor de U$S 5.000 millones por la expropiación de las acciones en la ahora petrolera reestatizada.
El posible pago es inferior a los U$S 7.000 millones en los que Repsol tiene contabilizado en libros el valor por el 51% expropiado, pero será aceptado por el consejo entre otras cosas porque los bonos ofrecen un margen de negociación y rápida liquidación que un dilatado proceso judicial no habría garantizado, indica el portal español. En Europa estiman que, con un 2,5% del total de la deuda pública soberana en su poder, Repsol se convertiría en uno de los principales tenedores de deuda argentina.
Repsol recibiría como mínimo U$S 5.000 millones por el 51% de las acciones de YPF que le fueron expropiadas en 2012. Los españoles exigieron ante tribunales internacionales US$ 10.500 millones de compensación y reclaman que U$S 5.000 millones se les abone en "activos líquidos", sin ninguna condición para su total disponibilidad por Repsol, y libres de impuestos.
La calidad del dinero y de los activos que recibirá Repsol es considerada de absoluta prioridad por los españoles lo mismo que las "garantías totales" de que las condiciones se van a cumplir.
El preacuerdo tuvo una buena recepción en la Bolsa, donde la acción de Repsol ganó ayer 4,28%. Mariano Rajoy, presidente del gobierno español, impartió ayer su bendición por intermedio de su ministro de Economía, Luis de Guindos. "Todo lo que suponga cerrar incertidumbres que seguían abiertas es bueno para los dos".