18 Noviembre 2013
ANALIZANDO LA HISTORIA. Sánchez conversa con Seri en pleno partido sobre un San Martín que hacía las cosas muy bien.
San Martín mira atrás y hoy respira. Uf, ¡qué semanita! Fue de las previas más complicadas, con ausencias que preocupaban (Albano Becica suspendido y Augusto Max lesionado), la triste noticia del fallecimiento del padre de Gustavo Ibáñez y con el problema estomacal que afectó a medio plantel y no lo dejó entrenar con normalidad. Todos dramas... Hasta el 3-1.
Pero lo mejor de una tarde-noche ideal no solo fue el resultado: todos cumplieron y superaron esa difícil prueba. El equipo funcionó como tal en una de sus mejores presentaciones. El premio a la figura se lo llevó Ibáñez porque jugó un partido especial y además metió el primero, pero la gente ayer se rompió las manos aplaudiendo la garra de "Maxi" Martínez para sacar todo y el corazón de Luis Silba para pelear arriba y crear peligro. Solo por nombrar otros puntos altos.
"La verdad que pasamos una semana difícil. Esto era una prueba y seguro que salimos airosos. Siempre hablamos del grupo, de los buenos jugadores que hay, y ayer quedó demostrado. Estoy contento porque sacamos adelante un partido duro para seguir arriba", analizó Martín Seri, que además de sus idas y vueltas también aportó a la causa marcando en la red.
¿Era un desafío jugar sin los pilares? "Eso lo pueden pensar ustedes (los periodistas), tengo 30 jugadores que entreno todos los días y se lo que me pueden dar uno y otro", sostuvo Juan Amador Sánchez, conforme con el nivel del juego a pesar de las ausencias.
Hasta los cambios le rindieron al máximo al DT. Guillermo Tambussi entró hecho una fiera y Miguel Fernández se reencontró con el gol en apenas unos minutos. "La verdad que es bueno tener tantos delanteros. Fui defensor y se que el rival se juega el resto (físico) con los delanteros titulares y después no puede con los que ingresan como suplentes, como le sucedió a Chaco", confesó "J.A." contento con el recambio de ayer y con un equipo que (al fin) pudo liquidar la historia. Además, mantuvo la nueva racha intacta (San Martín ganó los últimos tres duelos en La Ciudadela).
Pero lo mejor de una tarde-noche ideal no solo fue el resultado: todos cumplieron y superaron esa difícil prueba. El equipo funcionó como tal en una de sus mejores presentaciones. El premio a la figura se lo llevó Ibáñez porque jugó un partido especial y además metió el primero, pero la gente ayer se rompió las manos aplaudiendo la garra de "Maxi" Martínez para sacar todo y el corazón de Luis Silba para pelear arriba y crear peligro. Solo por nombrar otros puntos altos.
"La verdad que pasamos una semana difícil. Esto era una prueba y seguro que salimos airosos. Siempre hablamos del grupo, de los buenos jugadores que hay, y ayer quedó demostrado. Estoy contento porque sacamos adelante un partido duro para seguir arriba", analizó Martín Seri, que además de sus idas y vueltas también aportó a la causa marcando en la red.
¿Era un desafío jugar sin los pilares? "Eso lo pueden pensar ustedes (los periodistas), tengo 30 jugadores que entreno todos los días y se lo que me pueden dar uno y otro", sostuvo Juan Amador Sánchez, conforme con el nivel del juego a pesar de las ausencias.
Hasta los cambios le rindieron al máximo al DT. Guillermo Tambussi entró hecho una fiera y Miguel Fernández se reencontró con el gol en apenas unos minutos. "La verdad que es bueno tener tantos delanteros. Fui defensor y se que el rival se juega el resto (físico) con los delanteros titulares y después no puede con los que ingresan como suplentes, como le sucedió a Chaco", confesó "J.A." contento con el recambio de ayer y con un equipo que (al fin) pudo liquidar la historia. Además, mantuvo la nueva racha intacta (San Martín ganó los últimos tres duelos en La Ciudadela).