18 Noviembre 2013
BUENOS AIRES.- Los obispos de distintas diócesis bonaerenses se reunirán hoy con el gobernador Daniel Scioli para analizar la problemática del narcotráfico. Previo a ese encuentro, el mandatario aludió a la advertencia de un sector de la Iglesia sobre la complicidad entre "funcionarios de algunos poderes ejecutivos locales" y los narcos.
Tras el duro documento de la Conferencia Episcopal Argentina difundido hace 11 días, en el que advierte sobre "el drama del narcotráfico" y el posterior pedido de la Corte Suprema para que el Gobierno tome medidas urgentes debido a "la grave problemática" de las drogas, Scioli decidió reunirse con los obispos de las zonas de mayor conflicto. Y consideró que la problemática de las drogas "va más allá de una cuestión de seguridad y de justicia", además de pedir "una mirada comprensiva con la gente que tiene adicciones".
El presidente de la Comisión de Pastoral Social del Episcopado, Jorge Lozano, había expresado que "es imposible" que las bandas de narcotraficantes se expandan e instalen en el país "sin el visto bueno, sea por coima o por extorsión, de algunos funcionarios". Ante ese planteo, Scioli afirmó que si existe complicidad "sea quien sea, por la complejidad de este tema, tiene que tener el máximo castigo".
Las fronteras
"Estamos -agregó el gobernador bonaerense- ante organizaciones de una gran sofisticación, que van rotando la forma de meter la droga". Además mencionó que "Estados Unidos tiene una de las fronteras más custodiadas y sin embargo la droga entra igual, y nadie diría que el gobierno norteamericano no hace nada para combatirla".
Sobre ese punto, el ministro de Defensa Agustín Rossi reconoció que se necesita una "fuerte acción de inteligencia criminal" para frenar el avance del narcotráfico y consideró que "no es un problema exclusivamente de fronteras".
El funcionario sostuvo que "no es cierto que la Gendarmería se haya ido de la frontera como denuncia un sector de la oposición" y remarcó que "todo lo que hacemos en materia de patrullaje y control lo hacemos en permanente comunicación con la Gendarmería".
Endurecer medidas
Por su parte, el intendente de Tigre Sergio Massa reclamó endurecer las medidas para combatir el narcotráfico. "Hoy para los pibes es más fácil comprar drogas que cargar la tarjeta SUBE", remarcó, y advirtió que "si no paramos la droga, la droga va a destruir nuestra sociedad".
En ese sentido, Massa pidió "crear una unidad con participación de la Justicia, las fuerzas federales, la UIF (Unidad de Investigaciones Financieras) y la AFIP, que persiga la plata de los narcos porque el narcotráfico entrega hasta a su familia, pero lo único que no suelta es el dinero". También reiteró su defensa a la ley de derribo de vuelos ilegales del narcotráfico y argumentó que este proyecto "no significa andar tirando aviones". Según explicó, la iniciativa prevé "la identificación y la obligatoriedad de aterrizaje de los aviones que no se identifican en aeropuertos establecidos por las fuerzas de seguridad". (DyN)
Tras el duro documento de la Conferencia Episcopal Argentina difundido hace 11 días, en el que advierte sobre "el drama del narcotráfico" y el posterior pedido de la Corte Suprema para que el Gobierno tome medidas urgentes debido a "la grave problemática" de las drogas, Scioli decidió reunirse con los obispos de las zonas de mayor conflicto. Y consideró que la problemática de las drogas "va más allá de una cuestión de seguridad y de justicia", además de pedir "una mirada comprensiva con la gente que tiene adicciones".
El presidente de la Comisión de Pastoral Social del Episcopado, Jorge Lozano, había expresado que "es imposible" que las bandas de narcotraficantes se expandan e instalen en el país "sin el visto bueno, sea por coima o por extorsión, de algunos funcionarios". Ante ese planteo, Scioli afirmó que si existe complicidad "sea quien sea, por la complejidad de este tema, tiene que tener el máximo castigo".
Las fronteras
"Estamos -agregó el gobernador bonaerense- ante organizaciones de una gran sofisticación, que van rotando la forma de meter la droga". Además mencionó que "Estados Unidos tiene una de las fronteras más custodiadas y sin embargo la droga entra igual, y nadie diría que el gobierno norteamericano no hace nada para combatirla".
Sobre ese punto, el ministro de Defensa Agustín Rossi reconoció que se necesita una "fuerte acción de inteligencia criminal" para frenar el avance del narcotráfico y consideró que "no es un problema exclusivamente de fronteras".
El funcionario sostuvo que "no es cierto que la Gendarmería se haya ido de la frontera como denuncia un sector de la oposición" y remarcó que "todo lo que hacemos en materia de patrullaje y control lo hacemos en permanente comunicación con la Gendarmería".
Endurecer medidas
Por su parte, el intendente de Tigre Sergio Massa reclamó endurecer las medidas para combatir el narcotráfico. "Hoy para los pibes es más fácil comprar drogas que cargar la tarjeta SUBE", remarcó, y advirtió que "si no paramos la droga, la droga va a destruir nuestra sociedad".
En ese sentido, Massa pidió "crear una unidad con participación de la Justicia, las fuerzas federales, la UIF (Unidad de Investigaciones Financieras) y la AFIP, que persiga la plata de los narcos porque el narcotráfico entrega hasta a su familia, pero lo único que no suelta es el dinero". También reiteró su defensa a la ley de derribo de vuelos ilegales del narcotráfico y argumentó que este proyecto "no significa andar tirando aviones". Según explicó, la iniciativa prevé "la identificación y la obligatoriedad de aterrizaje de los aviones que no se identifican en aeropuertos establecidos por las fuerzas de seguridad". (DyN)