27 Septiembre 2013
Eduardo Javier Chit, el contador de la empresa MARM Group, que es la que provee los cepos y la infraestructura al Sistema de Reordenamiento del Tránsito en Yerba Buena, asegura que la declaración jurada y los tributos de esa firma se encuentran al día, luego de que LA GACETA publicara en su edición de ayer que la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) ha abierto una investigación referida al desenvolvimiento comercial y fiscal de su cliente.
"Las multas cobradas por el Estado se encuentran exentas de impuestos. Nosotros cobramos por cuenta y orden de la Municipalidad; es decir, somos unos simples intermediarios entre el municipio y el infractor. Por eso, no se les entrega facturas a los ciudadanos. A fin de mes, le emitimos una factura B a la Municipalidad, cobrándole por el servicio prestado", dice.
Según el contador, el nacimiento del hecho imponible para MARM Group ocurre cuando se le emite una factura al Ejecutivo municipal. "Tomamos el dinero y se lo pasamos a la Municipalidad. Recibimos un mandato, y actuamos por cuenta y orden de ellos", añade.
También el representante legal de MARM Group, Gustavo Tolaba, se pronuncia en ese sentido: "Tenemos una concesión; es decir, prestamos un servicio. Nosotros le facturamos al municipio. Todos nuestros papeles están en regla".
La pesquisa de la AFIP se inició después de que el concejal opositor Pedro Albornoz Piossek presentara una denuncia escrita en la que cuestiona la entrega de recibos x a los infractores, en vez de facturas. Además, en una de las oficinas locales del organismo se recibieron tres acusaciones telefónicas de vecinos de Yerba Buena. Así lo revela Luciano Botteri Domecq, director regional de la AFIP.
En su denuncia, Albornoz Piossek decía que había recibido numerosas quejas de vecinos que argumentan que no se les ha entregado una factura por el pago del destrabe, del acarreo, del depósito de sus vehículos o de la infracción.
El acuerdo
El servicio contratado por la Municipalidad a MARM Group consiste en la utilización de una grúa de arrastre, de un depósito de vehículos, de trabarruedas y de motos para el control. En ese trato se deja en claro que la empresa debe proveer de un espacio físico para que funcione la oficina de pago para el acarreo, el depósito y el destrabe. El 90 % del dinero en concepto de pago por esos tres servicios corresponde a la firma, y el 10 % restante a la Municipalidad. Se consignó que esos tres ítems se deben pagar en esa oficina, situada en la avenida Perón al 900.
El acuerdo fija que, como contraprestación por el servicio prestado, la Municipalidad cede a la empresa el 50 % del total de las multas.
"Las multas cobradas por el Estado se encuentran exentas de impuestos. Nosotros cobramos por cuenta y orden de la Municipalidad; es decir, somos unos simples intermediarios entre el municipio y el infractor. Por eso, no se les entrega facturas a los ciudadanos. A fin de mes, le emitimos una factura B a la Municipalidad, cobrándole por el servicio prestado", dice.
Según el contador, el nacimiento del hecho imponible para MARM Group ocurre cuando se le emite una factura al Ejecutivo municipal. "Tomamos el dinero y se lo pasamos a la Municipalidad. Recibimos un mandato, y actuamos por cuenta y orden de ellos", añade.
También el representante legal de MARM Group, Gustavo Tolaba, se pronuncia en ese sentido: "Tenemos una concesión; es decir, prestamos un servicio. Nosotros le facturamos al municipio. Todos nuestros papeles están en regla".
La pesquisa de la AFIP se inició después de que el concejal opositor Pedro Albornoz Piossek presentara una denuncia escrita en la que cuestiona la entrega de recibos x a los infractores, en vez de facturas. Además, en una de las oficinas locales del organismo se recibieron tres acusaciones telefónicas de vecinos de Yerba Buena. Así lo revela Luciano Botteri Domecq, director regional de la AFIP.
En su denuncia, Albornoz Piossek decía que había recibido numerosas quejas de vecinos que argumentan que no se les ha entregado una factura por el pago del destrabe, del acarreo, del depósito de sus vehículos o de la infracción.
El acuerdo
El servicio contratado por la Municipalidad a MARM Group consiste en la utilización de una grúa de arrastre, de un depósito de vehículos, de trabarruedas y de motos para el control. En ese trato se deja en claro que la empresa debe proveer de un espacio físico para que funcione la oficina de pago para el acarreo, el depósito y el destrabe. El 90 % del dinero en concepto de pago por esos tres servicios corresponde a la firma, y el 10 % restante a la Municipalidad. Se consignó que esos tres ítems se deben pagar en esa oficina, situada en la avenida Perón al 900.
El acuerdo fija que, como contraprestación por el servicio prestado, la Municipalidad cede a la empresa el 50 % del total de las multas.
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