22 Septiembre 2013
El marcapasos electoral registrará mayor actividad desde hoy, día en que comienza formalmente la campaña proselitista que desembocará en los comicios del 27 de octubre. Ese domingo, los tucumanos acudirán a las urnas para renovar cuatro de las nueve bancas de diputados que le corresponden a la Provincia.
Siete son las listas que lograron superar las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 11 de agosto. El requisito de alcanzar el piso del 1,5% de los votos válidos emitidos dejó sin chances de competir en octubre a 10 espacios políticos. Tras el colador, muchas de esas fuerzas se reacomodaron detrás de alguno de los candidatos en carrera.
Stella Maris Córdoba, Juan Salim y Miriam Gallardo, por el Frente para la Victoria; y Juan Casañas, por el Acuerdo Cívico y Social, son los diputados que finalizan sus mandatos en diciembre. De los cuatro, tan sólo Córdoba es la única que no busca ser reelecta.
Según los guarismos arrojados por las PASO, la lista oficialista del Frente para la Victoria (con el ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, a la cabeza) se quedó con el 43% de los sufragios. En segundo lugar, con el 22% de adhesiones, se ubicó la nómina Unidad para la República, que postula al senador José Cano (UCR). La diferencia entre ambos espacios fue de 368.837 votos contra 186.828 votos. De repetirse esa elección, la Casa de Gobierno se quedaría con las tres bancas en la Cámara Baja que pone en juego.
Con esa premisa arranca el alperovichismo la campaña electoral. El oficialismo apuesta a protegerse del embate opositor. La estrategia, según advirtieron en el Poder Ejecutivo, será reforzar la difusión de las obras realizadas e involucrar aún más en las actividades al ministro Manzur, que por sus funciones en el gabinete nacional permanece muchos días de la semana en la Capital Federal. Hasta aquí, los operadores políticos del Gobierno buscaron sumar a varias de las estructuras que decantaron tras las PASO. Hubo charlas con el Movimiento de Unidad Popular (Luis Romano), el MIJD (Mariana Daher) y el VOS (Marcelo Baik).
Cano, en tanto, aspira a potenciar su postulación con el respaldo de las otras seis listas que compitieron en las PASO dentro del Acuerdo Cívico y Social. A las otras líneas internas del radicalismo y al socialismo, el canismo sumó la adhesión de un sector del peronismo disidente (Enrique Romero, Antonio Guerrero, Alejandro Sangenis y Pedro Balceda, entre otros) y de espacios liberales (Esteban Jerez y José Costanzo). La apuesta del ACyS es empardar en dos el reparto de bancas.
El bussismo, sorpresa en las PASO con 71.602 votos, sueña con juntar "porotos" para alcanzar un escaño. Ricardo Bussi anticipó que volverá a focalizarse en captar el voto antikirchnerista. Con estrategias diferentes, por detrás en la grilla que dejaron las Primarias arrancan el macrismo (35.758 votos), el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (33.854), Alternativa Popular (32.265), y el Frente Renovador (17.695).
Siete son las listas que lograron superar las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 11 de agosto. El requisito de alcanzar el piso del 1,5% de los votos válidos emitidos dejó sin chances de competir en octubre a 10 espacios políticos. Tras el colador, muchas de esas fuerzas se reacomodaron detrás de alguno de los candidatos en carrera.
Stella Maris Córdoba, Juan Salim y Miriam Gallardo, por el Frente para la Victoria; y Juan Casañas, por el Acuerdo Cívico y Social, son los diputados que finalizan sus mandatos en diciembre. De los cuatro, tan sólo Córdoba es la única que no busca ser reelecta.
Según los guarismos arrojados por las PASO, la lista oficialista del Frente para la Victoria (con el ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, a la cabeza) se quedó con el 43% de los sufragios. En segundo lugar, con el 22% de adhesiones, se ubicó la nómina Unidad para la República, que postula al senador José Cano (UCR). La diferencia entre ambos espacios fue de 368.837 votos contra 186.828 votos. De repetirse esa elección, la Casa de Gobierno se quedaría con las tres bancas en la Cámara Baja que pone en juego.
Con esa premisa arranca el alperovichismo la campaña electoral. El oficialismo apuesta a protegerse del embate opositor. La estrategia, según advirtieron en el Poder Ejecutivo, será reforzar la difusión de las obras realizadas e involucrar aún más en las actividades al ministro Manzur, que por sus funciones en el gabinete nacional permanece muchos días de la semana en la Capital Federal. Hasta aquí, los operadores políticos del Gobierno buscaron sumar a varias de las estructuras que decantaron tras las PASO. Hubo charlas con el Movimiento de Unidad Popular (Luis Romano), el MIJD (Mariana Daher) y el VOS (Marcelo Baik).
Cano, en tanto, aspira a potenciar su postulación con el respaldo de las otras seis listas que compitieron en las PASO dentro del Acuerdo Cívico y Social. A las otras líneas internas del radicalismo y al socialismo, el canismo sumó la adhesión de un sector del peronismo disidente (Enrique Romero, Antonio Guerrero, Alejandro Sangenis y Pedro Balceda, entre otros) y de espacios liberales (Esteban Jerez y José Costanzo). La apuesta del ACyS es empardar en dos el reparto de bancas.
El bussismo, sorpresa en las PASO con 71.602 votos, sueña con juntar "porotos" para alcanzar un escaño. Ricardo Bussi anticipó que volverá a focalizarse en captar el voto antikirchnerista. Con estrategias diferentes, por detrás en la grilla que dejaron las Primarias arrancan el macrismo (35.758 votos), el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (33.854), Alternativa Popular (32.265), y el Frente Renovador (17.695).
Lo más popular