Alex Ubago: "Hasta los más rudos le cantan al amor"

Álex Ubago lanza una carcajada fresca, espontánea, cuando se le anuncia que algunos periodistas (o fanáticos u otros músicos, quién sabe) le han colgado la etiqueta de "embajador de los románticos". El rótulo le parece una exageración, pero no le sorprende: si hay algún caudal en el que el español ha volcado sus sentimientos más puros asociados al amor, ese han sido sus canciones. Y aunque esconde un pasado -muy pasado- de fanático de Iron Maiden, el mundo lo ha conocido sensible y apasionado, calificativos que bien pueden aplicarse al recital que hoy dará en Tucumán, provincia que pisa por primera vez. Antes de venir, conversó con LA GACETA desde un hotel en Buenos Aires:

- ¿Cómo será tu primer show en Tucumán?

- Voy con muchas ganas porque normalmente, al venir a Argentina, visité Buenos Aires y Córdoba, pero no mucho más. Así que con esta gira tendré la oportunidad de ir a otras ciudades, y estoy muy contento por eso. En el show presento varias de las canciones de mi nuevo disco, "Mentiras sinceras", y luego hago un repaso por los temas más significativos de mi carrera. Es un concierto en el que pasan bastantes cosas. Quizás hay quien piensa que tendrá puras baladas y será muy tranquilito, pero hay momentos muy emotivos y románticos, y otros con más energía, donde la banda suena con bastante fuerza. Será un concierto para cantar y emocionarse.

- Al pensar en Argentina, ¿qué postal se te viene en mente?

- Son unas cuantas, no sólo una. Buenos Aires es lo primero que se me viene a la cabeza porque es donde más tiempo he pasado. De hecho, tengo un disco, "Calle ilusión", que grabé en esta ciudad con "Cachorro" López; estuve más de tres meses viviendo aquí. Me vienen imágenes de zonas por las que he paseado, como Palermo, o aromas como el del asado o del mate. También el acento, que es tan característico y que a los españoles nos encanta. Y luego me viene la imagen de buenos amigos.

- ¿Cómo fue el proceso de grabación de "Mentiras sinceras"?

- El disco tiene 12 temas elegidos entre bastante material que había escrito en los últimos tres años, tiempo en que congelé mi carrera como solista para dedicarme al trío de Álex, Jorge y Lena. Lo grabé durante tres meses en Milán, Italia, con el productor Claudio Guidetti, que es talentosísimo y con el que tenía muchas ganas de trabajar. Tuvimos que parar el trabajo porque en el medio nació mi hijo (Pablo, de 14 meses). Suelen decir que los niños vienen con un pan bajo el brazo, ¡pero el mío vino con un disco! Es un álbum que me dejó muy satisfecho y contento.

- ¿Coincidís con los que te califican como un embajador del romanticismo?

- (ríe) Bueno, a ningún artista le gustan las etiquetas. Pero sí, por qué no, soy un romántico. En la música que hago es donde más dejo entrever ese romanticismo. El amor, el desamor y el mundo de los sentimientos es mi mayor fuente de inspiración. Mentiría o no sería muy coherente si no me reconociera como un romántico, aunque no me considero cursi.

- ¿Creés que hacen falta más músicos que le canten al amor?

- Creo que somos bastantes. En el avión venía leyendo una entrevista a Fito Páez que, a pesar de ser rockero, es un tío que le escribe mucho al amor. La mayoría de los artistas, incluso los más rockeros y rudos, le cantan al amor. Es un tema universal.

- ¿Cómo impactó la paternidad en tu carrera?

- Impactó en mi vida por completo. Ha sido y está siendo la mejor experiencia de mi vida, algo que me llena por completo. En la parte artística inspira mucho, pero también lo hace en general: a la hora de trabajar, de salir de gira, de subir al escenario, de hacer todo lo que hago, me da más energía o más ganas de vivir.

- ¿Te quedan cuentas pendientes en tu trabajo?

- Quizás haber explorado más otros géneros. No sé si la vida o el destino te va llevando por ciertos caminos y yo me fui por el del pop o la música romántica. Siendo adolescente escuchaba mucho a cantautores como Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Ismael Serrano, Jorge Drexler y Alejandro Sanz, y eso me llevó a hacer el tipo de canción que hago; era lo que me brotaba o la mejor manera en que expresaba mis sentimientos. Quizás podría haber explorado otros terrenos para vivir experiencias diferentes. Recuerdo que, a los 14 años, tenía un amigo con el que tocábamos la guitarra y hacíamos canciones, y tuvimos una época rockera, ¡hasta usábamos el pelo largo! Por otro lado, creo que mi camino estaba por aquí: la música que más me gusta y emociona es el pop romántico. Y cuando uno se hace más conocido, se vuelve más arriesgado experimentar.

ACTÚA HOY

• A las 22, en la Expo de la Sociedad Rural. Las entradas cuestan $ 50, $ 100 y $ 200.