14 Septiembre 2013
Detuvieron un hombre que embarazó a su hija
El individuo, de 35 años, había violado a la niña, de 11 años, cuando la esposa había salido de la casa ubicada en un barrio de la capital. Por decisión judicial, se practicó un aborto no punible. En la Maternidad dijeron que la menor se encuentra en buen estado. El padre negó haber sido el autor de la violación
A gritos su esposa le recriminó que había violado a la hija de ambos. La niña de 11 años tenía ya un embarazo de cuatro meses producto del abuso sexual, y el hombre optó por marcharse de la casa, sin dejar rastros. Hace 10 días, tras cuatro meses de estar prófugo, fue detenido por la Policía.
La denuncia había sido realizada por la madre de la víctima a principios de abril en la fiscalía de Instrucción de la V° Nominación, a cargo de Washington Navarro Dávila. Fuentes judiciales comentaron que la mujer había notado cambios en el físico de su hija y en el estado de ánimo.
Quedó embarazada
La menor le confesó lo que había guardado durante meses. Su padre la había violado a principios de año, aprovechando que su madre había salido a trabajar. Un médico confirmó que los cambios físicos que estaba sufriendo la víctima eran producto de las 20 semanas de gestación que tenía, según consta en el expediente.
El 10 de abril le realizaron a la pequeña una cesárea para practicar un aborto no punible. La intervención de los médicos de la Maternidad había sido reconocida por las autoridades de ese hospital, quienes habían comentado a LA GACETA que la menor se encontraba en buen estado.
La difusión del aborto terapéutico motivó presentaciones judiciales de varias organizaciones, que quedaron radicadas en la fiscalía de Instrucción de la VI° Nominación, a cargo de Adriana Reinoso Cuello. Ninguna de ellas prosperó, comentaron fuentes judiciales.
En 2012, la Corte Suprema de Justicia de la Nación dictó el "Fallo FAL" en el que estableció que no es punible la interrupción del embarazo proveniente de una violación.
"El supuesto de aborto no punible contemplado en el artículo 86, inciso 2, del Código Penal, comprende a aquel que se practique respecto de todo embarazo que sea consecuencia de una violación, con independencia de la capacidad mental de su víctima", fue la resolución del máximo tribunal de justicia del país.
De esa manera, los médicos de la Maternidad pudieron interrumpir el embarazo de la menor violada por su padre, sin responsabilidad penal. El "Fallo FAL" especificó que para que la mujer pueda realizarse la práctica debe completar una declaración jurada dejando constancia del delito del que fue víctima.
En cámara Gesell
Una semana después de que le practicaran el aborto no punible en la Maternidad, la menor de 11 años declaró en cámara gesell. Fuentes tribunalicias afirmaron que la víctima contó en detalles cómo fue abusada por su padre.
La agresión se produjo cuando los dos estaban solos en la casa, y el hombre habría comenzado el abuso como si se tratara de un juego. Luego de violarla, la coaccionó para que no le contara a nadie lo que había pasado.
Navarro Dávila había pedido la captura del padre, quien tiene 35 años. Hace 10 días, los policías de la seccional 12ª recibieron la información de que el prófugo estaba en las cercanías de la vivienda de su esposa y su hija. Lo atraparon en la calle y lo detuvieron.
La semana pasada declaró ante el fiscal y negó la acusación. Navarro Dávila ordenó que le tomaran muestras de ADN para que sean cotejadas con las que se encuentran reservadas del feto, y que fueron extraídas en Abril. De confirmarse que el hombre iba a ser el padre, su situación quedaría definida para el fiscal, según comentaron las fuentes de la Fiscalía que fueron consultadas.
La denuncia había sido realizada por la madre de la víctima a principios de abril en la fiscalía de Instrucción de la V° Nominación, a cargo de Washington Navarro Dávila. Fuentes judiciales comentaron que la mujer había notado cambios en el físico de su hija y en el estado de ánimo.
Quedó embarazada
La menor le confesó lo que había guardado durante meses. Su padre la había violado a principios de año, aprovechando que su madre había salido a trabajar. Un médico confirmó que los cambios físicos que estaba sufriendo la víctima eran producto de las 20 semanas de gestación que tenía, según consta en el expediente.
El 10 de abril le realizaron a la pequeña una cesárea para practicar un aborto no punible. La intervención de los médicos de la Maternidad había sido reconocida por las autoridades de ese hospital, quienes habían comentado a LA GACETA que la menor se encontraba en buen estado.
La difusión del aborto terapéutico motivó presentaciones judiciales de varias organizaciones, que quedaron radicadas en la fiscalía de Instrucción de la VI° Nominación, a cargo de Adriana Reinoso Cuello. Ninguna de ellas prosperó, comentaron fuentes judiciales.
En 2012, la Corte Suprema de Justicia de la Nación dictó el "Fallo FAL" en el que estableció que no es punible la interrupción del embarazo proveniente de una violación.
"El supuesto de aborto no punible contemplado en el artículo 86, inciso 2, del Código Penal, comprende a aquel que se practique respecto de todo embarazo que sea consecuencia de una violación, con independencia de la capacidad mental de su víctima", fue la resolución del máximo tribunal de justicia del país.
De esa manera, los médicos de la Maternidad pudieron interrumpir el embarazo de la menor violada por su padre, sin responsabilidad penal. El "Fallo FAL" especificó que para que la mujer pueda realizarse la práctica debe completar una declaración jurada dejando constancia del delito del que fue víctima.
En cámara Gesell
Una semana después de que le practicaran el aborto no punible en la Maternidad, la menor de 11 años declaró en cámara gesell. Fuentes tribunalicias afirmaron que la víctima contó en detalles cómo fue abusada por su padre.
La agresión se produjo cuando los dos estaban solos en la casa, y el hombre habría comenzado el abuso como si se tratara de un juego. Luego de violarla, la coaccionó para que no le contara a nadie lo que había pasado.
Navarro Dávila había pedido la captura del padre, quien tiene 35 años. Hace 10 días, los policías de la seccional 12ª recibieron la información de que el prófugo estaba en las cercanías de la vivienda de su esposa y su hija. Lo atraparon en la calle y lo detuvieron.
La semana pasada declaró ante el fiscal y negó la acusación. Navarro Dávila ordenó que le tomaran muestras de ADN para que sean cotejadas con las que se encuentran reservadas del feto, y que fueron extraídas en Abril. De confirmarse que el hombre iba a ser el padre, su situación quedaría definida para el fiscal, según comentaron las fuentes de la Fiscalía que fueron consultadas.
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