Se sabe, desde siempre, que nunca es fácil un partido contra el mejor equipo del mundo en rugby. Enfrentar a los All Blacks suele tener el mismo resultado que pararse frente a un tornado. Y la experiencia de Los Pumas en el comienzo del Rugby Championship ante Sudáfrica había sido nefasta. Por eso la actuación de Los Pumas en el Waikato Stadium fue, otra vez, para aplaudir. Sí, fue derrota 28 a 13. Pero en cierto momento del partido, los de negro se las vieron idem.
El primer tiempo no pudo haber comenzado mejor. Juan Manuel Leguizamón, el santiagueño, coronó un gran ataque y se zambullo en el ingoal local. Pedir que el partido termine a los 5 minutos es mucho, pero fue lo que pidieron los argentinos que se levantaron a ver las alternativas del partido a las 4.30. Pero, no podía ser de otra forma, a los All Blacks no les podés dar ventaja. Eusebio Guiñazu fue amonestado y en la jugada posterior, Aaron Smith concretó su primer try.
Una tenue llovizna durante todo el partido jugó a favor de Los Pumas. Los de negro no pudieron hace demasiada gala de su juego de manos. Y ademàs los argentinos, con Julio Farías y Fernández Lobbe como estandartes, fueron una máquina de tacklear. Así y todo, Smith aprovechó otro error, concretó otro try y el primer tiempo culminó con un apretado 15 a 10 para los locales.
Los argentinos, excepto en el line, hicieron todo bien. Fueron inteligentes y no dejaron pasar oportunidades. El "Cachorro" Sánchez aprovechó otra oportunidad en el equipo. No solo condujo bien los ataques, sino que ademas tackleó a destajo y estuvo acertado a los palos.
El segundo tiempo se jugó mucho en el centro de la cancha y Los Pumas tuvieron que aguantar los embates. Lo hicieron bien. Mejor incluso que lo que habían hecho los australianos en su serie ante los All Blacks. Pero, los de negro sim imbatibles. Hay que jugar perfecto para ganarles. Y ellos tienen que jugar horrible para perder.
Los tucumanos, ya se dijo, hicieron un gran partido y justificaron ampliamente su inclusión entre los titulares.
Los All Blacks se llevaran su segundo Rugby Championship. De eso no hay dudas. Pero los argentinos ya habían dado muestras de recuperación en el partido de Mendoza ante Sudáfrica y lo ratificaron en las tierras del mejor rugby del mundo. Ahora, el rival será Australia, dentro de siete dáas. Los Pumas sueñan con su primer triunfo en este certamen. Hoy era imposible. La esperanza es lo ultimo que se pierde.