Reclaman que se actúe contra la banda de la "Plaza Vieja"

Reclaman que se actúe contra la banda de la "Plaza Vieja"

En Yerba Buena, un grupo de vecinos se organiza para marchar hoy hacia la comisaría. La fiscala Adriana Gianonni ordenó intensificar la búsqueda de los responsable de haber apuñalado a un joven de 19 años para robarle la billetera y el celular

ROBOS A MANO ARMADA. Los comerciantes padecieron la inseguridad y los vecinos aseguraron que se trata de un grupo de menores de edad. LA GACETA / FOTOS DE ANALíA JARAMILLO ROBOS A MANO ARMADA. Los comerciantes padecieron la inseguridad y los vecinos aseguraron que se trata de un grupo de menores de edad. LA GACETA / FOTOS DE ANALíA JARAMILLO
06 Septiembre 2013
El grupo se reunía en los bancos de la plaza y desde allí planeaban sus "travesuras". El núcleo duro de "Los Matones de la plaza Vieja" lo integran unos 10 a 12 muchachos de entre 15 y 19 años, pero cada tanto se suma algún joven a las andanzas.

Los daños que provocaban se fueron transformando en robos y los vecinos comenzaron a reclamar. Tras la agresión que sufrió Gonzalo Valor el fin de semana cuando quisieron robarle, en la Justicia y en la Policía decidieron ponerle punto final a las andanzas del grupo.

Fuentes policiales comentaron ayer que la orden de la fiscala de Instrucción Adriana Gianonni fue clara: hay que encontrar a los responsables de haber apuñalado a Valor y a los que atacaron varios negocios de la zona el sábado a la madrugada.

Valor, de 19 años, regresaba a su casa del barrio Apunt el domingo a las 5.45 cuando fue rodeado por cinco jóvenes que quisieron robarle la billetera (en la que tenía $ 10) y el teléfono celular. El muchacho logró zafar de los ladrones, pero recibió una puñalada en la espalda que casi le perforó el pulmón. Tuvo que ser operado de urgencia y el miércoles al mediodía le dieron de alta.

La Policía aseguró que identificó a tres jóvenes que habrían participado del ataque que sufrió Valor, como también de los destrozos causados en los comercios el sábado a la madrugada. Además, se intensificaron los controles en la zona.

Un puesto de control se encuentra de manera permanente en avenida Solano Vera al 1.000 desde el lunes, frente a la plaza Vieja. Además, un equipo especial está abocado a investigar quiénes son los integrantes de "Los Matones de la plaza Vieja". "La orden es desarticularlos", comentó una alta fuente policial.

Movimientos

Los últimos hechos de inseguridad que afectaron a vecinos de la "Ciudad Jardín" motivaron diversos movimientos en la Policía. El comisario Carlos Carrillo (que a principios de año había sido destinado a Lomas de Tafí) regresó a la jefatura de la comisaría de Yerba Buena. Además, el comisario Mario Núñez asumió al frente de la jefatura de Zona de la Regional Norte.

Por otra parte, desde ayer se integró el nuevo equipo de la Brigada de Investigaciones Norte, que quedó a cargo del comisario Francisco Picón. Luego del escándalo que afectó a la dependencia cuando sus 28 integrantes fueron detenidos por privación ilegítima de la libertad, había funcionado con personal temporario.

Los 18 policías que fueron sobreseidos en esa causa (los otros 10 se encuentran detenidos en el penal de Villa Urquiza) fueron reubicados en otras dependencias, de acuerdo a la información proporcionada por fuentes policiales.

Entre las nuevas medidas dispuestas por el jefe de Policía Jorge Racedo se encuentra la implementación del programa "Ciudad Segura", por el que controlarán, además de los vehículos, a los negocios en los que los propietarios no puedan justificar cómo obtuvieron la mercadería.

En acción

Hoy a las 19, los vecinos de la plaza Vieja se concentrarán en el paseo público y partirán rumbo a la comisaría de Yerba Buena. Además de pedir que la banda de "Los Matones de Yerba Buena" sea desarticulada, quieren que la presencia constante de policías que se ve actualmente efectuando controles en la avenida, no disminuya después con el correr de los días.

La banda atacó con armas blancas 

Los hechos de inseguridad comenzaron a ser una constante en los alrededores del paseo público. El miedo de los vecinos y la angustia de los comerciantes quedaron reflejada en LA GACETA.

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