Simón Litvak - Kehilá de Tucumán
El pueblo judío celebra hoy el inicio de un nuevo año (Rosh Hashaná), el 5774 del calendario hebreo. En este día, la Kehilá de Tucumán saluda al pueblo con los más fervientes deseos de felicidad, paz y prosperidad.
Hacemos propicia la oportunidad para manifestar nuestro absoluto repudio al uso de la violencia, ante la posibilidad de una escalada bélica en Oriente Medio. Llamamos a la cordura, a la razón y a la sabiduría de quienes tienen en sus manos las decisiones políticas que puedan poner en peligro vidas humanas, tanto en esa región como en cualquier otro lugar del mundo.
La utilización de armamento químico es un hecho repudiable y condenado por la jurisprudencia internacional. Por lo pronto, no existen pruebas certeras al respecto; pero acudir a una presunta solución a través de las armas, provocando la muerte y el dolor de civiles inocentes y la destrucción de infraestructura vital, no es menos condenable.
Creemos fervientemente que la paz es posible y que el sufrimiento de hombres, mujeres y niños pesa sobre la conciencia de dirigentes tan autoritarios como irresponsables. Es por eso que uniremos nuestras voces y nuestras oraciones con las de todos los hombres de buena voluntad que piden por la paz en el mundo y, con idéntica firmeza, rechazamos toda manifestación unilateral que sirva para alimentar el odio e imponer divisiones.