27 Agosto 2013
ASISTENTES. La titular de la cooperadora dice que al EPAM van 250 alumnos; Leal afirmó que cursan unas 470. LA GACETA / ARCHIVO
Los números de la cooperadora del programa Educación Permanente para Adultos Mayores (EPAM) -dependiente de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT)- están en rojo. La presidenta de la entidad, Ester Bonanno -la directiva en pleno renunció, pero sigue en funciones hasta que asuma la nueva comisión- dijo a LA GACETA que ya gastaron los $ 90.000 que habían ahorrado, y que el embargo de $ 780.000 trabado sobre la cooperadora -por incumplimiento en el pago del alquiler de donde funcionaba el EPAM- generó una fuerte merma de ingresos.
Bonanno contó que el primer contrato de alquiler fue firmado por una persona ligada a la cooperadora. Pero aclaró que tiempo después se había acordado que la renta corra por cuenta de la UNT. "La cooperadora pagó el alquiler hasta hace cuatro o cinco años; luego se firmó un convenio, mediante el cual debía pasar a pagarlo la UNT. Ese convenio no está, porque desapareció el libro de actas de la gestión anterior. Nunca pagaron. Y como tampoco hicieron el cambio de titularidad del contrato, el embargo llega a la cooperadora", explicó.
Contó que cuando ella asumió buscó infructuosamente esos papeles y que presentó una denuncia en la Policía, por la pérdida del libro de actas: "fui a Personas Jurídicas y tampoco existe un acta". Aclaró, no obstante, que tanto la firma del convenio como el extravío se dieron durante la anterior gestión; es decir, cuando Mario Leal no comandaba la Secretaría de Extensión de la UNT, área de la que depende el EPAM.
Según números que maneja Bonanno, actualmente ingresan entre $ 5.250 y $ 5.670 por mes a la cooperadora. "De los $ 130 que paga cada alumno, nos corresponden $ 30; pero el 30% de eso se lo lleva el embargo. En diciembre se habían inscripto 400 personas, y cuando reabrieron las inscripciones, unos 300 más. Pero ahora están pagando entre 250 y 270 personas", dijo. E indicó que lo que recaudan no les alcanza: "tenemos tres empleados, heredados. Sus sueldos y aportes insumen unos $ 18.000 por mes. Les estamos pagando con reservas que teníamos. Estamos prácticamente quebrados", lamentó. Precisó que hace tres meses les vienen descontando por el embargo; y dijo que presentó expedientes para reclamar que la Secretaría de Extensión devuelva el dinero embargado y se haga cargo del descuento.
Leal aclaró que el juicio de desalojo, que derivó en el embargo, no afecta a la UNT. "La cooperadora es una persona jurídica distinta a la UNT; ellos son los locatarios", dijo. ¿La mora en el pago del alquiler es estricta responsabilidad de esta entidad?, le preguntó LA GACETA. "Es lo que vengo diciendo hace un año y medio; parece que nadie me escucha. Tan es así que el juicio de desalojo se instala sobre la cooperadora", manifestó Leal.
"No debemos aportes"
El funcionario precisó los alcances del accionar del área que él dirige en lo que respecta al EPAM. "Un porcentaje de la cuota que pagan los alumnos le corresponde a la cooperadora. La Secretaría deposita en tiempo y forma ese porcentaje. No debemos aportes. De ahí en más yo no tengo control de ese gasto, porque se trata de una persona jurídica distinta. Lo que pasa de la puerta de la cooperadora hacia dentro no lo sé, porque no es mi competencia", expresó.
Leal también rechazó la afirmación de Bonanno, de que la UNT se había comprometido, años atrás, a hacerse cargo del alquiler. "EPAM se genera (en 1985) como un programa universitario de autogestión: se autofinancia. En algún punto, entiendo yo, ellos empezaron a tener problemas para poder sostener. En un momento hicimos varios intentos para que nosotros, como UNT, alquilemos el local; pero eso fracasó, no se llegó a sustanciar nunca", explicó.
También lanzó números distintos a los de la titular de la cooperadora, sobre la cantidad de alumnos que concurren regularmente al EPAM. "Están transitando hoy, en el promedio semanal, alrededor de 470 alumnos. Tenemos una inscripción de 900; sin embargo, a lo largo de los 28 años del EPAM, esa merma es normal en época de frío. Pero en septiembre vuelve a incrementarse. De hecho, hoy no cerró ningún taller", afirmó.
Bonanno contó que el primer contrato de alquiler fue firmado por una persona ligada a la cooperadora. Pero aclaró que tiempo después se había acordado que la renta corra por cuenta de la UNT. "La cooperadora pagó el alquiler hasta hace cuatro o cinco años; luego se firmó un convenio, mediante el cual debía pasar a pagarlo la UNT. Ese convenio no está, porque desapareció el libro de actas de la gestión anterior. Nunca pagaron. Y como tampoco hicieron el cambio de titularidad del contrato, el embargo llega a la cooperadora", explicó.
Contó que cuando ella asumió buscó infructuosamente esos papeles y que presentó una denuncia en la Policía, por la pérdida del libro de actas: "fui a Personas Jurídicas y tampoco existe un acta". Aclaró, no obstante, que tanto la firma del convenio como el extravío se dieron durante la anterior gestión; es decir, cuando Mario Leal no comandaba la Secretaría de Extensión de la UNT, área de la que depende el EPAM.
Según números que maneja Bonanno, actualmente ingresan entre $ 5.250 y $ 5.670 por mes a la cooperadora. "De los $ 130 que paga cada alumno, nos corresponden $ 30; pero el 30% de eso se lo lleva el embargo. En diciembre se habían inscripto 400 personas, y cuando reabrieron las inscripciones, unos 300 más. Pero ahora están pagando entre 250 y 270 personas", dijo. E indicó que lo que recaudan no les alcanza: "tenemos tres empleados, heredados. Sus sueldos y aportes insumen unos $ 18.000 por mes. Les estamos pagando con reservas que teníamos. Estamos prácticamente quebrados", lamentó. Precisó que hace tres meses les vienen descontando por el embargo; y dijo que presentó expedientes para reclamar que la Secretaría de Extensión devuelva el dinero embargado y se haga cargo del descuento.
Leal aclaró que el juicio de desalojo, que derivó en el embargo, no afecta a la UNT. "La cooperadora es una persona jurídica distinta a la UNT; ellos son los locatarios", dijo. ¿La mora en el pago del alquiler es estricta responsabilidad de esta entidad?, le preguntó LA GACETA. "Es lo que vengo diciendo hace un año y medio; parece que nadie me escucha. Tan es así que el juicio de desalojo se instala sobre la cooperadora", manifestó Leal.
"No debemos aportes"
El funcionario precisó los alcances del accionar del área que él dirige en lo que respecta al EPAM. "Un porcentaje de la cuota que pagan los alumnos le corresponde a la cooperadora. La Secretaría deposita en tiempo y forma ese porcentaje. No debemos aportes. De ahí en más yo no tengo control de ese gasto, porque se trata de una persona jurídica distinta. Lo que pasa de la puerta de la cooperadora hacia dentro no lo sé, porque no es mi competencia", expresó.
Leal también rechazó la afirmación de Bonanno, de que la UNT se había comprometido, años atrás, a hacerse cargo del alquiler. "EPAM se genera (en 1985) como un programa universitario de autogestión: se autofinancia. En algún punto, entiendo yo, ellos empezaron a tener problemas para poder sostener. En un momento hicimos varios intentos para que nosotros, como UNT, alquilemos el local; pero eso fracasó, no se llegó a sustanciar nunca", explicó.
También lanzó números distintos a los de la titular de la cooperadora, sobre la cantidad de alumnos que concurren regularmente al EPAM. "Están transitando hoy, en el promedio semanal, alrededor de 470 alumnos. Tenemos una inscripción de 900; sin embargo, a lo largo de los 28 años del EPAM, esa merma es normal en época de frío. Pero en septiembre vuelve a incrementarse. De hecho, hoy no cerró ningún taller", afirmó.
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