23 Agosto 2013
FERREYRA (Córdoba, por nuestro enviado especial Daniel Arturo Vaca).- Ubicada en un terreno de 210.000 m2 del complejo de Fiat Industrial, grupo al que pertenecen las marcas Case IH y New Holland, la planta de CNH ya produce cuatro modelos de cosechadoras axiales de 380 a 480 HP y nueve de tractores de 65 a 250 HP, todos ellos con características tope de gama para sus respectivas categorías. Con capacidad para fabricar hasta 2.000 cosechadoras y 4.000 tractores al año, la planta fue pensada para abastecer el mercado interno y exportar más del 50 % de su producción. "Argentina es una potencia mundial en la producción de alimentos, y los usuarios de maquinaria agrícola aquí son verdaderos expertos. Si decidíamos construir una fábrica, tenía que ser una planta modelo a nivel mundial, con el equipamiento tecnológico para fabricar los mejores productos de sus categorías", explica Natale Rígano, presidente del grupo Fiat Industrial, para luego ampliar: "Demandó más de U$S 200 millones, pero tan sólo un año después de haber iniciado las obras, estamos produciendo tractores y cosechadoras argentinos de última generación".
La fábrica está dotada de adelantos inéditos para nuestro país. En el área de "soldadura", por ejemplo, sorprenden dos robots articulados, de siete ejes, que se mueven en forma automática para soldar las chapas hasta en los rincones más difíciles. También se destaca la sobresaliente "sala de metrología", que utiliza tecnologías láser y de visión artificial, para garantizar en todas las piezas la perfección de sus dimensiones de acuerdo a las especificaciones del diseño. El sector de "pintura" es otro de los emblemas tecnológicos del lugar. Basado en nanotecnología, genera en las piezas una cobertura microscópica que se transforma en una película cerámica extremadamente resistente. Como resultado se obtiene una terminación más suave, brillante, duradera, inoxidable y mucho más amigable con el medio ambiente que los sistemas convencionales.
Un polo industrial
"Construimos un polo industrial de última tecnología, para atender la demanda del productor argentino y para poder exportar. Argentina es líder mundial en producción de alimentos, por lo que tiene un gran potencial de desarrollo", dijo Rígano. "Con esta planta ganamos en eficiencia, en sinergia y en competitividad de sus productos. Hoy, nuestras cosechadoras tienen un 20% de materiales nacionales, y en 18 meses estimamos llegar al 45%; y en tractores estamos en el 10% y proyectamos llegar al 25% en materiales nacionales, y al 70% en productos del Mercosur", anunció Rígano.
El empresario definió con precisión cuál es la estrategia de mercado que desarrolla CNH.
"Nuestro proyecto está hecho con metas a mediano y largo plazo, para atender todo el mercado regional. Por supuesto, creemos que podremos superar las dificultades que existen con las trabas comerciales -de la Argentina- con Brasil. Hoy no podemos exportar. Si Brasil sale al mercado, podremos aumentar sensiblemente nuestro volumen de producción. Nosotros estamos para producir argentino, porque somos competitivos y eficientes.
Rígano reconoció el impacto que tienen las trabas comerciales. "¿Era lógico tener una planta de tractores en la Argentina?. Tener una planta integrada, con un acuerdo de libre comercio en el Mercosur, era necesario para el Grupo Fiat desarrollarla acá". Se autopreguntó y respondió al mismo tiempo.
Los latinos y el mundo
"La relación entre Argentina y Brasil es fundamental para la economía regional internacional. Hoy tenemos un 'Libre Comercio no aplicado'. Yo quiero que se aplique realmente el Libre Comercio. Existe en el papel, pero no en los hechos.
"El panorama en la Argentina y en América Latina es favorable. En Argentina siguen creciendo los patentamientos, la cosecha gruesa es positiva y el Banco Nación desarrolló un proyecto intenso de apoyo al agro, con un programa de compra de bienes de capital", evaluó el directivo de la empresa.
En América Latina, los últimos años fueron de crecimiento positivo; por eso también decidimos hacer esta inversión en Ferreyra (Córdoba). Esto contrasta con el bajo crecimiento en la Unión Europea y con la retracción de China y la región asiática. EEUU está retomando el crecimiento, pero viene lento. Asi que apostamos fuerte a América Latina y la Argentina.
La fábrica está dotada de adelantos inéditos para nuestro país. En el área de "soldadura", por ejemplo, sorprenden dos robots articulados, de siete ejes, que se mueven en forma automática para soldar las chapas hasta en los rincones más difíciles. También se destaca la sobresaliente "sala de metrología", que utiliza tecnologías láser y de visión artificial, para garantizar en todas las piezas la perfección de sus dimensiones de acuerdo a las especificaciones del diseño. El sector de "pintura" es otro de los emblemas tecnológicos del lugar. Basado en nanotecnología, genera en las piezas una cobertura microscópica que se transforma en una película cerámica extremadamente resistente. Como resultado se obtiene una terminación más suave, brillante, duradera, inoxidable y mucho más amigable con el medio ambiente que los sistemas convencionales.
Un polo industrial
"Construimos un polo industrial de última tecnología, para atender la demanda del productor argentino y para poder exportar. Argentina es líder mundial en producción de alimentos, por lo que tiene un gran potencial de desarrollo", dijo Rígano. "Con esta planta ganamos en eficiencia, en sinergia y en competitividad de sus productos. Hoy, nuestras cosechadoras tienen un 20% de materiales nacionales, y en 18 meses estimamos llegar al 45%; y en tractores estamos en el 10% y proyectamos llegar al 25% en materiales nacionales, y al 70% en productos del Mercosur", anunció Rígano.
El empresario definió con precisión cuál es la estrategia de mercado que desarrolla CNH.
"Nuestro proyecto está hecho con metas a mediano y largo plazo, para atender todo el mercado regional. Por supuesto, creemos que podremos superar las dificultades que existen con las trabas comerciales -de la Argentina- con Brasil. Hoy no podemos exportar. Si Brasil sale al mercado, podremos aumentar sensiblemente nuestro volumen de producción. Nosotros estamos para producir argentino, porque somos competitivos y eficientes.
Rígano reconoció el impacto que tienen las trabas comerciales. "¿Era lógico tener una planta de tractores en la Argentina?. Tener una planta integrada, con un acuerdo de libre comercio en el Mercosur, era necesario para el Grupo Fiat desarrollarla acá". Se autopreguntó y respondió al mismo tiempo.
Los latinos y el mundo
"La relación entre Argentina y Brasil es fundamental para la economía regional internacional. Hoy tenemos un 'Libre Comercio no aplicado'. Yo quiero que se aplique realmente el Libre Comercio. Existe en el papel, pero no en los hechos.
"El panorama en la Argentina y en América Latina es favorable. En Argentina siguen creciendo los patentamientos, la cosecha gruesa es positiva y el Banco Nación desarrolló un proyecto intenso de apoyo al agro, con un programa de compra de bienes de capital", evaluó el directivo de la empresa.
En América Latina, los últimos años fueron de crecimiento positivo; por eso también decidimos hacer esta inversión en Ferreyra (Córdoba). Esto contrasta con el bajo crecimiento en la Unión Europea y con la retracción de China y la región asiática. EEUU está retomando el crecimiento, pero viene lento. Asi que apostamos fuerte a América Latina y la Argentina.