04 Agosto 2013
A decir del legislador alperovichista Marcelo Caponio, su colega Gerónimo Vargas Aignasse no es sino un "chiquilín caprichoso". El ex secretario de Gobierno salió, de este modo, a responder a las críticas y cuestionamientos que el ex diputado nacional había proferido el viernes, al finalizar la reunión de una comisión especial, creada para proponer una enmienda integral del proceso penal.
La indignación de Vargas Aignasse asomó de entrada, cuando el fiscal de instrucción de Concepción Edgardo Sánchez propuso a Caponio y a Guillermo Gassenbauer como presidente y como vicepresidente, respectivamente, del equipo de trabajo.
"Esta propuesta me parece una falta de respeto y una vergüenza. No me gusta que se fabrique todo a mis espaldas, sin una reunión del bloque ("Tucumán Crece") siendo yo presidente de la comisión de Seguridad y Justicia", había bramado Vargas Aignasse.
Caponio salió ayer a responderle. "Una falta de respeto y una vergüenza es que un hombre grande y con años en la política reaccione como un chiquilín caprichoso. Vargas Aignasse debería estar a la altura de las circunstancias, y participar con más humildad y responsabilidad en esta comisión, integrada por los tres poderes del Estado y representantes de los letrados de la Capital y del sur, cuyo objetivo es, nada más y nada menos, que el estudio de la reforma y modernización de una herramienta fundamental en la lucha contra la inseguridad, como lo es el Código Procesal Penal de la Provincia", indicó el ex funcionario.
A poco de iniciar aquella reunión del viernes, Vargas Aignasse se retiró molesto del encuentro. Más tarde, anunció que no renunciará al grupo. "Estoy cansado de los pícaros que actúan a escondidas del bloque, tratándonos como si fuéramos sus punteros", había señalado en un escrito.
Caponio insistió con su dura diatriba contra el peronista díscolo. "Ante una reforma de tanta importancia no es serio que algunos se anden con caprichos y personalismos, más propios de divas que de hombres con responsabilidades institucionales", afirmó.
Finalmente, aprovechó para cuestionar la instalación de alarmas, por parte de Vargas Aignasse, en distintos barrios de la capital: "pícaros son los que con un tema tan sensible como la inseguridad, regalan generosamente alarmas, sin aportar soluciones que hagan al fondo".
La indignación de Vargas Aignasse asomó de entrada, cuando el fiscal de instrucción de Concepción Edgardo Sánchez propuso a Caponio y a Guillermo Gassenbauer como presidente y como vicepresidente, respectivamente, del equipo de trabajo.
"Esta propuesta me parece una falta de respeto y una vergüenza. No me gusta que se fabrique todo a mis espaldas, sin una reunión del bloque ("Tucumán Crece") siendo yo presidente de la comisión de Seguridad y Justicia", había bramado Vargas Aignasse.
Caponio salió ayer a responderle. "Una falta de respeto y una vergüenza es que un hombre grande y con años en la política reaccione como un chiquilín caprichoso. Vargas Aignasse debería estar a la altura de las circunstancias, y participar con más humildad y responsabilidad en esta comisión, integrada por los tres poderes del Estado y representantes de los letrados de la Capital y del sur, cuyo objetivo es, nada más y nada menos, que el estudio de la reforma y modernización de una herramienta fundamental en la lucha contra la inseguridad, como lo es el Código Procesal Penal de la Provincia", indicó el ex funcionario.
A poco de iniciar aquella reunión del viernes, Vargas Aignasse se retiró molesto del encuentro. Más tarde, anunció que no renunciará al grupo. "Estoy cansado de los pícaros que actúan a escondidas del bloque, tratándonos como si fuéramos sus punteros", había señalado en un escrito.
Caponio insistió con su dura diatriba contra el peronista díscolo. "Ante una reforma de tanta importancia no es serio que algunos se anden con caprichos y personalismos, más propios de divas que de hombres con responsabilidades institucionales", afirmó.
Finalmente, aprovechó para cuestionar la instalación de alarmas, por parte de Vargas Aignasse, en distintos barrios de la capital: "pícaros son los que con un tema tan sensible como la inseguridad, regalan generosamente alarmas, sin aportar soluciones que hagan al fondo".
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