22 Julio 2013
LAS LENGUAS. Al oeste de Concepción, niños y adultos disfrutaron a pleno de la blanca y helada jornada. LA GACETA / FOTO DE INES QUINTEROS ORIO
Eran las 18 y los copos de nieve chocaban constantemente con sus narices cuando estaban llegando a El Siambón. Es que con sus ponchos, guantes y gorros sólo tenían destapada esa parte de la cara, pero a pesar del mullido abrigo tiritaban por el frío. Y claro, el termómetro marcó ayer -1.5 en esa zona pedemontana. Silvia Pistán y sus dos hijas Daiana y Rocío, de 13 y 6 años, partieron a las 8 de San José de Chasquivil, para recorrer cientos de kilómetros a caballo hasta una pequeña casa que tienen cerca de Raco. Las niñas debían asistir hoy a clases, por ello tuvieron que hacer -como todas las semanas- la larga travesía. "En Chasquivil estaba nevando desde temprano. Ya no vemos las horas de llegar, estamos cansadas y muertas de frío", comentó la mujer.
Tanto en El Siambón como en Raco y San Javier, desde ayer al mediodía comenzó a caer "agua nieve" por las bajas temperaturas que arrastró una masa de aire polar que ingresó a Tucumán el viernes, según lo explicó Darío Ovejero, del Laboratorio Climatológico Sudamericano. El especialista confirmó que el frío persistirá hasta la primera quincena de agosto, con temperaturas que oscilarán entre los 4° de mínima y los 17° de máxima. En esa primera quincena no se sentirá el frío con tanta intensidad como sucede por estos días, en los que el termómetro marcará las temperaturas más bajas de 2013. Ovejero adelantó que para hoy se espera una mínima de 0° y una máxima de 9°, con escarchas por la mañana y probabilidad de heladas. Por ello muchos vecinos de San Miguel de Tucumán y alrededores esperan para hoy conseguir una postal con el paisaje pintado de blanco, como lo ansía la familia Vidal de Las Talitas. Ayer recibieron a las primeras gotas de agua congelada en el pie del cerro. "A dónde haya nieve, estamos nosotros", contó Isabel Vidal, que se trasladó en auto para ver nevar, en compañía de sus hijos, su marido y su padre de 81 años.
El pronóstico para los próximos días no mejorará: mañana se prevé una mínima de -1° y 13 de máxima; y para el miércoles 0° de mínima y 15° de máxima.
Escaba de blanco
En el último día de las vacaciones de invierno en la provincia, la inesperada helada movilizó también a turistas y vecinos del sur tucumano. Una legión de automovilistas se lanzó hacia los cerros que, paulatinamente, se fueron cubriendo de un manto blanco. Ayer a media mañana la nieve comenzó a darle un color distinto a los paisajes de Escaba (Alberdi), Alpachiri y Las Lenguas (al oeste de Concepción). El acontecimiento fue vivido como una verdadera fiesta, principalmente por los niños, quienes con los adultos se divirtieron construyendo los clásicos muñecos o jugando a la "guerra" con bolas de nieve.
Algunos turistas aprovecharon el domingo para dedicarse a fotografiar el paisaje, teñido de un color deslumbrante. "Vinimos a conocer el Parque Nacional de Los Alisos y los cerros del Aconquija. La pasamos muy bien y esta nevada es un broche de oro para estos días de descanso", comentó Pamela Pardiña, una docente de Capital Federal.
Una vuelta complicada
La nieve cobró caro a tucumanos y turistas el espectáculo, blanco y majestuoso que brindó en Tafí del Valle. La precipitación, por un lado, y el frío intenso, por otro, convirtieron el asfalto de la ruta provincial 307 en una literal pista de patinaje de vehículos. Para quienes descendían, los primeros 20 kilómetros de pavimento fueron un verdadero deslizadero, por hielo consolidado sobre el pavimento gracias a los cinco grados bajo cero que los termómetros digitales de los autos registraron a las 17. Para conjurar resbalos, la bajada se dio a un ritmo promedio de 20 kilómetros por hora, aunque muchos y muy largos tramos debieron transitarse a la mitad de esa velocidad. Llegar desde la villa tafinista hasta Famaillá demandó un promedio de tres horas y media. En el trayecto pudo verse, cuanto menos, cinco vehículos varados, luego de despistar y de golpear contra la montaña. Dadas las peligrosas condiciones de la vía, a las 20.30 estaba cerrada la calzada para el ascenso o descenso hasta el Valle de Tafí. A pesar de estos inconvenientes, la zona de El Indio, sobre la ruta 307, en otro de los escenarios que se eligió para disfrutar de la nieve. "Este es un momento muy especial para mí. Es la primera vez que veo una nevada. Es que soy muy del norte y estamos acostumbrados sólo a las lluvias y tormentas", confesó Jorge Mendizabal, de Chaco.
Tanto en El Siambón como en Raco y San Javier, desde ayer al mediodía comenzó a caer "agua nieve" por las bajas temperaturas que arrastró una masa de aire polar que ingresó a Tucumán el viernes, según lo explicó Darío Ovejero, del Laboratorio Climatológico Sudamericano. El especialista confirmó que el frío persistirá hasta la primera quincena de agosto, con temperaturas que oscilarán entre los 4° de mínima y los 17° de máxima. En esa primera quincena no se sentirá el frío con tanta intensidad como sucede por estos días, en los que el termómetro marcará las temperaturas más bajas de 2013. Ovejero adelantó que para hoy se espera una mínima de 0° y una máxima de 9°, con escarchas por la mañana y probabilidad de heladas. Por ello muchos vecinos de San Miguel de Tucumán y alrededores esperan para hoy conseguir una postal con el paisaje pintado de blanco, como lo ansía la familia Vidal de Las Talitas. Ayer recibieron a las primeras gotas de agua congelada en el pie del cerro. "A dónde haya nieve, estamos nosotros", contó Isabel Vidal, que se trasladó en auto para ver nevar, en compañía de sus hijos, su marido y su padre de 81 años.
El pronóstico para los próximos días no mejorará: mañana se prevé una mínima de -1° y 13 de máxima; y para el miércoles 0° de mínima y 15° de máxima.
Escaba de blanco
En el último día de las vacaciones de invierno en la provincia, la inesperada helada movilizó también a turistas y vecinos del sur tucumano. Una legión de automovilistas se lanzó hacia los cerros que, paulatinamente, se fueron cubriendo de un manto blanco. Ayer a media mañana la nieve comenzó a darle un color distinto a los paisajes de Escaba (Alberdi), Alpachiri y Las Lenguas (al oeste de Concepción). El acontecimiento fue vivido como una verdadera fiesta, principalmente por los niños, quienes con los adultos se divirtieron construyendo los clásicos muñecos o jugando a la "guerra" con bolas de nieve.
Algunos turistas aprovecharon el domingo para dedicarse a fotografiar el paisaje, teñido de un color deslumbrante. "Vinimos a conocer el Parque Nacional de Los Alisos y los cerros del Aconquija. La pasamos muy bien y esta nevada es un broche de oro para estos días de descanso", comentó Pamela Pardiña, una docente de Capital Federal.
Una vuelta complicada
La nieve cobró caro a tucumanos y turistas el espectáculo, blanco y majestuoso que brindó en Tafí del Valle. La precipitación, por un lado, y el frío intenso, por otro, convirtieron el asfalto de la ruta provincial 307 en una literal pista de patinaje de vehículos. Para quienes descendían, los primeros 20 kilómetros de pavimento fueron un verdadero deslizadero, por hielo consolidado sobre el pavimento gracias a los cinco grados bajo cero que los termómetros digitales de los autos registraron a las 17. Para conjurar resbalos, la bajada se dio a un ritmo promedio de 20 kilómetros por hora, aunque muchos y muy largos tramos debieron transitarse a la mitad de esa velocidad. Llegar desde la villa tafinista hasta Famaillá demandó un promedio de tres horas y media. En el trayecto pudo verse, cuanto menos, cinco vehículos varados, luego de despistar y de golpear contra la montaña. Dadas las peligrosas condiciones de la vía, a las 20.30 estaba cerrada la calzada para el ascenso o descenso hasta el Valle de Tafí. A pesar de estos inconvenientes, la zona de El Indio, sobre la ruta 307, en otro de los escenarios que se eligió para disfrutar de la nieve. "Este es un momento muy especial para mí. Es la primera vez que veo una nevada. Es que soy muy del norte y estamos acostumbrados sólo a las lluvias y tormentas", confesó Jorge Mendizabal, de Chaco.