Los precandidatos a diputados de la lista alperovichista que no estuvieron físicamente en el salón Blanco de la Casa de Gobierno, estuvieron presentes mediante alusiones directas o indirectas de los protagonistas. En la fila principal del público, frente al escenario, presenció el acto el ministro del Interior, Osvaldo Jaldo, segundo postulante de la nómina. A pocos metros, en un reducido sector VIP al costado de la tarima, se sentó la diputada Miriam Gallardo, que ocupa el cuarto lugar en la "Celeste y Blanca-K". Sara Alperovich de por medio, allí también ocuparon butacas los suplentes Juan Salim y Elia Fernández de Mansilla. La camporista Mabel Carrizo, tercera en la grilla, siguió los discursos parada al lado de una de las puertas de la sala. La figura de Juan Manzur, ministro de Salud de la Nación y "cabeza de lista", en cambio, fue dibujada con los halagos del vicepresidente, Amado Boudou en un acto que poco tenía que ver con la cartera que dirige. "Cuando asumió Néstor Kirchner había seis vacunas (obligatorias en el calendario) y con nuestro gran ministro, nuestro querido amigo Manzur, desde el año pasado son 16 las vacunas gratuitas. Hay muchos que se dedican a criticar y a poner palos en la rueda. Nosotros nos dedicamos a trabajar. Manzur está hoy inaugurando en Misiones un centro de enfermedades tropicales", elogió.
El dirigente restante de la lista, Daniel Toledo (suplente) fue aludido -aunque sin ser nombrado- por el gobernador, José Alperovich, mediante una obra pública que se concretará en el municipio que dirige. "Estamos por hacer 550 viviendas en Yerba Buena para la clase media", precisó sin mencionar dónde se ubicarán otras 1.400 casas anunciadas.
Como viejos amigos
Sonrieron, cruzaron miradas cómplices y compartieron anécdotas. Durante todo el acto, la presidenta provisional del Senado, Beatriz Rojkés y Alperovich cuchichearon y se mostraron como viejos amigos de Boudou. Sobre todo ella, quien ayer estaba en ejercicio de la vicepresidencia. Él la mencionó especialmente: "La vida me dio la suerte de tener a Betty de compañera en el Senado. También de ahí salen leyes muy importantes. Betty trabaja muy fuerte en ello", ponderó. Y defendió la modificación de la carta orgánica del Banco Central y el acuerdo entre YPF y la empresa Chevron.
"Estos logros no son una casualidad". La frase fue pronunciada tanto por Diego Bossio (titular de la Anses) como por Boudou para remarcar políticas kirchneristas. De hecho, el clima del acto fue "k". La visita de Bossio generó que militantes de La Cámpora ocuparan un lugar de privilegio en el público. Ocurre que la Anses local está administrada por dos hombres de esa agrupación "ultra k": Raúl Ferrazzano y Gastón Robles. Salvo por alguna remera, el grupo de militantes había pasado inadvertido, hasta que el referente de la Anses mencionó a Néstor Kirchner. Allí estallaron en un cántico: "¡Néstor no se fue, lo llevo en el corazón, con la jefa los soldados de Perón!".
El discurso de Alperovich sólo incluyó loas para las gestiones kirchneristas. "Cuando asumí, había una brecha digital grande. Pasaron 10 años y estamos entregando netbooks. A mí me gusta recorrer la provincia. Los chicos se me acercan y me piden netbooks, antes me pedían comida", ejemplificó. Luego de enumerar los logros en política habitacional desde que inició su gobierno -25.000 viviendas-, anunció nuevas obras de casas, una de ellas en un terreno de la Caja Popular de Ahorros (CPA). En ese momento, señaló al interventor Armando Cortalezzi, que estaba en el público y que se mostró exultante.
"La verdad es que más no podemos pedir a la Nación. Tenemos que trabajar fuerte y no fallarle a la gente. Quiero hacer un agradecimiento especial a este amigo, Amado Boudou. Quiero que sepan algo: Amado fue la persona que me ayudó muchísimo con las jubilaciones para amas de casa, porque gracias a él, las 70.000 llegaron rápido. Este amigo siempre estuvo a la par nuestra, desde que estaba en la Anses. Como gobernador, quiero decirle gracias por todo lo que nos dan", concluyó.
DETRÁS DE LOS CORDONES
- "¡Abajo, chicos!".- Los ministros y principales funcionarios del Gobierno provincial se sentaron en las primeras filas del público. Cuando el vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, comenzó a entregar de manera simbólica algunas netbooks, fotógrafos y camarógrafos de medios periodísticos y de dependencias oficiales salieron del "corralito" previsto para los trabajadores de prensa y se abalanzaron para lograr las imágenes. La ministra de Desarrollo Social, Beatriz Mirkin, les pidió que se arrodillaran porque tapaban a los funcionarios toda la vista hacia el escenario. "¡Abajo, chicos!", les exclamó. Finalmente, desde un lugar incómodo, cumplieron con su labor.
- Con el otro "Amado".- "¡Es muy lindo!". "Yo le voy a gritar para que se pare!". Con esas frases, un grupo de adolescentes esperaba a Boudou en un pasillo de la Casa de Gobierno. Algunas de ellas habían participado del video institucional "Conectar Igualdad" y no querían irse sin una foto con el vicepresidente. Lo esperaron y planearon estrategias para acercarse durante casi dos horas. Su misión no fue fructífera, porque Boudou salió raudamente y apenas saludó a quienes estaban detrás de un cordón. Quien accedió a sacarse una foto con ellas fue otro Amado, Regino. El presidente subrogante de la Legislatura posó sonriente y bromeó sobre la situación.
- Muchos policías y custodios.- El de ayer fue un acto con altos funcionarios de la Nación, como el vicepresidente, Amado Boudou, la presidenta provisional del Senado, Beatriz Rojkés, el titular de Anses, Diego Bossio, y el gobernador, José Alperovich. Por eso, en el lugar no hubo sólo agentes de la Policía local. Además, cada funcionario contó con la escolta de sus custodios. El despliegue de los guardias de Boudou y de Bossio no pasó desapercibido.
- Vehículo alquilado.- El vicepresidente, Amado Boudou, se movilizó en una trafic alquilada para trasladar al funcionario durante los actos.