El hermano de Ángeles habló bien del portero

BUENOS AIRES.- Sólo dos personas conocen qué pasó la mañana del 10 de junio: Ángeles Rawson y el portero del edificio en el que vivía la joven. "Ángeles habló en su autopsia, a través del ADN que se extrajo de sus uñas y dijo de quién se defendió, quién fue el agresor. La otra persona (Jorge Mangeri) hasta el día de hoy, ha preferido mantener el silencio", dijo Pablo Lanusse, abogado del padre de la víctima.

El juez de Instrucción Javier Ríos ordenó 52 medidas para tratar de responder dos preguntas claves del crimen de la adolescente. ¿Dónde mataron a Ángeles? y ¿cuál es el móvil del crimen?. Por eso, entre las pruebas que busca recolectar solicitó que Mangeri sea sometido a una pericia psiquiátrica y que sean secuestrados los contenedores de basura que suelen estar ubicados en las cercanías del edificio ubicado en Ravignani 2.360.

El móvil sexual
Ayer declararon tres personas que respondieron sobre el perfil del portero, único detenido y sospechoso de ser el autor material del homicidio. La primera fue una mujer que el 13 de junio envió un correo electrónico a una fiscalía advirtiendo sobre la necesidad de investigar a Mangeri.

En ese e-mail, la denunciante escribió: "Mi empleada doméstica hoy me comentó que vive en la casa tomada de al lado y que sospechan del portero del edificio porque es un tipo que siempre acosa verbalmente a las mujeres y ellas tienen miedo de él".

Luego declaró Juan Cruz Rawson, hermano de Ángeles. El muchacho ratificó su percepción sobre que su hermana nunca regresó al departamento. Además reiteró que tenía un buen concepto de Mangeri y que este no tenía las llaves de su departamento, informaron fuentes judiciales.

También declaró un testigo aportado por la defensa de Mangeri, quien dijo conocer desde hace largo tiempo al portero y que nunca observó conductas violentas ni ataques sexuales.

El juez ordenó que se realice una pericia psiquiátrica a Mangeri para detectar algún tipo de trastorno sexual. La sospecha de que el móvil del crimen pueda haber sido un ataque de este índole, motivó esta decisión judicial.

También se dispuso buscar cuatro contenedores de basura cercanos al domicilio de Ángeles. Hasta anoche la Policía había secuestrado sólo uno. El juez busca saber si allí fue depositado el cuerpo de la víctima el día del crimen. También solicitó que se determine si hay en cámaras de seguridad públicas o privadas que hayan podido captar los movimientos de la zona a partir de las 20 del 10 de junio, día del crimen. (Télam-DyN)