El fiscal ordenó traer a Virginia Mercado desde Aguaray para que declare sobre Paulina Lebbos

En Aguaray no hay edificios altos y, en los últimos años, el pavimento llegó a algunas calles del pueblo. La tranquilidad de la localidad salteña sólo se ve alterada cuando se realiza un operativo en el puesto que la Gendarmería Nacional tiene sobre la ruta 34 para controlar a los vehículos que llegan desde Salvador Mazza, en el límite con Bolivia.

Allí, donde vive su familia, se refugió Virginia Nazarena Mercado seis días después de la desaparición de su amiga Paulina Alejandra Lebbos. Dejó la facultad y cambió todos los planes que tenía para su vida. Ahora está a punto de volver a San Miguel de Tucumán citada, una vez más, por el caso Lebbos.

Anoche, una comisión de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) llegó hasta Aguaray con un exhorto firmado por el juez de Instrucción Francisco Pisa, para traer a Virginia Mercado a Tucumán para que cuente todo lo que sabe de la noche en que desapareció Paulina. Esa declaración se realizaría apenas llegue a Tucumán, lo que podría ocurrir esta tarde o mañana a la mañana. El horario dependerá del viaje de regreso.

El sábado 25 de febrero de 2006, Mercado y Paulina salieron a festejar que habían aprobado un parcial. Ambas estudiaban la licenciatura en Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán.

Las jóvenes fueron al boliche "Gitana", ubicado en El Abasto. Estuvieron con un grupo de amigos, y alrededor de las 6 abandonaron el local. Mercado declaró que tomaron un remise Fiat Duna bordó en avenida Alem y pasaje Gutiérrez.

La joven salteña aseguró que se bajó en su casa y que Paulina siguió el viaje en el remise, supuestamente hacia la casa de su novio César Soto. Nunca llegó.

El 4 de marzo de ese año, Virginia Mercado informó por escrito al entonces fiscal de la causa, Alejandro Noguera, que debido al acoso periodístico regresaba a Aguaray con su familia. El cuerpo de su amiga apareció siete días más tarde, el 11 de marzo, a la vera de la ruta 341 (cerca de un barranco) a la altura de la localidad de Tapia.

Nuevos testimonios

El actual fiscal que investiga el crimen, Diego López Ávila, pretende que Virginia Mercado pueda aportar algunos detalles que pasaron inadvertidos en la investigación que se realizó hasta ahora.

A partir de allí, se realizarían nuevas citaciones de personas que nunca hayan declarado en la causa. La lista de testigos que confirmaron que Paulina estuvo en "Gitana" la noche en que desapareció es abundante, según consta en el expediente. Lo que aún es una incógnita es qué pasó luego de allí, y con quién se encontró la víctima. Alberto Lebbos (padre de Paulina) y su abogado Emilio Mrad, solicitaron ayer a la mañana que se cite a declarar a varias personas. "Queremos que el fiscal investigue a fondo todas las hipótesis", explicó Lebbos al salir de tribunales.

Por otra parte, los abogados Cergio Morfil y Juan Pablo Nadotti presentaron nuevamente el pedido de libertad de Luis Olivera, el único detenido en la causa. Los letrados ofrecieron una caución real y una personal, para garantizar que el acusado estará a disposición de la Justicia.

La libertad de Olivera sería inminente. Fuentes judiciales afirmaron que no habría motivos para que el dueño del camping de El Cadillal permanezca detenido, ya que se hicieron todas las medidas necesarias y fue secuestrada la documentación pertinente.