El hermetismo envolvió ayer a la investigación por el crimen de Paulina Lebbos, luego de la inspección que el fiscal Diego López Ávila realizó el miércoles en el camping en el que vive el único detenido de la causa, Luis Olivera. Los investigadores analizaron detalladamente la documentación secuestrada en ese lugar, y según comentaron fuentes tribunalicias trabajaban a destajo con nuevas medidas.
El secreto de sumario que había dispuesto el fiscal fue cumplido a rajatabla. López Ávila tomó nuevas declaraciones y avanzó con otras medidas para corroborar las dos versiones que tiene de una de las hipótesis del caso.
Por un lado, cuatro testigos afirmaron haber escuchado que a Paulina la habrían matado el 26 de febrero de 2006 en una casa de El Cadillal que habría sido destruida posteriormente, y que Olivera, dueño de un camping de la zona, habría colaborado para ocultar el cuerpo en un freezer, bajo la promesa de dinero y otros beneficios patrimoniales.
Olivera, por su parte, dijo que no conocía nada del crimen de Paulina, y que puede justificar cómo adquirió todos los bienes que posee.
"Gendarmería Nacional había descartado la posibilidad de que aquí (en el camping) haya ocurrido el crimen; las nuevas versiones cambian con algunas circunstancias la hipótesis original. Eso es lo que estamos analizando. Ver si estamos dentro de esa hipótesis ya cerrada o si tenemos alguna circunstancia que se desconocía en ese momento", expresó el miércoles el fiscal, al finalizar la inspección al camping.
Emilio Mrad, abogado de Alberto Lebbos (padre de Paulina) realizó una presentación ayer a la mañana en la fiscalía de Instrucción de la IV° Nominación, pidiendo nuevas medidas de prueba. "No puedo dar información porque estamos bajo secreto de sumario y podríamos perjudicar a la investigación", expresó Mrad.
El patrimonio de Olivera
Durante casi cuatro horas, el hijo mayor del hombre detenido declaró ayer como testigo ante López Ávila, en el "búnker" del primer piso de Tribunales habilitado exclusivamente para esta investigación.
El muchacho le relató al fiscal, según afirmaron fuentes tribunalicias, cómo adquirieron los diversos bienes que tienen (dos propiedades habrían sido fruto de una sucesión), y detalló cuáles fueron los movimientos que hubo en la casa destruida.
El testigo reafirmó lo que había expresado su padre: la vivienda de madera que Alberto Kaleñuk, secretario privado del gobernador José Alperovich, levantó en el camping, estuvo entre 2007 y 2008. Luego habría sido trasladada a una localidad del Este tucumano. Lo mismo había dicho el hijo menor de Olivera, que declaró el miércoles a la noche. Más tarde, con todas esas pruebas, el defensor Cergio Morfil pidió la libertad, que aún no fue concedida por el fiscal.
El detenido se descompensó dentro de la comisaría
Un revuelo se originó ayer a la tarde en las adyacencias de la comisaría donde está alojado el único detenido por el caso Paulina Lebbos. Los familiares directos de Luis "El Gordo" Olivera se enteraron de que el hombre se había desmayado dentro de la celda, donde cumple el arresto, y de inmediato se acercaron a pedir que fuera asistido por un profesional.
Por razones de seguridad del detenido se reserva la ubicación de la comisaría donde ocurrió el hecho.
Afuera de la comisaría, los familiares y amigos comenzaron a preocuparse porque no llegaba nadie para asistir Olivera. Uno de sus hijos, Américo Olivera, era el más insistente en que se solicitara ayuda por la salud de su padre. Desesperado, se comunicó con otros allegados, que se acercaron al lugar para organizar una protesta hasta que el detenido fuera atendido por un médico.
Nerviosismo
alrededor de las 19, llegó una ambulancia con un médico que atendió a Olivera dentro de la comisaría. Se constató que había tenido un pico de presión arterial debido a la falta de una medicación que debe ingerir en forma diaria. En medio del nerviosismo de los familiares, el médico atendió a Olivera y logró compensarlo.
El martes, al prestar declaración ante el fiscal López Ávila, Olvera negó tener conocimiento del asesinato de Paulina Lebbos, pero el fiscal ordenó su detención. Olivera había dicho que recibió amenazas por SMS.
PERICIAS Y TESTIMONIOS
- Material para las pruebas científicas.- Ayer al mediodía llegaron a Tucumán los elementos químicos necesarios para realizar la prueba de "luminol" en un viejo freezer secuestrado durante la inspección judicial realizada el viernes. La medida también se efectuaría (de acuerdo con fuentes de la fuerza nacional) en el lugar en el que se encontraba la vivienda señalada por cuatro testigos como el lugar en el que mataron a Paulina. Anoche, los gendarmes esperaban la orden del fiscal Diego López Ávila para realizar la pericia.
- Los dichos de terceros.- El abogado Cergio Morfil remarcó que los testimonios que involucran en la causa a su defendido, Luis Olivera, están cargados de subjetividad. "Aquí hay dichos de gente que dice haber escuchado a terceros que decían... en fin esa es una vieja historia tan difícil de que se pueda corroborar", expresó el letrado en diálogo con la prensa.
Los movimientos en cuatro meses
10/02/13 La Nación pidió ver el expediente del caso. El escrito fue firmado por Leandro Jarsun, coordinador del Programa Nacional Contra la Impunidad.
20/02/13 Bernardo Lobo Bugeau fue designado para revisar los 74 cuerpos del expediente y elevar un informe sobre la investigación del crimen de Paulina.
28/02/13 El Ministro Fiscal Luis De Mitri autorizó a Lobo Bugeau a revisar cada una de las fojas del expediente. La habilitación salió después del pedido de la Nación.
23/03/13 El fiscal Carlos Albaca no permitió que hagan fotocopias ni escaneos del expediente. Ante eso, Lobo Bugeau debió tomar nota de la documentación.
03/06/13 El nuevo fiscal Diego López Ávila se hizo cargo del caso en reemplazo de Carlos Albaca, que se fue tras haber sido cuestionado por su labor.
25/06/13 Luis "El Gordo" Olivera quedó detenido. Era el encargado en un club de la zona del dique El Cadillal. El fiscal quiere verificar el patrimonio del detenido.