27 Junio 2013
TENSIÓN. El hombre sujeta el arma junto a un transporte escolar. GENTILEZA CRISTIAN ROBLES
Graves incidentes se produjeron este mediodía durante la protesta de los taxistas. Un policía, que también trabaja como chofer de taxi, sacó su arma reglamentaria, en Laprida al 300, luego de que un grupo de manifestantes lo increpara y dañara su vehículo, aparentemente, por no sumarse al paro.
La Policía redujo al hombre y le quitó el arma, en medio de gritos e insultos de parte de los conductores enrolados en la Asociación de Trabajadores Involucrados en la Actividad Taximetreta (Atiat).
El taxista fue identificado como Marcos Mansilla. Es cabo y se desempeña en la dependencia de Consignas y Custodia. Fuentes policiales indicaron que la fiscalía no ordenó su detención porque es la víctima del episodio. El efectivo está demorado en la comisaría primera.
De acuerdo al relató de los testigos, todo comenzó en Laprida y San Martín. En esa esquina, los manifestantes habrían intentado detener a la fuerza el taxi licencia 4759, para que se sume a la protesta. Según dicha versión, el chofer hizo caso omiso y avanzó entre quienes protestaban.
El auto fue alcanzado entre las calles Córdoba y San Juan, donde le destrozaron la luneta. El conductor bajó del Renault Logan y, tras intercambiar algunos golpes, sacó el arma de fuego y tensó aún más el clima.
Mientras la Policía subía al taxi a Mansilla, los manifestantes atacaron el vehículo con palos y a patadas y le rompieron el vidrio de la ventanilla del lado del acompañante.
El lector Cristian Robles logró registrar toda la violenta secuencia.
La Policía redujo al hombre y le quitó el arma, en medio de gritos e insultos de parte de los conductores enrolados en la Asociación de Trabajadores Involucrados en la Actividad Taximetreta (Atiat).
El taxista fue identificado como Marcos Mansilla. Es cabo y se desempeña en la dependencia de Consignas y Custodia. Fuentes policiales indicaron que la fiscalía no ordenó su detención porque es la víctima del episodio. El efectivo está demorado en la comisaría primera.
De acuerdo al relató de los testigos, todo comenzó en Laprida y San Martín. En esa esquina, los manifestantes habrían intentado detener a la fuerza el taxi licencia 4759, para que se sume a la protesta. Según dicha versión, el chofer hizo caso omiso y avanzó entre quienes protestaban.
El auto fue alcanzado entre las calles Córdoba y San Juan, donde le destrozaron la luneta. El conductor bajó del Renault Logan y, tras intercambiar algunos golpes, sacó el arma de fuego y tensó aún más el clima.
Mientras la Policía subía al taxi a Mansilla, los manifestantes atacaron el vehículo con palos y a patadas y le rompieron el vidrio de la ventanilla del lado del acompañante.
El lector Cristian Robles logró registrar toda la violenta secuencia.
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