Tribunales abrió de noche para escuchar a un hombre que decía tener datos del caso Lebbos

En los tribunales de avenida Sarmiento sólo estaba el personal de la guardia. Eran las 22 del viernes, cuando la tranquila rutina se quebró de repente. Al edificio llegó una camioneta de Gendarmería Nacional, por un lado, y otra del fiscal Diego López Ávila, por aparte. El funcionario entró a su despacho, encendió las luces y se dispuso a escuchar a un hombre que decía tener datos sobre el crimen de la joven Paulina Lebbos, ocurrido el 26 de febrero de 2006. Por razones de seguridad, no se reveló la identidad del testigo: un hombre de entre 50 y 60 años.

La sorpresiva aparición del individuo obligó al fiscal López Ávila a regresar de urgencia desde Raco hasta su oficina para escuchar el relato del hombre. Por la envergadura del tema también presenció el procedimiento Silvio Manino Leal, representante del Ministerio de Seguridad de la Nación.

Con custodia
Después de más de tres horas de haber estado frente al fiscal, alrededor de la 1.30 de la madrugada del sábado, el hombre fue retirado del edificio de tribunales bajo la custodia de personal de Gendarmería Nacional. 

Antes de salir del edificio, el fiscal López Ávila explicó que el hombre se presentó en tribunales con un recorte de LA GACETA en el que se podía leer la nota titulada "Se protegerá a los testigos del caso Lebbos" (publicada ese mismo viernes 7 de junio).

Ese título era una frase del fiscal López Ávila (IV° Nominación), que recibió el caso Lebbos en reemplazo de su par Carlos Albaca (II° Nominación). Este último decidió inhibirse de seguir con la investigación que tuvo durante más de siete años en sus manos, luego del informe que realizó a la Nación el abogado Bernardo Lobo Bugeau.

"Esta persona trajo información, pero obviamente hay que cotejarla y comprobarla", afirmó el fiscal López Ávila. "Así como vino él, también pueden venir otras personas, pero debemos corroborar todo y tratar el tema con mucha prudencia", insistió.

Los detalles de lo que declaró el nuevo testigo quedaron bajo reserva de la fiscalía y la valoración de su testimonio se verá en los próximos días. "Este operativo de emergencia (con agentes de Gendarmería) fue para darle toda la seguridad a esta persona que llegó a declarar", resaltó el fiscal.

Por su parte, Manino Leal dijo que todo lo que la fiscalía considere necesario para resguardar la seguridad del testigo y de otros que pudieran surgir tendrá respaldo de las fuerzas federales.