Esta mañana se realizó en los Tribunales de Concepción una reunión entre miembros de la Justicia, la Policía y dirigentes de los taxistas que protestaron ayer, luego de que el miércoles último falleciera en el hospital Padilla el taxista Miguel Ángel Robles, de 48 años, a causa de las lesiones cerebrales que sufrió hace un mes al ser agredido durante un asalto.
El eje del encuentro fue el análisis sobre cómo garantizar una mayor seguridad en el sur tucumano. Participaron los fiscales de instrucción Edgardo Sánchez, Fabián Rojas y Jorge Arturo Elchaiede. También participó el Jefe de Policía, Jorge Racedo, y por los taxistas estuvo Jorge Monero, junto a otros dirigentes del sector.
La furia de los taxistas tuvo ayer al mediodía su pico máximo, frente al Centro Judicial
local. Además de la quema de cubiertas, lanzaron bombas de estruendo y
una lluvia de huevos contra la fachada del edificio.
Franco Moreno, vocero de los manifestantes, dijo que lo sucedido con Robles supera el límite de la tolerancia. LA GACETA