31 Mayo 2013
Los resultados que exhibió la última campaña triguera en el país, con la menor siembra de los últimos 100 años y un fuerte recorte en la producción, hacían prever un mercado en ebullición. Y los pronósticos se confirmaron. En los últimos días, el precio interno del trigo superó al valor de la soja (U$S 363 contra U$S 350) y se constituyó en un récord absoluto para el cereal. Con serios problemas de abastecimiento, la molinería es la que hoy ofrece pagar más de $ 1.700 por tonelada, mientras la poca oferta disponible sigue sin aparecer. En este escenario, el precio de la bolsa de harina de 50 kg duplicó su valor en los últimos 10 días. Tratándose de un producto sensible para la evolución de la canasta de alimentos básicos, en medio del congelamiento de precios, la situación alarma al Gobierno. Es que hace más de cinco años se administran las existencias a través de permisos y cupos para exportar, para responder a la necesidad de "defender la mesa de los argentinos". Desde la producción señalan a esa política como responsable de la actual estampida de precios y faltantes.
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