La carta destacada

ABUELOS VOLADORES

Por una nota del el 8/5, terminé de convencerme de que, como se afirma, el siglo XXI va a ser de las mujeres. Pasa que reservadamente, yo sabía que poseía esta marca: ser la persona de mayor edad en Tucumán que se había lanzado en parapente (hace dos años, desde Loma Bola). Y bien. Ese día me di con que una abuela con muy buena onda -Malena, de 82 años- había superado mi marca. Mis más calurosas felicitaciones. Dice que quedó con ganas de lanzarse de nuevo. Y sí, eso ocurre. Pero la cuestión "pesitos" no lo permite. Ahora bien, cuando yo me tiré me hicieron un descuento en razón de que éramos dos (mi nuera también lo hizo). Así pues, bien podríamos con Malena crear el grupo AVE para reclutar otros abuelos interesados y lograr un descuento por cantidad -y fidelidad- de clientes. (Ah, AVE es la sigla de Abuelos Voladores Entusiastas). Pero ya en serio. El precio de $500 no está mal, en realidad, si se compara. En febrero me quise lanzar en Bariloche, y salía $700. Para colmo, había que esperar una semana para el turno, por lo cual no fue posible. Quisiera, con estas líneas, tentar a los que quizás ya lo han pensado: anímense, que no se van a arrepentir, es una experiencia fabulosa. Y vayan con los nietos, que a ese gran momento ellos lo recordarán toda la vida. Para terminar. A los que no se le atreven al parapente, me permito sugerirles que den una vuelta en una avioneta de alas altas (se ve mejor para abajo). Es una sensación aproximada y uno se siente más seguro. El año pasado volé, con mi señora, por sobre el canal de Beagle. El vuelo duró media hora y resultó más barato que una "parapenteada". Inolvidable. Así pues, animarse. ¡Vamos abuelos!

José E. Santillán
Lizondo Borda 1.137
San Miguel de Tucumán