24 Mayo 2013
Néstor y Cristina tomaron medidas de alto impacto político y social
Un repaso de los hechos que marcaron la gestión del matrimonio Kirchner. El acento en los derechos humanos y la recuperación del rol del Estado en la articulación de la vida nacional. La Asignación Universal por Hijo, un viejo anhelo. Otra manera de pararse ante el mundo.
KIRCHNER ORDENA DESCOLGAR EL CUADRO DE VIDELA.
En un aniversario del golpe militar de 1976, el entonces presidente dispuso que se bajaran los cuadros de Videla y Reynaldo Bignone que se exhibían en las paredes del Colegio Militar. FOTOS DE TELAM
El inicio de la gestión de Néstor Kirchner estuvo signado por una serie de medidas que marcaron un camino de transformación: la renovación de la Corte Suprema de Justicia, la conformación del escenario para que se reactiven las causas por delitos de lesa humanidad y la cancelación de la deuda con el FMI.
Otras medidas claves de los últimos 10 años fueron la estatización de los fondos jubilatorios, la nacionalización de YPF para que el Estado recupere el control estatal sobre esta estratégica empresa; la reestatización de Aerolíneas Argentinas, Aguas Argentinas y el Correo; y el impulso de la ley del Matrimonio Igualitario, entre otras.
Juicio a la Corte
Uno de los primeros frentes sobre los que se avanzó fue la desprestigiada Corte Suprema de Justicia que, durante los 90, se había ganado con creces el mote de adicta al poder, por su funcionalidad con el menemismo y los grandes intereses económicos.
En un discurso transmitido el 4 de junio del 2003 por cadena nacional, Kirchner pidió enérgicamente al Congreso que pusiera en marcha el instrumento del juicio político contra alguno o algunos miembros del máximo tribunal, integrantes de la "tristemente célebre mayoría automática".
"Pedimos con toda humildad, pero con coraje y firmeza, que los señores legisladores, que el Congreso marquen un hito hacia la nueva Argentina preservando a las instituciones de los hombres que no están a la altura de las circunstancias", aseveró en esa oportunidad el entonces mandatario.
El 25 de septiembre de 2003, en el primer discurso que pronunció como presidente argentino en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidos, Kirchner hizo saber, frente a mandatarios de todo el mundo, incluido los Estados Unidos, su determinación de hacerle "ganar libertad" al país para la definición soberana de sus políticas económicas.
Tomando como disparador el fracaso de ese año de las negociaciones en el marco de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Kirchner disparó: "resulta paradójico y casi ridículo que se pretenda que paguemos nuestra deuda y, al mismo tiempo, se nos impida comerciar y vender nuestros productos".
Deuda cancelada
Seguidamente, sembró la semilla que, dos años después, se traduciría en la cancelación de la deuda con el FMI: "este nuevo milenio debe desterrar los modelos de ajuste que basan la prosperidad de unos en la pobreza de otros. El comienzo del siglo XXI debe significar un final de época y el comienzo de una nueva colaboración entre acreedores y deudores", postuló. Además, en esa ocasión, a exactamente cuatro meses de haber asumido la Presidencia, Kirchner reclamó por primera vez lo que él y después Cristina Fernández, demandarían en todos los foros internacionales: la necesidad de una profunda reforma en los organismos multilaterales de crédito.
En tanto, bajo la consigna de memoria, verdad y justicia -bandera que desde hacía décadas venían enarbolando las organizaciones de derechos humanos encabezadas por Abuelas y Madres de Plaza de Mayo- Kirchner comenzó a dar una irreversible vuelta de página en la historia de la impunidad. Fue a mediados de 2003.
Su convicción no se quedó en retórica y se fue traduciendo en pasos certeros a partir del 11 de agosto de ese año, cuando firmó el decreto de adhesión del Estado argentino a la Convención sobre la Imprescriptibilidad de los Crímenes de Guerra y de Lesa Humanidad. Empezó a cercar así a la hasta entonces omnipotente impunidad.
Punto final, nulo
Un día después, además, el 12 de agosto de 2003, la Cámara de Diputados aprobaría en el recinto el proyecto de nulidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, que finalmente quedó convertido en ley ocho días más tarde, con la sanción que le dio a la norma el Senado.
De todos modos, el 24 de marzo de 2004, en el marco del primer aniversario del golpe de Estado de 1976 que le tocaba vivir como presidente, Kirchner ordenó descolgar los cuadros de los dictadores y genocidas Jorge Rafael Videla y Reynaldo Bignone que aún exhibían las paredes del Colegio Militar.
Traspaso de la ESMA
Ese mismo día, en un acto que encabezó luego en la ex ESMA, Kirchner pidió perdón de parte del Estado nacional "por la vergüenza de haber callado durante 20 años de democracia tantas atrocidades", y firmó el traspaso de la ESMA a los organismos de derechos humanos para transformar el predio en lo que es hoy, un Espacio de la Memoria.
De todos modos, los proyectos esenciales que marcarán la agenda económica y social se lograron aprobar en la gestión de Cristina, que en los primeros seis meses de su Gobierno estuvo marcada por el conflicto con el agro, que dio una vuelta de página definitiva en su relación con el vicepresidente, Julio Cobos, luego de que el mendocino votara en contra del proyecto del oficialismo.
Estatizaciones
Es así como el 3 de septiembre de 2008, el Congreso, a instancias de un proyecto impulsado por Cristina, sancionó la reestatización de Aerolíneas Argentinas, que declaró como servicio público a la actividad aerocomercial y dispuso que el Estado mantendría una mayoría accionaria del 51%.
Tras el batacazo legislativo opositor que había causado hacía poco menos de dos meses el voto "no positivo" del entonces vicepresidente Cobos al esquema de retenciones móviles para el sector agropecuario, el Gobierno nacional lograba encolumnar su mayoría parlamentaria con esta decisión, con el voto de 46 senadores a favor y de 21 en contra.
Dos meses más tarde, en noviembre de 2008, y con el impulso del Poder Ejecutivo, el Congreso sancionó la ley que estatizó las AFJP, le devolvió al Estado el manejo del sistema previsional y puso fin a un negocio multimillonario de las jubilaciones privadas, que nació, creció y se multiplicó al calor de la década del 90 y sus recetas neoliberales.
Fútbol para Todos
El 20 de agosto de 2009 nacía el programa Fútbol para Todos. La Presidenta presentó -en un acto en el campo de entrenamiento de la selección de fútbol en Ezeiza del que participó Diego Armando Maradona- un acuerdo con la AFA para la trasmisión de todos los partidos de fútbol por canales de aire, y, por lo tanto, en forma gratuita. "Ya no nos secuestrarán los goles", afirmó la mandataria en alusión al contrato que la Asociación del Fútbol Argentino rompió con la empresa TSC, por el cual le daba la exclusividad para la trasmisión de los partidos de fútbol y de la emisión de los goles a través del programa "Fútbol de Primera", de Canal 13.
Nueva ley de Medios
Dos meses más tarde, el 10 de octubre del 2009, se alcanzaba una de las grandes conquistas de la década: después de casi 26 años de terminada la última dictadura, el Congreso lograba poner fin a la Ley de Radiodifusión, dictada en 1980 por el régimen militar, y aprobar la Ley de Medios.
La norma -cuyo texto había sido debatido en más de una veintena de foros realizados a lo largo de todo el país y que se basaba en los puntos que habían sido planteados cinco años antes por la Coalición por una Radiodifusión Democrática- buscó democratizar el escenario de la comunicación en Argentina.
Asignación por hijo
Otra de los pasos decisivos de la última década fue la creación -a través del decreto 1602 del 29 de octubre del 2009, firmado por Cristina- de la Asignación Universal por Hijo, que actualmente alcanza a más de 3,5 millones de niños y adolescentes, según datos del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
"Conectar Igualdad" fue otra de las medidas con la mirada puesta en la generación de más oportunidades para chicos, chicas y adolescentes: el programa, creado en abril del 2010 a través del Decreto 459, dispuso la entrega de una netbook a cada estudiante y docente de escuelas públicas secundarias, de educación especial, y de institutos de formación docente.
Hasta el momento, según consignan datos oficiales, fueron distribuidas casi 2,5 millones de unidades en todo el país en el marco de este programa que se propone -entre otros objetivos- "promover la igualdad de oportunidades entre todos los jóvenes del país, al brindarles un instrumento que permita achicar la brecha digital".
Matrimonio igualitario
El 15 de julio de 2010, en lo que significó un hito en la ampliación de los derechos civiles, el Congreso sancionó la Ley de Matrimonio Igualitario para personas del mismo sexo, y se convirtió así en el primer país en Latinoamérica con una norma de este tipo y el segundo en América, luego de Canadá.
En tanto, el 3 de mayo de 2012 la Cámara de Diputados convirtió en ley un proyecto enviado por la Presidenta que dispuso la nacionalización de la petrolera YPF, luego de que, en la década del 90 fuera entregada a manos privadas -la española Repsol- por el entonces mandatario Carlos Menem.
3 de septiembre de 2008
Reestatización de Aerolíneas Argentinas
Ese día, a instancias de Cristina Fernández, el Congreso aprobó el regreso de la empresa al Estado.
24 de marzo de 2004
Kirchner ordena descolgar el cuadro de Videla
En un aniversario del golpe militar de 1976, el entonces presidente dispuso que se bajaran los cuadros de Videla y Reynaldo Bignone que se exhibían en las paredes del Colegio Militar.
20 de agosto de 2009
Para que nadie se quede sin ver fútbol
Acompañada por Maradona, la Presidenta firmó un acuerdo con la AFA para imponer "Fútbol para Todos".
Otras medidas claves de los últimos 10 años fueron la estatización de los fondos jubilatorios, la nacionalización de YPF para que el Estado recupere el control estatal sobre esta estratégica empresa; la reestatización de Aerolíneas Argentinas, Aguas Argentinas y el Correo; y el impulso de la ley del Matrimonio Igualitario, entre otras.
Juicio a la Corte
Uno de los primeros frentes sobre los que se avanzó fue la desprestigiada Corte Suprema de Justicia que, durante los 90, se había ganado con creces el mote de adicta al poder, por su funcionalidad con el menemismo y los grandes intereses económicos.
En un discurso transmitido el 4 de junio del 2003 por cadena nacional, Kirchner pidió enérgicamente al Congreso que pusiera en marcha el instrumento del juicio político contra alguno o algunos miembros del máximo tribunal, integrantes de la "tristemente célebre mayoría automática".
"Pedimos con toda humildad, pero con coraje y firmeza, que los señores legisladores, que el Congreso marquen un hito hacia la nueva Argentina preservando a las instituciones de los hombres que no están a la altura de las circunstancias", aseveró en esa oportunidad el entonces mandatario.
El 25 de septiembre de 2003, en el primer discurso que pronunció como presidente argentino en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidos, Kirchner hizo saber, frente a mandatarios de todo el mundo, incluido los Estados Unidos, su determinación de hacerle "ganar libertad" al país para la definición soberana de sus políticas económicas.
Tomando como disparador el fracaso de ese año de las negociaciones en el marco de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Kirchner disparó: "resulta paradójico y casi ridículo que se pretenda que paguemos nuestra deuda y, al mismo tiempo, se nos impida comerciar y vender nuestros productos".
Deuda cancelada
Seguidamente, sembró la semilla que, dos años después, se traduciría en la cancelación de la deuda con el FMI: "este nuevo milenio debe desterrar los modelos de ajuste que basan la prosperidad de unos en la pobreza de otros. El comienzo del siglo XXI debe significar un final de época y el comienzo de una nueva colaboración entre acreedores y deudores", postuló. Además, en esa ocasión, a exactamente cuatro meses de haber asumido la Presidencia, Kirchner reclamó por primera vez lo que él y después Cristina Fernández, demandarían en todos los foros internacionales: la necesidad de una profunda reforma en los organismos multilaterales de crédito.
En tanto, bajo la consigna de memoria, verdad y justicia -bandera que desde hacía décadas venían enarbolando las organizaciones de derechos humanos encabezadas por Abuelas y Madres de Plaza de Mayo- Kirchner comenzó a dar una irreversible vuelta de página en la historia de la impunidad. Fue a mediados de 2003.
Su convicción no se quedó en retórica y se fue traduciendo en pasos certeros a partir del 11 de agosto de ese año, cuando firmó el decreto de adhesión del Estado argentino a la Convención sobre la Imprescriptibilidad de los Crímenes de Guerra y de Lesa Humanidad. Empezó a cercar así a la hasta entonces omnipotente impunidad.
Punto final, nulo
Un día después, además, el 12 de agosto de 2003, la Cámara de Diputados aprobaría en el recinto el proyecto de nulidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, que finalmente quedó convertido en ley ocho días más tarde, con la sanción que le dio a la norma el Senado.
De todos modos, el 24 de marzo de 2004, en el marco del primer aniversario del golpe de Estado de 1976 que le tocaba vivir como presidente, Kirchner ordenó descolgar los cuadros de los dictadores y genocidas Jorge Rafael Videla y Reynaldo Bignone que aún exhibían las paredes del Colegio Militar.
Traspaso de la ESMA
Ese mismo día, en un acto que encabezó luego en la ex ESMA, Kirchner pidió perdón de parte del Estado nacional "por la vergüenza de haber callado durante 20 años de democracia tantas atrocidades", y firmó el traspaso de la ESMA a los organismos de derechos humanos para transformar el predio en lo que es hoy, un Espacio de la Memoria.
De todos modos, los proyectos esenciales que marcarán la agenda económica y social se lograron aprobar en la gestión de Cristina, que en los primeros seis meses de su Gobierno estuvo marcada por el conflicto con el agro, que dio una vuelta de página definitiva en su relación con el vicepresidente, Julio Cobos, luego de que el mendocino votara en contra del proyecto del oficialismo.
Estatizaciones
Es así como el 3 de septiembre de 2008, el Congreso, a instancias de un proyecto impulsado por Cristina, sancionó la reestatización de Aerolíneas Argentinas, que declaró como servicio público a la actividad aerocomercial y dispuso que el Estado mantendría una mayoría accionaria del 51%.
Tras el batacazo legislativo opositor que había causado hacía poco menos de dos meses el voto "no positivo" del entonces vicepresidente Cobos al esquema de retenciones móviles para el sector agropecuario, el Gobierno nacional lograba encolumnar su mayoría parlamentaria con esta decisión, con el voto de 46 senadores a favor y de 21 en contra.
Dos meses más tarde, en noviembre de 2008, y con el impulso del Poder Ejecutivo, el Congreso sancionó la ley que estatizó las AFJP, le devolvió al Estado el manejo del sistema previsional y puso fin a un negocio multimillonario de las jubilaciones privadas, que nació, creció y se multiplicó al calor de la década del 90 y sus recetas neoliberales.
Fútbol para Todos
El 20 de agosto de 2009 nacía el programa Fútbol para Todos. La Presidenta presentó -en un acto en el campo de entrenamiento de la selección de fútbol en Ezeiza del que participó Diego Armando Maradona- un acuerdo con la AFA para la trasmisión de todos los partidos de fútbol por canales de aire, y, por lo tanto, en forma gratuita. "Ya no nos secuestrarán los goles", afirmó la mandataria en alusión al contrato que la Asociación del Fútbol Argentino rompió con la empresa TSC, por el cual le daba la exclusividad para la trasmisión de los partidos de fútbol y de la emisión de los goles a través del programa "Fútbol de Primera", de Canal 13.
Nueva ley de Medios
Dos meses más tarde, el 10 de octubre del 2009, se alcanzaba una de las grandes conquistas de la década: después de casi 26 años de terminada la última dictadura, el Congreso lograba poner fin a la Ley de Radiodifusión, dictada en 1980 por el régimen militar, y aprobar la Ley de Medios.
La norma -cuyo texto había sido debatido en más de una veintena de foros realizados a lo largo de todo el país y que se basaba en los puntos que habían sido planteados cinco años antes por la Coalición por una Radiodifusión Democrática- buscó democratizar el escenario de la comunicación en Argentina.
Asignación por hijo
Otra de los pasos decisivos de la última década fue la creación -a través del decreto 1602 del 29 de octubre del 2009, firmado por Cristina- de la Asignación Universal por Hijo, que actualmente alcanza a más de 3,5 millones de niños y adolescentes, según datos del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
"Conectar Igualdad" fue otra de las medidas con la mirada puesta en la generación de más oportunidades para chicos, chicas y adolescentes: el programa, creado en abril del 2010 a través del Decreto 459, dispuso la entrega de una netbook a cada estudiante y docente de escuelas públicas secundarias, de educación especial, y de institutos de formación docente.
Hasta el momento, según consignan datos oficiales, fueron distribuidas casi 2,5 millones de unidades en todo el país en el marco de este programa que se propone -entre otros objetivos- "promover la igualdad de oportunidades entre todos los jóvenes del país, al brindarles un instrumento que permita achicar la brecha digital".
Matrimonio igualitario
El 15 de julio de 2010, en lo que significó un hito en la ampliación de los derechos civiles, el Congreso sancionó la Ley de Matrimonio Igualitario para personas del mismo sexo, y se convirtió así en el primer país en Latinoamérica con una norma de este tipo y el segundo en América, luego de Canadá.
En tanto, el 3 de mayo de 2012 la Cámara de Diputados convirtió en ley un proyecto enviado por la Presidenta que dispuso la nacionalización de la petrolera YPF, luego de que, en la década del 90 fuera entregada a manos privadas -la española Repsol- por el entonces mandatario Carlos Menem.
3 de septiembre de 2008
Reestatización de Aerolíneas Argentinas
Ese día, a instancias de Cristina Fernández, el Congreso aprobó el regreso de la empresa al Estado.
24 de marzo de 2004
Kirchner ordena descolgar el cuadro de Videla
En un aniversario del golpe militar de 1976, el entonces presidente dispuso que se bajaran los cuadros de Videla y Reynaldo Bignone que se exhibían en las paredes del Colegio Militar.
20 de agosto de 2009
Para que nadie se quede sin ver fútbol
Acompañada por Maradona, la Presidenta firmó un acuerdo con la AFA para imponer "Fútbol para Todos".
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