"El gobernador nunca me soltó la mano"
Luego de nueve meses de silencio, el ex director de la DAU, Miguel Brito, habló con LA GACETA. Se refirió a una campaña en su contra y responsabilizó, por la construcción de las obras, a la SAT y a la Municipalidad de la capital. Negó que le haya construido la casa al ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, y le agradeció a Alperovich el respaldo que le brindó
Llegó a la Redacción con una tablet en la mano. Como no le funcionaba, leyó un escrito de puño y letra y efectuó su descargo. "He decidido realizar esta declaración a los fines de aclarar algunos temas que se me atribuyen y que sólo están cargados de malicia y falsedades. Se ha llegado al colmo de hablar de empresas fantasma y de domicilios inexistentes de proveedores. Todo no es más que una vil mentira", expresó ayer el ex director de Arquitectura y Urbanismo (DAU), Miguel Brito. El ex bussista y actual colaborador del alperovichismo en el Senado debió renunciar en agosto del año pasado, envuelto en un escándalo por sobreprecios -frenados por el Tribunal de Cuentas- en la compra de luminarias para la Casa de Gobierno. Desde entonces, se sucedieron denuncias judiciales en su contra por presuntas anomalías en la contratación de empresas y realización de obras.
- Más allá de su descargo, hay una denuncia penal en su contra.
-No me interesa. Lo único que a mí me importa es aclarar esta situación. Quiero limpiar mi nombre por la gente que ha confiado en mí.
- ¿Por qué cree que el gobernador no lo dejó asumir en la Legislatura luego del escándalo, cuando pidió licencia Armando Cortalezzi?
- El gobernador no me dijo que no asumiera.
- ¿Y por qué no asumió entonces la banca, en lugar de renunciar?
- Fue una decisión mía, luego de recibir un ataque infernal por parte de ustedes. Me pegaron durante varios meses. En la historia de la democracia tucumana no he visto un ataque tan sistemático y cruel de LA GACETA hacia alguien. Ese ataque sistemático se sumó al oportunismo de (Ariel) García y (Silvia) Elías de Pérez. Esto me ocasionó un desgaste moral. Fue un ataque muy grande a mi familia. ¿Y yo me iba a ir a esa cueva de víboras (la Legislatura), que me estaban atacando?
- ¿De qué vive ahora?
- Ustedes sacaron que yo vivo del Senado de la Nación. Todo es mentira.
- ¿No está adscripto al Senado? ¿No es empleado del senador Sergio Mansilla?
- Sí, estoy adscripto. Estoy adscripto como asesor del senador Mansilla, pero mi sueldo me lo sigue pagando la Municipalidad. Yo tengo categoría 24 ahí.
- ¿Se siente una víctima?
- Y claro, ¿qué me estás preguntando? Estás viendo a un boxeador hecho m... que le pegaron 10.000 piñas y le preguntas ¿che, sentís que te pegaron? Me han hecho re-ca... (sic). Se puede haber cometido errores. En la administración pública, aquí y en cualquier oficina se cometen errores de tipeo o de lo que sea.
- Algunas empresas se habrían construido de manera irregular y ahora salta a la vista que las obras no fueron bien hechas... ¿De quién es la culpa entonces?
- Somos varios (los responsables). La SAT, que supervisaba todos los trabajos. Porque no se hace nada sin la SAT. Los ingenieros fiscales del Tribunal de Cuentas, porque no se hace un metro de cañería si ellos no ven si es verdad o no. También el ingeniero de la DAU que era responsable de la obra. O sea, somos varios. Que (Alfredo) Calvo de la SAT no se lave las manos. Si hay una obra mal hecha que vaya la SAT y la solucione. Resulta que ahora toda la culpa la tiene Brito. El municipio hizo mal un relevamiento para pavimentar una obra del plan Más Cerca y, ¿también es culpa de la DAU? Paremos un poco la mano. Yo me hago responsable de mis errores y de lo que me pueda haber equivocado.
- ¿La Justicia lo citó a declarar?
- No, todavía no. Soy respetuoso de la Justicia. Vine porque creí que era necesario decirles que lo que ustedes están publicando es falso. Tuvieron un comportamiento cruel conmigo trayendo información que les llegó y no la chequearon.
- Toda la información fue chequeada...
- Pero ustedes hablaron sólo con familiares... no fueron a la DAU.
- ¿Qué siente ante el hecho de que no haya salido ningún alperovichista a respaldarlo?
- Es que fue una campaña tan grande que ha sembrado dudas.
- ¿El gobernador dudó de usted?
- Por supuesto que sí. Y está en su derecho. Él mandó tres auditorías posteriores a mi renuncia. De las tres auditorías he salido bien. El gobernador nunca me soltó la mano. Yo le agradezco al gobernador. En este momento quiero solucionar toda mi situación legal.
- Pero hay quejas en varios barrios de obras mal hechas y que ya no funcionan, como las cloacas...
- Todas las obras están hechas, pagadas y controladas. Ahora, que fallen por falta de mantenimiento, bueno, eso es normal. Ustedes sacaron durante tres días en media página un charquito con agua servida en el barrio Parque Batalla. Sacaron a un tipo mirando un pozo que no era de cloacas. Yo tengo años en esto y ya sé cuando lo quieren "hacer de goma" a alguien.
- Pero la gente del barrio (Parque Batalla) tiene un problema real de cloacas...
- Eso es solucionable, porque va alguien y lo arregla. Es una obra de 2010. Ahora, por el mal uso pudo haberse roto. Lo resultante de todo esto es que yo he quedado como el paradigma de lo que no hay que hacer. ¡Qué he hecho yo! ¿Acaso me he enriquecido? ¿En qué me he enriquecido yo para que me hagan ca... tanto (sic)?
- ¿Usted no se enriqueció con la política?
- Cuando he sido legislador era de la oposición y cobraba un sueldo miserable. No me enriquecí. Vivo gracias a Dios bien, pero no me quejo porque me lo gané trabajando. En los últimos cinco años con Alperovich he trabajado día y noche a la par de él. Alperovich es una máquina de laburar. Íbamos a ver una cloaquita aquí, otra allá...
- Hay un rumor que circula que usted le habría hecho la casa al ministro (Juan) Manzur...
(Ríe a carcajadas, se tapa la boca con la mano y se queda en silencio).
- ¿Qué piensa de eso?
- No pienso nada, no digo nada. Son cosas... Que la analice quien hace la denuncia. No sé nada. Como reflexión de todo lo que pasó es que no he querido salir a declarar nada porque esperaba que la Justicia me llame o archive, no sé. El tema del choripanero, de la iglesia evangélica o de las empresas fantasma es falso. Yo he sido víctima de cargadas por eso. Cuando voy a jugar al fútbol, los ingenieros me dicen: "¡eh, Brito! Contratame que vendo choripanes..."
- ¿Qué piensa de quienes lo denunciaron penalmente? (por los legisladores García y Elías de Pérez)
- No los conozco. Nunca me los he cruzado. Lo que sé es que ellos están usando mi caso para posicionarse dentro del radicalismo. Esta legisladora (Elías de Pérez) me usó para crecer ella en la interna radical. Son oportunistas que ni merecen que le conteste.
- ¿Cree que va a salir airoso de la Justicia?
- No, no estoy seguro. Ruego a Dios salir de todo esto. Sí estoy seguro de que hicimos muchas cosas para el beneficio de la gente. Podemos habernos equivocado y podemos tener errores.
- ¿Qué tipo de errores?
- Te podés equivocar con obras que no están funcionando bien. Podés haber cometido un error involuntario. Son errores humanos.
Polémicas y explicaciones
La renuncia
En julio de 2012, la DAU quiso arreglar la iluminación de la fachada de la Casa de Gobierno. El Tribunal de Cuentas halló sobreprecios de un 128% y frenó la operación. Brito tuvo que renunciar. En su descargo, adujo que esa obra fue gestionada por el subdirector, Roberto Bianchi.
Obras para familiares
Un corralón, propiedad del suegro y del cuñado del ex funcionario Brito, le facturó servicios por casi $ 1 millón a la Dirección de Arquitectura y Urbanismo, según denunció Silvia Elías de Pérez, legisladora por la UCR, ante la Justicia. Ayer, Brito admitió esa contratación pero dijo que no tiene nada de malo.
Una sede inexistente
Un proveedor de la DAU inscribió sede en Emilio Castelar 450. La dirección no existe: al lado (en la numeración 448), reside un vendedor ambulante, según constató LA GACETA. Brito dijo que esa dirección se registró por error en la web del organismo: la sede de la firma es en Tafí Viejo.
Dos firmas, una casa
Constitución 215 es la dirección que informaron ante la DAU dos empresas distintas, que facturaron unos $ 3,6 millones. En esa casa vive una mujer que trabaja como empleada doméstica. Brito adujo que él no tenía por qué conocer a los proveedores ni dónde vivían.
Cuestión de fé
Otro proveedor del organismo, que facturó $ 2,5 millones, registró avenida Roca 1.534 como domicilio comercial ante la DAU. En esa vivienda funciona una iglesia evangélica. Según el ex funcionario, la sede de esa firma es un espacio paralelo dentro del inmueble, pero no el templo.
Cloacas sin uso
Los vecinos del barrio Parque Batalla denunciaron este lunes que las cloacas que hizo la DAU nunca funcionaron. Parte de las obras fueron realizadas por las empresas radicadas en Constitución 215. Brito dijo ayer que es un problema por el que deberán dar cuenta las empresas intervinientes.