27 Abril 2013
DESAFÍO. Bourlé y Cisneros encabezaron la protesta contra el ministro del PE. LA GACETA / FOTO DE INéS QUINTERO ORIO
A poco de iniciada la mañana, el barrio Sur se despabiló de golpe: un grupo de medio centenar de personas golpeaba bombos y redoblantes y hacía explotar bombas de estruendo frente a una vivienda de Lavalle al 800. Dirigentes y afiliados a la Asociación Bancaria, hicieron un escrache frente al domicilio del ministro de Seguridad Ciudadana, Jorge Gassenbauer.
Los manifestantes estaban liderados por el dirigente nacional del gremio Carlos Cisneros y por el secretario general en Tucumán, Eduardo Bourlé. La protesta se extendió desde las 9.30 hasta las 11. Luego, la columna marchó por la calle, hacia la sede del gremio.
Según contó Cisneros a LA GACETA, un hostigamiento del D2 (inteligencia de la Policía provincial) hacia tres jóvenes vinculados con La Bancaria les colmó la paciencia y motivó el escrache. Se trata de los mismos jóvenes que fueron agredidos el jueves 28 de marzo, por una patota frente a la vereda de la Casa de Gobierno. En aquella ocasión, las víctimas estaban repartiendo por el microcentro copias de una publicación periodística sobre presuntos "negociados" del interventor de la Caja Popular, el legislador -en uso de licencia- Armando "Cacho" Cortalezzi.
El dirigente agregó que el lunes los tres jóvenes sufrieron un nuevo ataque, esta vez de los policías. "Cuando salían de desayunar de un bar cercano a la sede de La Bancaria, el D2 los interceptó; les sacaron los documentos y los quisieron detener. No lo lograron porque salió gente del gremio", contó el dirigente bancario. Agregó que el abogado GustavoMorales y Bourlé se dirigieron hasta la Dirección de Investigaciones. "Comprobaron que la 'Brigada' no tenía nada que ver. Es más, el mismo policía que los atendió les dijo que era gente del D2", añadió Cisneros.
A raíz de esto, decidieron escrachar ayer la casa del ministro. "El D2 depende directamente de Gassenbauer. Y como estamos hartos de él y del (secretario de Seguridad) (Paul) Hofer, vinimos a decirle si le gustaría que el D2 apriete a su hijo, a ese proyecto de pistolero, el legislador (Guillermo) Gassenbauer, como aprieta a nuestros chicos. No estamos dispuestos a (soportar esto)", advirtió. Según contó, interpusieron un pedido de hábeas corpus para los jóvenes agredidos: "ahora, para que estos tres chicos puedan transitar por Tucumán debemos recurrir a un hábeas corpus, ¡estamos locos!".
Cuestionó con vehemencia a los jueces Alejandro Javier Tomás y Juan Francisco Pisa, y al ministro Fiscal de la Corte, Luis de Mitri, debido a que, según dijo, no avanzan las denuncias presentadas por La Bancaria, por los incidentes del 28 del mes pasado. "Las causas están paralizadas; siguen durmiendo la siesta porque el delincuente de De Mitri no acelera la investigación. Si tiene dignidad debería renunciar", reclamó.
Cisneros justificó el escrache. "Seguramente mañana (por hoy) saldrá (el periodista de LA GACETA) Álvaro Aurane a decir 'el método fascista de escrachar a los funcionarios'. Bueno, nosotros debemos buscar la forma de defendernos", dijo. Además, lanzó una advertencia a Gassenbauer: "lo repudiarán en los bancos que vaya. Que haga él los trámites; que no mande al cajero, al ordenanza, al perro. Lo repudiará todo el mundo".
La Bancaria y el Gobierno mantienen desde el año pasado un duro enfrentamiento, que se originó luego de que el PE hiciera uso de unos $ 172 millones del Fondo de Garantía de la Caja Popular de Ahorros, a cambio de Letras de Tesorería. El gremio denunció ante la Justicia esa operación.
Los manifestantes estaban liderados por el dirigente nacional del gremio Carlos Cisneros y por el secretario general en Tucumán, Eduardo Bourlé. La protesta se extendió desde las 9.30 hasta las 11. Luego, la columna marchó por la calle, hacia la sede del gremio.
Según contó Cisneros a LA GACETA, un hostigamiento del D2 (inteligencia de la Policía provincial) hacia tres jóvenes vinculados con La Bancaria les colmó la paciencia y motivó el escrache. Se trata de los mismos jóvenes que fueron agredidos el jueves 28 de marzo, por una patota frente a la vereda de la Casa de Gobierno. En aquella ocasión, las víctimas estaban repartiendo por el microcentro copias de una publicación periodística sobre presuntos "negociados" del interventor de la Caja Popular, el legislador -en uso de licencia- Armando "Cacho" Cortalezzi.
El dirigente agregó que el lunes los tres jóvenes sufrieron un nuevo ataque, esta vez de los policías. "Cuando salían de desayunar de un bar cercano a la sede de La Bancaria, el D2 los interceptó; les sacaron los documentos y los quisieron detener. No lo lograron porque salió gente del gremio", contó el dirigente bancario. Agregó que el abogado GustavoMorales y Bourlé se dirigieron hasta la Dirección de Investigaciones. "Comprobaron que la 'Brigada' no tenía nada que ver. Es más, el mismo policía que los atendió les dijo que era gente del D2", añadió Cisneros.
A raíz de esto, decidieron escrachar ayer la casa del ministro. "El D2 depende directamente de Gassenbauer. Y como estamos hartos de él y del (secretario de Seguridad) (Paul) Hofer, vinimos a decirle si le gustaría que el D2 apriete a su hijo, a ese proyecto de pistolero, el legislador (Guillermo) Gassenbauer, como aprieta a nuestros chicos. No estamos dispuestos a (soportar esto)", advirtió. Según contó, interpusieron un pedido de hábeas corpus para los jóvenes agredidos: "ahora, para que estos tres chicos puedan transitar por Tucumán debemos recurrir a un hábeas corpus, ¡estamos locos!".
Cuestionó con vehemencia a los jueces Alejandro Javier Tomás y Juan Francisco Pisa, y al ministro Fiscal de la Corte, Luis de Mitri, debido a que, según dijo, no avanzan las denuncias presentadas por La Bancaria, por los incidentes del 28 del mes pasado. "Las causas están paralizadas; siguen durmiendo la siesta porque el delincuente de De Mitri no acelera la investigación. Si tiene dignidad debería renunciar", reclamó.
Cisneros justificó el escrache. "Seguramente mañana (por hoy) saldrá (el periodista de LA GACETA) Álvaro Aurane a decir 'el método fascista de escrachar a los funcionarios'. Bueno, nosotros debemos buscar la forma de defendernos", dijo. Además, lanzó una advertencia a Gassenbauer: "lo repudiarán en los bancos que vaya. Que haga él los trámites; que no mande al cajero, al ordenanza, al perro. Lo repudiará todo el mundo".
La Bancaria y el Gobierno mantienen desde el año pasado un duro enfrentamiento, que se originó luego de que el PE hiciera uso de unos $ 172 millones del Fondo de Garantía de la Caja Popular de Ahorros, a cambio de Letras de Tesorería. El gremio denunció ante la Justicia esa operación.
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