Lo secuestraron, lo torturaron y le quitaron sus tierras

Lo secuestraron, lo torturaron y le quitaron sus tierras

Terminan esta semana de declarar los testigos en el juicio de Jefatura de Policía. El primer testigo de la mañana fue Carlos Mena, secuestrado dos veces.

RECONOCIMIENTO. A principios de mes, sobrevivientes del centro clandestino volvieron a la Jefatura, con los jueces del tribunal. LA GACETA / JORGE OLMOS SGROSSO RECONOCIMIENTO. A principios de mes, sobrevivientes del centro clandestino volvieron a la Jefatura, con los jueces del tribunal. LA GACETA / JORGE OLMOS SGROSSO
25 Abril 2013
El Tribunal Oral Federal reabre hoy la ronda de testimonios en el juicio por secuestros, torturas, homicidios (entre otros crímenes) cometidos en los centros clandestinos de detención Jefatura de Policía y Arsenal Miguel de Azcuénaga.

El primer testigo de la mañana fue Carlos Mena, secuestrado dos veces (en 1975 y 1976) por una patota, supuestamente al mando de Roberto Heriberto Albornoz, imputado en la causa. "Tenía el brazo podrido, me ataban con alambre de púas", cuenta Mena, sobre lo que sucedió en la Jefatura.

Mientras estaba detenido en la Jefatura, vio al santiagueño Luis Alberto Lezcano, que continúa desaparecido. Mena dice que sus secuestradores se apropiaron de su finca "El taficillo" y de su casa en calle Córdoba al 200. Consiguieron que su mujer firmara los papeles bajo amenaza, mientras él estaba detenido.

En la causa hay 41 imputados, de los cuales ocho están en el penal de Ezeiza y escuchan las audiencias por videoconferencia y uno -en Tucumán- que está en su casa con arresto domiciliario, por razones de salud. El resto, alojado en el penal de Villa Urquiza, es trasladado en un colectivo para que presencie las audiencias en el TOF de Chacabuco y Crisóstomo Alvarez.

Para hoy está previsto que declaren cinco personas en lo que se conoce como Megacausa Jefatura II-Arsenales II: Mena, María Cristina Andina y Mario Ernesto Senco por la causa de Juan Manuel Carrizo, secuestrado el 20 de mayo del 76 y desaparecido hasta hoy. Se lo vio, sin vida, en la Jefatura.

También declararán Luis Roque Palomino, por la causa Díaz, Clementina Mora de Ritti por la causa Sesto: Lilia Estela Sesto (aún desaparecida). A su padre, Enrique Camilo Sesto, lo detuvieron, lo obligaron a pagar una coima y lo amenazaron para que no siga indagando. LA GACETA

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