"Quiero llegar a la Selección", dice con mucha timidez Florencia Gómez, sin darse cuenta de que su nombre quedó escrito para siempre en la historia del fútbol tucumano. Ella fue la primera niña en jugar en un torneo oficial organizado por la Liga Tucumana de Fútbol. "Ahora quiero divertirme", explica la delantera de San José Obrero, que tuvo una presentación que envidiaría cualquier profesional: a pesar de haber desperdiciado un penal, pudo marcar dos goles. "Estaba nerviosa porque estaba la fotógrafa", reconoce con una sonrisa tallada en su rostro.
"Polly", como la llaman todos, mamó el deporte antes de nacer. Su mamá es principal testigo. "Jugaba al fútbol todos los días y dejé de hacerlo cuando me enteré de que estaba embarazada de cinco meses de ella. Cuando la vi por primera vez en la Maternidad sabía que sería una buena jugadora", comenta Gabriela, que se emociona hasta las lágrimas al recordar el nacimiento de su hija.
Florencia vive en una humilde vivienda de la Diagonal Norte, a pocos metros de la avenida Presidente Perón, en Yerba Buena. El mismo lugar donde el avance de los countries amenaza con hacer desaparecer los potreros. Todos los vecinos recuerdan a la joven de delantera, que de muy pequeña ya armaba arcos con piedras en el campito de la cuadra para poder jugar picaditos con sus amigos. Desde siempre se la rebuscó para hacer lo que más le gusta. "No tengo pelota, se la pido prestada a un primo. ¿Botines? Blancos porque me gustan, pantalones cortos negros y la camiseta me la dan en el club", cuenta entusiasmada.
A los oídos de Jacinto Eusebio Roldán, que algo sabe de fútbol, llegó el rumor de una chica que la rompía. Él la vio jugar y le pidió que lo hiciera para San José Obrero. Fue el mismo ídolo de San Martín el que hizo modificar el reglamento para que "Polly" pudiera integrar el plantel de la categoría 2001. "Ella está contenta con lo que hace y la apoyamos. No está obligada a practicar ningún deporte que no le agrade. Con todo lo que se vive con la igualdad de géneros no hay obstáculos. Es más, el primer penal que le cobraron a su equipo, un compañero le cedió para que lo pateara", cuenta Daniel Sández, su tío.
Tan convencida estaba la familia en ayudarla a dar este paso, que hasta ya tenían decidido a presentar el caso como discriminación si es que no le permitían jugar de manera oficial. Pero no hizo falta ni plantear la amenaza, puesto que en la Liga Tucumana de Fútbol -como ocurre en Córdoba, Santa Fe, Estados Unidos y varios países de Europa- aceptaron la propuesta y "Polly" pudo cumplir su sueño.
"Fue muy lindo lo que viví. Me avisaron que sí podía jugar y todos en mi casa se prepararon para ese día. Mi tía me cocinó fideos y después, como a las 14, estuve en la cancha. Hice lo que me dijo que hiciera el profesor. Convertí dos goles y desperdicié un penal, pero lo más importante es que los chicos me hicieron sentir uno más del equipo", explica.
En la vida de esta niña todo es simple porque ella quiere que sea así. "Estudio mucho porque me gusta. Entreno martes, miércoles y viernes después de la escuela. Y cuando no tengo que practicar, juego con mis primos y mis amigos, especialmente Agustín (Cata) que vive a la par de mi casa", reconoce con dulzura.
Florencia cuenta que en su escuela, la Comercio Miguel Lillo, de Yerba Buena, sabían que estaba por cumplir con su deseo. El mismo que le había costado más de una discusión con más de un profesor de educación física que no veía con buenos ojos que quisiera jugar al fútbol con sus compañeros en vez de voley con las chicas. "Lo que más me gusta es Tecnología, donde te enseñan a armar casas. También soy buena en matemáticas", relata.
La delantera tiene muchos ídolos. La lista, por supuesto, la encabeza Lionel Messi, aunque también le gusta seguir atentamente a Rodrigo Mora, delantero de River, club del que es fanática. "No se sí quiero ser como ellos. Ídolo es el 'profe' Roldán que nos enseña todo el tiempo. Sí sueño, pero con jugar en la Selección, conocer la cancha de San Martín y la de los "millo". Mi padrino me prometió que me iba a llevar. Ahora espero que cumpla", comenta entre risas y ruboriza al destinatario del palo.Mientras "Polly" dialoga con LG Deportiva, los chicos del barrio ya comienzan a moverse en el campito. Ella está ansiosa. Le hierve la sangre para que la entrevista termine rápido, así pueda ir a jugar con ellos. "Sería muy lindo que otras chicas se sumen a los equipos. Lo más importante es que se puede, además te divertís un montón", lanza antes de irse corriendo al campito.
Puntos de vista
Compromiso
Me parece excelente que chicos y chicas se diviertan corriendo detrás de una pelota. Esto sólo tiene que darse en la etapa de formación, no así en mayores o inferiores. La llegada de una niña a las divisiones de los más pequeños generará un mayor compromiso de trabajo. Hay que verla como una protagonista más del juego y seguro que en la charla a los árbitros se buscará protegerla un poco más. (Por Carlos Salado, Director de la Escuela de Arbitros)
Crecimiento
Esto favorecerá el crecimiento del fútbol infantil. Con esta inclusión las niñas van a tener el mismo nivel que sus compañeros en la etapa de formación. A los técnicos de los planteles superiores le servirá muchísimo, ya que no tendrán que dedicar el tiempo a enseñar o pulir cuestiones técnicas y tácticas. El fútbol es un deporte que puede ser practicado por cualquiera. Erradicar ese tabú sirve mucho. (Por Florencio Robles, técnico de las "Santitas")
Ejemplo
El Comité Ejecutivo no dudó un instante en aprobar la iniciativa. El fútbol es tan sólo un deporte y no debe haber actos de discriminación. Que esta chica haya debutado es un ejemplo para que otras la imiten y haya muchas más niñas jugando. Por el momento autorizamos que haya dos niñas por plantel, pero esperamos que con el transcurso del tiempo esta norma sea modificada. Ahora hay que ayudarla a que se divierta. (Por Darío Zamorate, presidente de la Liga Tucumana de Fútbol)
Contención
Toda la familia está feliz porque a ella se la ve muy contenta. Nuestro hogar cambió desde que nos informaron que podía jugar en un torneo oficial. Ella practicaba de manera informal. Todo el tiempo libre que tenía lo dedicaba a jugar a la pelota con sus amigos. Ella tiene los mismos derechos que cualquier chico en jugar de manera oficial. Pero lo más importante de todo es que se encuentra bien contenida. (Por Daniel Sánchez, tío de Florencia)
Talento
Un día vino Florencia con su mamá y su tía. Se probó y quedó en el acto porque es una buena jugadora. De todas maneras, es una chica que se formó jugando los picaditos en la calle y hay que pulirla para que sea mucho mejor aún como por ejemplo a acostumbrarse a que le cobren offside. Este es un buen comienzo y ojalá dentro de poco haya muchos equipos que tengan chicas en sus planteles. Por Jacinto Eusebio Roldán, técnico de "Polly")