A la ex concejala Teresa de Heredia le robaron, le pegaron y la ataron en su casa

Dos hombres que vestían traje presionaron el botón del 1º "A", ayer a la mañana, en el edificio de Congreso 8. En ese momento, el portero se encontraba levantando unos escombros de la vereda, que forma parte del paseo de la Independencia. Gustavo Coronel no pudo verlos bien, ya que se encontraba de espaldas, pero escuchó que la empleada doméstica de la ex concejala y ex legisladora Teresa Felipe de Heredia respondió el llamado a través del portero electrónico. La mujer preguntó ¿quién es? y uno de los hombres se identificó como Andrés. Pensando que se trataba del sobrino de la dueña de casa, que se llama así, la empleada abrió la puerta y los hombres pasaron.

Pocos minutos después, a las 11.30, Coronel continuaba limpiando la entrada del edificio. Entonces bajó una vecina, que también vive en el 1º piso, para avisarle que había escuchado gritos. "Subí rápido por el ascensor, pero parece que ellos bajaron por la escalera", explicó el portero ayer a LA GACETA.

Al entrar al departamento, el hombre no vio a la ex concejala Felipe de Heredia. Sin embargo, rápidamente advirtió que las mujeres, y un conocido de ellas, estaban dentro de una de las habitaciones. Los intrusos las habían encerrado y habían dejado la llave puesta del lado de afuera.

Cuando Coronel abrió, las tres víctimas ya estaban quitándose las cintas de embalar con las que habían sido atadas. "Ella (Felipe de Heredia) no me decía nada, estaba en estado de shock", recordó.

El portero bajó corriendo y llamó a unos agentes de la Patrulla Urbana que caminaban por la zona. Luego se comunicaron con el hijo de la ex concejala, Daniel Heredia, que llegó pocos minutos después. De acuerdo a lo que pudo conocer el portero del edificio, la mujer había recibido golpes de puño. Pese a la violencia del ataque, Felipe de Heredia no perdió el conocimiento en ningún momento y fue trasladada en ambulancia a un sanatorio céntrico, ante las miradas de los curiosos que paseaban por la peatonal, a 100 metros de la Casa Histórica.

Hasta ayer a la tarde, la mujer de 84 años permanecía internada en observación. "Ella está bien y cuando pueda va a contar lo que pasó", le dijo a LA GACETA el hijo de la ex concejala.

Mientras tanto, vecinos y conocidos de Felipe de Heredia se acercaban al edificio para saber cómo estaba o simplemente confirmar que había sufrido un ataque. "¿Qué le ha pasado a la Teresita?", le preguntaba una mujer desde la peatonal al portero del edificio. Según contó Coronel, mucha gente suele visitar a diario a la ex concejala en su departamento.

La cartera

Poco antes de las 18, unos 10 policías salieron del edificio. Pertenecían a la división Criminalística y a la seccional 1ª cuyo jefe, comisario Jorge Alfredo Pereyra, se negó a dar declaraciones.

El jefe de la Seccional 1ª se mostró presuroso, según dijo, porque debía hacerse cargo del operativo de seguridad por una marcha en la plaza Independencia. Sin embargo, otras fuentes policiales confirmaron anoche que los ladrones se llevaron el teléfono celular de la ex concejala y la cartera que contenía una billetera con dinero en efectivo. Hasta ayer, la familia de la ex edil se movió con marcado hermetismo para evitar que se filtraran detalles del ataque ocurrido en pleno centro.

Un golpe en la cara

El robo en el departamento de la ex concejala repercutió en las redes sociales. Sorprendió que se diera en pleno centro.

La empleada abrió la puerta del departamento porque pensó que era un familiar. Cuando se dio cuenta, ya era tarde y entraron los ladrones.

La ex concejala recibió un golpe en la cara. Según fuentes extraoficiales no se sabe si fue un culatazo o un puñetazo.