27 Marzo 2013
La cuestión de la instalación de un casino en Concepción no terminó con la recomendación del obispo José María Rossi a ediles de esa ciudad del sur. La concejal María Estela del Valle López, del Frente Para la Victoria, consideró que no hubo un debate, sino un intercambio de ideas, e insistió en que los representantes del oficialismo también estuvieron en contra de que se abra una casa de juegos de azar, como quiere la Caja Popular de Ahorros.
"En la reunión de ayer, ninguno de los concejales que hoy declara en el diario (en referencia a la nota "Ediles del PJ critican...") elevó la voz para decirle al obispo que estaba en contra, nadie fijó posiciones, y -sobre todo- no hubo debate, sino una charla amena en la que hablamos del Papa Francisco y de cuestiones de la ciudad", insistió López.
La concejala coincidió con la postura de la Iglesia, contraria a la apertura de un casino en su ciudad. "No es verdad que hay casinos en todas las ciudades, ni tampoco que este tipo de emprendimientos atraiga el turismo", aseguró López esta mañana, en diálogo con LA GACETA.
El lunes, luego del pronunciamiento de Rossi, el gobernador, José Alperovich y el intendente, Osvaldo Morelli, suspendieron definitivamente la iniciativa a fin de evitar una confrontación con la Iglesia. El mismo día, la empresa constructora retiró su personal y las maquinarias del predio en el microcentro de la ciudad. LA GACETA
"En la reunión de ayer, ninguno de los concejales que hoy declara en el diario (en referencia a la nota "Ediles del PJ critican...") elevó la voz para decirle al obispo que estaba en contra, nadie fijó posiciones, y -sobre todo- no hubo debate, sino una charla amena en la que hablamos del Papa Francisco y de cuestiones de la ciudad", insistió López.
La concejala coincidió con la postura de la Iglesia, contraria a la apertura de un casino en su ciudad. "No es verdad que hay casinos en todas las ciudades, ni tampoco que este tipo de emprendimientos atraiga el turismo", aseguró López esta mañana, en diálogo con LA GACETA.
El lunes, luego del pronunciamiento de Rossi, el gobernador, José Alperovich y el intendente, Osvaldo Morelli, suspendieron definitivamente la iniciativa a fin de evitar una confrontación con la Iglesia. El mismo día, la empresa constructora retiró su personal y las maquinarias del predio en el microcentro de la ciudad. LA GACETA
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