14 Marzo 2013
DESDE EL BALCON. Francisco dio su primera bendición "urbi et orbe" a la multitud reunida en la plaza de San Pedro. REUTERS
BUENOS AIRES. - Ante una multitud de fieles que se congregó en la plaza de San Pedro, en el Vaticano, el nuevo Papa, el argentino Jorge Bergoglio, pidió ayer que "el nuevo camino que comienza la Iglesia sea fructuoso para la evangelización".
En el mensaje que pronunció en italiano, solicitó, además, al pueblo que "rece para que Dios lo bendiga" en su pontificado. "Quiero hacer una oración por nuestro papa emérito Benedicto XVI", expresó desde el balcón de la Basílica, tras lo cual comenzó a rezar el padre nuestro.
Antes de entregar la primera bendición "urbi et orbe", Francisco dijo que el mundo debería emprender un sendero de amor y fraternidad. "Como ustedes saben, el deber del cónclave es darle un obispo a Roma. Tal parece que mis hermanos cardenales fueron casi al fin del mundo" para escoger al nuevo pontífice", manifestó.
Bergoglio se convirtió en el Pontífice número 266 en los 2.000 años de historia de la Iglesia Católica, institución que atraviesa por una crisis causada por escándalos de abusos sexuales, disputas y burocracia al interior del Vaticano y la propagación del secularismo. (DPA-Reuters)