Cristina, Evo y Mujica encabezaron los homenajes
Cristina arribó a Venezuela para participar de las exequias de Hugo Chávez en compañía de Pepe Mujica y de su esposa, Lucía Topolansky. Junto a Evo Morales son los primeros presidentes en participar del funeral del líder bolivariano. Se espera la llegada de Dilma Rousseff (Brasil) y de Rafael Correa (Ecuador).
CARACAS.- Los principales aliados de Hugo Chávez que llegaron a Caracas para participar de sus exequias iniciaron el tiempo de los homenajes, en medio del dolor y el llanto de miles de venezolanos que inundaron las calles y paseos públicos. Las calles caraqueñas se tiñeron de rojo, acompañando el cortejo fúnebre que llevaba el féretro del líder bolivariano fallecido a los 58 años, desde el hospital hacia la Academia Militar de Caracas.
Fieles y seguidores acompañaron el cuerpo del líder bolivariano a lo largo de seis kilómetros, trayecto que insumió más de cinco horas. El cortejo estuvo encabezado por el vicepresidente electo, Nicolás Maduro, en compañía del presidente de Bolivia, Evo Morales. El vehículo atravesó en su último tramo el paseo de Los Próceres, lugar donde muchas veces Chávez encabezó diversos actos militares y concentraciones.
La Presidenta Cristina Fernández que arribó en la mañana de ayer al aeropuerto internacional de Maiquetía "Simón Bolívar," no participó del cortejo. Fernández viajó en compañía de su par uruguayo José "Pepe" Mujica, y de su esposa, LucíaTopolansky, primera dama y senadora oriental, a bordo del Tango 01, junto a una importante delegación de funcionarios.
Cristina, Evo Morales y "Pepe" Mujica fueron los primeros presidentes en rendir homenaje a Chávez, ni bien se abrió la capilla ardiente en el Hall de la Academia Militar de Caracas. De pie frente al féretro presidencial cerrado y envuelto en la bandera de Venezuela, los mandatarios permanecieron firmes y compungidos mientras una orquesta ejecutaba el Himno Nacional venezolano, según pudo observarse en las imágenes en directo de los canales locales. Concluido este ritual, los presidentes se apartaron a otra zona de la capilla ardiente para dejar el lugar a una guardia de honor rotativa, con las altas autoridades de la República, en primer lugar, y los familiares directos del mandatario. Se aguarda la llegada de los presidentes de Brasil, Dilma Rousseff y de Ecuador, Rafael Correa.
La delegación argentina está conformada por los ministros Héctor Timerman (Relaciones Exteriores) y Julio De Vido (Planificación Federal); y los secretarios Carlos Zannini (Legal y Técnica) y Alfredo Scoccimarro (Comunicación). También viajaron en el avión presidencial el titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez; los jefes de las bancadas de senadores y diputados oficialistas, Miguel Ángel Pichetto y Agustín Rossi, respectivamente; el senador Aníbal Fernández, los diputados nacionales Andrés "Cuervo" Larroque y Eduardo "Wado" de Pedro, y el legislador porteño Juan Cabandié. (Télam-Especial)
Antonini Wilson y el "valijagate"
Uno de los momentos más polémicos en la relación entre Argentina y Venezuela fue el resonante caso "valijagate".
La madrugada del 4 de agosto de 2007, en uno de los tantos viajes realizados por funcionarios entre ambos países, una empleada de seguridad de Aeroparque requisó una valija en la que encontró US$790.550 cuyo ingreso no fue declarado. La valija era propiedad del empresario venezolano Guido Alejandro Antonini Wilson. Junto a él habían viajado el entonces encargado de controlar los peajes viales, Ricardo Uberti; el hijo del vicepresidente de la petrolera estatal venezolana Pdvsa, Daniel Uzcátegui y el titular de Enarsa, Exequiel Espinosa, entre otros funcionarios. Sin embargo, el hecho recién se filtró el 6 de agosto, luego de que finalizara un acto que Chávez, el presidente Néstor Kirchner y la entonces senadora Cristina Fernández compartieron en la Casa Rosada. La justicia, a pesar de las negaciones oficiales, confirmó la presencia del empresario en el acto, gracias a un video de Canal 7. En la Argentina, Uberti fue sobreseído, mientras que en Venezuela jamás se investigó.