"Mi lugar en el mundo es y siempre fue la televisión"

Es una de las caras más conocidas de la televisión local. Desde hace más de 15 años, Silvina Saleme Posleman pone su voz y su imagen al servicio de la información en la primera emisión de "División Noticias", el noticiero de Canal 8. Tan familiar se ha vuelto entre el público tucumano que, ante su total ausencia de la pantalla hace ya cuatro meses, muchos comenzaron a preguntarse qué había pasado con la conductora: ¿ya no forma parte del informativo? ¿Dónde estuvo todo este tiempo? ¿Qué nuevos planes tiene en mente?

Saleme se ríe de las especulaciones -contó que varias personas le han escrito o parado en la calle para hacerle esas preguntas, gesto que agradece- y aclara que su ausencia del canal se debe exclusivamente a que se tomó vacaciones. Un recreo largo, por cierto, pero a punto de terminar. "Tenía vacaciones acumuladas y decidí unirlas con las de este año; ¡terminó siendo mucho tiempo! Generalmente me gusta salir en épocas no convencionales, pero hay un nuevo CEO en Telefe que prefiere que el personal tome su descanso entre octubre y marzo, por cuestiones de organización. Así que eso hice. Pero ya regreso al noticiero: si no es la semana que viene, será la próxima", adelantó a LA GACETA.

- ¿Qué hiciste durante este tiempo de descanso?

- Hice un viaje de ensueño a EEUU, un país que me encanta por sus ciudades y también por la posibilidad de practicar el inglés. Fue espectacular: estuve en Nueva York, Los Ángeles, Las Vegas, Miami y hasta Hawai, un lugar que toda mi vida deseé conocer. Es más, el año pasado había intentado ir desde Los Ángeles, pero lo programé muy sobre la hora y no conseguí pasajes ni buena hotelería; así que me quedó pendiente. No suelo pensar mis vacaciones como algo frívolo y superficial, sólo para el descanso: las uso para vincularme con la historia y la cultura de cada lugar, para abrir la cabeza y absorber experiencias. También me encantan las distintas comidas: pruebo tooodo (risas). Así que tuve una conjunción de rélax con tiempo para cultivarme e instruirme. No hay nada mejor que aprender a partir de vivencias, por eso viajo cada vez que tengo la oportunidad.

- En las redes sociales publicaste que recibiste muchas ofertas laborales, ¿tuvo que ver con tu ausencia de la TV?

- Siempre me llegaron propuestas, pero toda mi vida le dediqué mucho tiempo al canal -hasta hace pocos años conduje las dos emisiones del informativo- y no podía comprometerme. Cuando dejé la emisión nocturna volvieron las ofertas: de hecho, hago conducción de eventos -cuidados, por cierto- y llevo adelante proyectos vinculados con la moda y el diseño. El hecho de no verme en pantalla también hizo surgir otros ofrecimientos y justamente ahora estoy analizando hacer un programa de radio, que suena interesante y que me dejaría tiempo para dedicarme a otras cosas. Sería la primera vez que encare un ciclo propio, pero aún no hay nada cerrado.

- ¿Extrañaste la televisión en estos cuatro meses?

- ¡Sí! Puedo estar en cualquier lugar del globo terráqueo, pero mi lugar en el mundo es y siempre fue Canal 8. Uno disfruta de sus vacaciones, por supuesto, pero extraña a los televidentes; yo doy y recibo mucho cariño. Me pasan cosas muy locas: cuando no existían Twitter ni Facebook, para mí las redes sociales eran las manos, los abrazos, el cariño de la gente en la calle. Y ahora eso me sigue pasando, pero se potencia con los mensajes en las redes, todos con muy buena onda. En este último tiempo me emocioné hasta las lágrimas, no sólo por el cariño de mis seguidores sino también con el de mis colegas, que preguntan por mí desde el lado de la preocupación saludable y no desde el chusmerío.

- Nombraste a las redes sociales, ¿qué importancia les das?

- No es una herramienta que use para hacer catarsis ni como un psicólogo, porque me parece que no es el lugar ni el mecanismo conveniente. Tampoco me desnudo en ellas, por así decirlo, ni subo fotos de mi familia, que tiene un bajo perfil y me tiene prohibido mostrar sus imágenes. Sólo la uso para tonterías o para cuestiones muy importantes, como campañas solidarias.